Criaturas de la noche

Eres un imbecil.

Los dos amigos estaban en la sala, durmiendo. Habían estado viendo películas y comiendo.

Era jueves, tenían que despertar para ir a entrenar al bosque.

-Mmmm Ralf.

-Que?

-Ya tenemos que levantarnos. Tenemos que ir a entrenar.

-No quiero.

-Vaaamos.

-Ño.

-¿Que les digo cuando me pregunten por ti?

-No lo sé, que mori. Ahora déjame dormir es paz.

-Ya levántate, o le digo a la niña loca que venga por ti.

-La verdad no me importa, es una niña muy agradable.

-¿Cuando hablaste con ella?

-Cuando te fuste con el imbecil de alado.

-Mmmm, oh, ok no vengas, yo me las arreglaré si me encuentro con ese imbecil.

-Mientras no te de duro contra el muro todo perfecto.

-¿¡Es encerio!?

-Ah como chingas ya voy.

-Wiii.

Se levantaron del piso, pos por que ahí durmieron, recogieron todo y se fueron a bañar, obviamente separados, se vistieron y salieron.

Al salir, Jean estaba platicando con una chica muuy hermosa, pelo corto y plateado. Más cjaoarra que el, güerita.

-¿Quién es ella?

-Su prometida.

-Mmmm ok, ee te dijeron que iban a venir por nosotros ¿no?

-Si, Jacson.

-¿Quién shingaos es Jacson?

-El alto, rubio, tiene novio.

-Mmmm mm creo que ta se de quien hablas.

Bip Bip.

-¿Es el?

-Supongo que si.

Se estacionó un carro azul, del cual salio un rubio. Eso captó la atención de Jean, nunca lo había visto por aquí.

El chico rubio se acercó a Libardo y Ralf que estaban afuera de su casa.

-Hey, soy Jacson, ¿se acuerdan de mi?

-Claro, nos as estado ayudando.

-Que bueno, vengan subanse a mi carro, hoy yo los llevo.

-A huevo, muchas gracias.

Jean veía al rubio como si lo pudiera matar con la mirada.

De verlo, no le agradaba, veía como Libardo subía a su coche.

Fueron hasta el bosque. Pará entrenar ahí.

-Bien, llegamos.

-Gracias por traernos.

-Claro.

-Hey, que bueno que ya llegaron, Lib ve con Scott el y liam te van a enseñar algunas cosas.

-Claro. Se va corriendo a donde están la pareja.

-Y tu Ralf, ven conmigo.

-Me vas a enseñar como matar a alguien con un bate?

-Jaja, te voy a enseñar a esconder un cuerpo.

-¿!Enserio!?

-No.

Y estuvieron así un rato, Libardo con cosas de hombres lobo y Ralf con armas.

Pasaron unas tres horas, después cada quien se fue a su casa, Jacson los volvió a dejar a su casa a los amigos.

Cuando llegaron Jean estaba en la puerta de la cas ade los chicos.

-¿Necesitan ayuda con el?

-No gracias, yo me encargo.

-Ralf no.

-Ralf si.

-Que haces aquí?

-Esperando a Libardo ¿tienes un problema?

-Si, el te dijo que no te quería volver a ver.

-Aja.

-Jean, vete a tu casa. Libardo ya se había bajado, y pos Jacson ya se había ido.

-Y por qué tendría que hacer lo tu me dices?

-Por qué estás en la entrada de mi casa.

-Wow, que padre.

-Eres un imbecil.

-¿Y con esa boquita comes?

-Ya me artaste. Y Ralf ke suelta un putazo en la cara a Jean.

-Oye que te pasa?!?!?

-Vete de aquí si no quieres que te de uno peor, y te vuelves a acercar a Libardo, vas a valer madres imbecil.