Capítulo 0

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-¿Cúantas veces necesito decirle esto? YO NO PADEZCO NI ANSIEDAD NI DEPRESIÓN NI NADA, QUE ESTOY BIEN VENGA HOMBRE! - Gritar no lo sacaría del psiquiatrico y Vegetta lo sabia bien, de hecho el sabia que eso acarrearia un sin fin de preguntas por su actitud explosiva y distante, pero nadie lo culparia lleva tiempo dentro de ese "hospital de rehabilitación emocional" como le solían llamar los paramédicos qué lo subieron a la camilla.

Vegetta estaba frustrado porque todavía no lo daban de alta a pesar de haber cumplido con todos los requisitos. El quería volver a su hogar con sus mascotas y su televisión, ese día en especifico quería estar frente a la pantalla pues se había enterado por Willy qué aquel Viernes 29 de Enero su hijo pelearia por un guante de oro. A Vegetta le hacía mucha ilusión ver a Brayan luchar en el ring, pero en su condición era imposible si quiera encontrar una televisión.

-Quiero volver a mi hogar porfavor, puedo hacer todo por mi cuenta no soy un niño- el azabache estaba triste y se notaba en su semblante, ni todas las pastillas del mundo ni las terapias le podrían quitar aquella tristeza que le producía el solo pensar en su niño pequeño luchando con sus guantes morados mientras el público gritaba su nombre sin control. Para Triple 7 se había vuelto un logro inigualable el qué su muchacho y la niña de sus ojos fueran los mejores peleadores de la arena.

-Sr. De Luque no puedo dejarlo irse todavía, mañana es su último exámen médico y necesita descansar- el psiquiatra frente a él se veía un poco conmovido por la situación, el hombre de ojos púrpura se había robado un pedacito de su corazón pues era el mejor paciente que había tenido en toda su extensa carrera. Aquel psiquiatra intento buscar la manera de compensar la molestia de su paciente pero no encontraba la solución- ¿Porqué estas tan ansioso De Luque? Dime la razón de porque mi mejor paciente hoy amaneció tan explosivo.

-Porque mi hijo pelea hoy por un guante de oro y no quiero perderme otro triunfo más en su vida ni en la vida de Boreal- la mirada púrpura se aparto del hombre con gafas y se dirigió a la gran ventana junto a él -Tal vez ya ni se acuerden de mi... Yo los enseñé a pelear como verdaderos boxeadores porque ahora que por fin son profesionales me confinan en estas 4 paredes, es que no lo entiendo... Solo quiero irme es mucho pedir- lágrimas caían por sus rosadas mejillas y lo que creyó qué sería un simple desliz se convirtió en un sollozo potente por tanta frustración qué le género recordar su posición, él no era él mismo hombre que hace años, se había vuelto delgado, las ojeras en sus ojos delataban qué ya hacía mucho tiempo que no dormía y por si fuera poco la ansiedad le estaba destrozando el esófago de tanto vomitar por el estrés y la preocupación. Aquel héroe de Karmaland ahora parecía un cadáver viviente, estaba mal pero al menos dentro del hospital había recuperado un peso adecuado para mantenerse de pie, el sueño seguía siendo un problema pero se compensaba con las crisis qué habían disminuido todo eso ante los ojos de muchos enfermeros y su psiquiatra qué hacían su mayor esfuerzo por salvar la cordura del azabache, todos dentro de el hospital lo amaban porque era dulce, amable y respetuoso, se había ganado el corazón de todos, lo que hacía más difícil para el personal médico oírlo llorar por las noches sin consuelo alguno.

-Samuel sabes que te quiero mucho pero en cuanto pases el exámen de mañana podrás ir a tu hogar- El hombre de cabello castaño y ojos grisaseos intentaba animarlo, acomodo sus gafas y sonrió con cariño para que el azabache se sintiera tranquilo.

-Pero tu y yo sabemos que estoy bajo advertencia-su mirada se posó en los ojos grises como esperando que aquel hombre joven se intimidara por su potente mirada- Yo no quiero que me cuiden! Quiero mi libertad de vuelta- realmente estaba nervioso la ansiedad ahora se estaba apoderando de él, se preguntaba ¿Y si no cumplo nuevamente con los requisitos? ¿Y si ellos tienen razón y todo este tiempo solo me aferraba a algo que no existe? ¿Y si los resultados del exámen o el mes de prueba salen mal y tengo que volver? Estaba comenzando a temblar, su respiración se aceleró, comenzó a sentir calor y comezón por todo el cuerpo, los ojos se le llenaron de lágrimas más gordas y pesadas qué las primeras todo ante él se nublaba.

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⏰ Última actualización: Nov 03, 2020 ⏰

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