Asesinato por docenas

No es lo que esperabas

[14819 Palabras]

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"Lo estoy viendo, pero todavía me cuesta creerlo", murmuró humildemente Lucy Heartfilia, los ojos marrones de la adolescente tetona pegados a su baño abierto.

"No eres la única Lucy; todavía estoy tratando de entenderlo también", comentó Titania de Fairy Tail, Erza Scarlet, mientras miraba fijamente el baño de sus compañeras, un fantasma de una sonrisa presente en sus hermosos rasgos.

"¿Saben que puedo oírlos, verdad?" El objetivo de sus miradas, Natsu Dragneel, les disparó una mirada agravada, sin apreciar en absoluto cómo le miraban con los ojos como si fuera un animal de zoológico. El mago del fuego de pelo rosa estaba en medio de abotonarse su camisa de franela negra y roja. Para completar el conjunto llevaba un par de vaqueros negros ajustados, que había metido en sus botas. Colgando alrededor de sus hombros había una corbata negra y debajo de su camisa, envuelta alrededor de su cintura, estaba la bufanda de su padre. Las apariencias rara vez le importaban a Natsu, pero incluso él tenía que admitir que se veía bien para su noche con su novia. Sí, señoras y señores, han oído bien: Natsu Dragneel yendo a una cita.

"Sigo diciendo que él la obligó a hacerlo. ¿De qué otra manera el cerebro de llama fría podría hacer que alguien como ella...?" Antes de que Gray pudiera terminar su declaración, un puño cortesía de Natsu conectado con su mandíbula que lo envió a la pared detrás de él. La fuerza del impacto fue lo suficientemente grande como para dejar un contorno corporal con una serie de grietas que se extendían en todas las direcciones. Acostumbrada a los actos de violencia física de sus compañeros de equipo, que normalmente terminaban con la destrucción gratuita de algo (o de todo) en su zona, Lucy ni siquiera se inmutó ante el daño causado en su apartamento. En lugar de estresarse por el daño hecho, la rubia simplemente se dedicó a planificar qué trabajo en la junta de peticiones pagaría las reparaciones, así como a practicar el inevitable discurso que daría para explicar a su casera cómo su pared ahora tenía una huella corporal.

Parado de pie, en su pose de firma, el mago de Ice-Make se preparó para tomar represalias pero hizo una pausa inmediata cuando sintió que la temperatura en la habitación fluctuaba de caliente abrasadora a fría como un hueso.

"Gray..." Erza, que se situó en la cama de Lucy, cruzó los brazos y cambió una pierna por la otra con impaciencia. Con una mirada que parecía asomarse a su alma, no hizo ningún movimiento para impedir su siguiente acción, pero habló con tal volumen y autoridad que era evidente que si continuaba, el dolor y el sufrimiento le sobrevendrían. Gray no tenía que ser un genio para saber que ella le estaba haciendo un agujero en un lado de su cabeza; prácticamente podía sentir sus ojos perforando su cráneo.

En el otro extremo de la habitación, Natsu gruñó a su rival con desprecio. Había querido continuar su asalto y golpear al insensible mago de hielo contra las tablas del suelo, pero se encontró bloqueado por su compañera y favorita, la dragón slayer. "Gracias Wendy", dijo con una cálida sonrisa que hizo que el rubor se extendiera por las mejillas de la joven Dragón Slayer del Cielo.

"No es ningún problema. No querrás parecer sucio para Yukino-san", le recordó ella, mostrándole su propia sonrisa encantadora que le aliviaba de su ira anterior.

"Hehehe, buen punto." Arrugando suavemente su pelo, volvió a entrar en el baño. Durante un breve período, pensó en peinarse de otra manera pero decidió que estaba bien así, recordando que un comentario que Yukino había hecho sobre su pelo era una de las cosas que le gustaban de él. Cambiando de enfoque, intentó atarse la corbata pero rápidamente se frustró por lo difícil que era.

Después de ver a su compañero fallar su cuarto intento y casi quemar la corbata por la ira, Lucy se encargó de ayudarlo. Los años de ver a su madre hacer la tarea para su padre valieron la pena ya que ella ató la corbata sin esfuerzo en el tiempo que le llevó a él parpadear. Suspirando aliviada, Natsu le sonrió. "Gracias Luce, la cosa fue una pesadilla."