𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟿

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De regreso a clases Camilo solo se mordía las uñas nervioso de volver a ver a Ethan después de lo atrevido que había sido aquel día en la fiesta de Dylan.

No era una excusa pero si aquel licor que Joel le dio a escondidas de todos,le dio el valor de hacerlo, pues necesitaba otro trago de esos ahora mismo porque realmente si pasó los límites.

Por Dios, era el maestro de su hijo, no sabía si Ethan tenía pareja y por lo visto aquel día aseguraba que no, pero de todos modos sabía que había sido descortés.Esperen...Camilo no sabía que era descortés así que sólo estaba divagando.

Finalmente cuando llegaron al colegio y salió de su auto junto con su hijo quien tarareaba una canción infantil,caminó lo más rápido posible para irse más rápido. Pero antes de hacerlo Ethan le sonrió levemente y de inmediato se dijo a sí mismo que no importaba, lo hecho hecho estaba y no debía arrepentirse de eso.

El maestro Ethan era sexi, listo, amable, y todos los niños lo querían así que entraba en el paquete completo de personas con las cuales Camilo saldría más de dos veces en su vida.

-Buenos días, maestro Ethan.-Saludó Joaquin mientras le daba un pequeño y rápido abrazo.

-Buenos días Joaquin, los niños ya te están esperando en el salón ansiosos.

Eso hizo que Joaquín sonriera más grande y que saliera corriendo después de despedirse de su padre quien lo veía orgulloso.

-Señor Gress.-Siguió Ethan y el nombrado se atrevió a verlo.-Buenos días.

-Buenos días.-Contestó casi nervioso, porque los verdaderos nervios estaban en su mente peleándose entre sí.-Bonito día,¿cierto?.

Ethan volteo hacia el cielo nublado, con la neblina haciendo que los edificios no se vieran del todo.Lo más seguro es que lloveria.

-¿Si?.-Preguntó.-Creo que si,bueno, cada quien sus gustos.

Camilo se insultó mentalmente y Ethan solo rió al verlo fruncir el ceño.

-Que tengas suerte en el trabajo.-Siguió Ethan dando por terminada la conversación, y eso hizo a Camilo fruncir el ceño.

-¿Quieres tomar un café?.-Habló de repente cuando dio media vuelta y el maestro sintió sus ojos brillar más de lo normal.

Pero después recordó el tono, y parecía casi obligado.

-Me lo dices cómo amigo...o cómo jefe.

Camilo suspiró yendo de nuevo hacia él,apretando los labios y tragando pesado.

-Como ninguna de las dos...

-Yo si- digo.-Fingió toser.-Si, sería un placer.

Los dos sonrieron después de eso, y como si Camilo hubiera tomado otro trago de licor, se acercó y volvió a besar a Ethan cerca de los labios..

Finalmente se retiró y subió a su auto para hacer un baile ridículo en modo de triunfo. Sin saber que Ethan lo podía ver perfectamente.

Camilo sonreía sin ponerle atención a los hombres que hablaban en aquella junta,últimamente estaba distraído.

Por diferentes razones, no iba a decir que era por Ethan siempre pero en esa ocasión si era por él. -Entonces,¿qué opina señor Gress?.

Camilo vio a un señor de, no sabría decir tal vez cuarenta años,pararse frente a él mientras los demás esperaban respuestas.

-¿Cuáles eran las opciones?.-Contestó indeciso.

Mateo bufo mientras ponía los ojos en blanco y se acomodó mejor en su enorme silla.

-Camilo,¿tú crees que sea bueno debutar a un grupo de chicas en esta empresa?.

-Aaah eso.-Pareció entender.-No,definitivamente no.Tener un grupo de chicas en esta empresa como cantantes sería más difícil, tendríamos que cuidarlas más, tener que supervisar los acosos que tendrían,las burlas. Las chicas nunca se salvan de ellas, ya sea por su peso, por su apariencia, o por el simple hecho de que no logran llamar mucho la atención. Si tenemos grupos de chicos es porque,aunque suene feo decirlo, son más aceptados. Así que por el momento no tendremos chicas aquí.

-Pero-

-Fin de la reunión, todos a sus oficinas.-Se levantó de su asiento y salió siendo seguido por su primo quien lo veía con cara disgustada.-Sabías que si te enojas te haces viejo más rápido.

Mateo pareció importarle menos eso, para eso tenía sus cuidados faciales todas las noches.

-Camilo qué te ocurre.

-¿A mí?,nada,¿qué debería de ocurrirme?.

-Últimamente estás muy distraído. ¿No estarás enamorado?.

-Próximamente,tal vez, no sé pide una cita con mi secretaria para saber aquello. Adiós.-Cerró la puerta de su oficina cuando llegaron a esta y el mayor de los dos sólo maldijo por lo bajo.

-Ése idiota...

Joaquin lloraba casi escándaloso mientras estaba tirado en la tierra, con sus rodillas raspadas y los mocos saliendo de su nariz junto a las lágrimas de sus ojos

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Joaquin lloraba casi escándaloso mientras estaba tirado en la tierra, con sus rodillas raspadas y los mocos saliendo de su nariz junto a las lágrimas de sus ojos.

Tanto Luke como Erick trataban de calmarlo mientras le acariciaban el cabello y  le soplaba las rodillas.

-Ya no llores Joaco, iremos con el maestro Ethan para que te ponga algo en tus rodillas y puedas seguir jugando,como con la mordida de Emilio. ¿Recuerdas?.-Luke lo vio asentír aún entre llanto y eso solo le hizo preocupar más.

-¿Qué ocurre aquí?.-Preguntó Emilio llegando con Alex y Dylan a su lado.-¿Quién hizo llorar a Joaquin?.

-¡Nadie!.-Se apresuró a decir Erick.-Estábamos jugando a las traes y Joaquin se tropezó con una piedrita. Mira, es esta.-Levantó su mano con la piedra entre sus dedos.

Osorio fruncio el ceño y se acercó a Joaquin, se puso de rodillas a su lado y le limpió las lágrimas con sus dos manos.

-Tranquilo Joa, ya no llores,ten.-Sacó de su lonchera una cajita de leche de fresa y cuando la abrió en su totalidad habían muchos chocolates y paletas.

Eso solo hizo a Joaquin detenerse y ver los dulces.

-Los compré todos para ti,si ya no lloras puedes comerlos.

Joaquin asintió y agarró el primer chocolate, lo abrió y empezó a comerlo aún entre hipidos y alguna que otra lágrima bajar por sus enormes mejillas.

-Que bonito te ves así.-Siguió el mayor besando las mejillas humedas de Gress.-¿Aún te duele?.-Preguntó viendo el vendaje en su cuello.

-No.-Negó agarrando el chocolate que Emilio había quitado de su envoltura para que lo comiera.

Emilio siguió mimando a Joaquin, porque a pesar de su corta edad sabía lo que eran los sentimientos y él sentía todos los sentimientos del mundo juntos en su estómago cuando lo veía.

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