Aunque la Agonía, deba de existir.

El peso del corazón, el costo de una vida.

#Leer descripción antes de comenzar con el primer capitulo de esta historia, dure mas escribiéndola que realizando este capitulo#

Alier, ese es el nombre que me fue impuesto por el gran padre del todo...

Soy o al menos, alguna vez fui... Alier, el músico demoníaco de la conquista terrenal, en mi opinión un apodo bastante complicado e innecesario para un simple músico capaz de controlar a las personas o obligarlas a cometer acciones aun peores mientras mas pecados oscurezcan sus almas. 

( Con mis dotes, pude tener un futuro prometedor... ¿quien diría que por el amor debía acabar con todo aquello? ). Mientras pensaba en esto, soltaba un suspiro dolorido, mi sangre por las paredes estaba esparcida y una sombra imponente frente a mi, mientras de rodillas tratando de levantarme me encontraba pude observar como levantaba su espada con rabia y se preparaba para decapitarme...

En aquellos breves momentos antes de que la espada alcanzara mi cuello, los momentos de mi vida mas felices iluminaron mis momentos finales, olvide el dolor para sonreír sabiendo que mi amor no correspondido estaba lejos de aquí y todo se volvió oscuro...

#Siguiente capitulo:#

Aquella deidad, de aquella canción.