Uñas color rosa

𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟷𝟾

Era domingo por la mañana, Camilo llegaba a la casa de su madre para recibir a Joaquín y llevárselo a casa después de la cita con Ethan.

Habían pasado un agradable día, se conocieron mejor y más de lo que estaban haciendo, claro, si ya conocían cada rincón de su cuerpo ¿cómo no iban a conocerse completamente?. La puerta de la casa de dos pisos se abrió dejando ver a la señora Gress y a Joaquín quien era cargado por ella mientras tenía pequeñas lágrimas en sus ojos. Joaquín aumentó su llanto en cuanto lo vio y de inmediato estiró sus brazos hacia el moreno quien lo cargó, sintiendo la naricita de su hijo picar en su cuello al refugiarse en este.

-¿Qué ocurre?.-Preguntó Camilo entrando a la casa cuando su madre le dio el paso.

La señora Gress solo se encogió de hombros recogiendo los juguetes de su nieto mientras las acomodaba en el sillón de cuero colo negro situado en frente de una enorme pantalla.

-Sólo tenía miedo.-Contestó simple sacando un sonido ronco de su garganta al agacharse de nuevo, la edad ya no la respaldaba mucho.

-¿Miedo?.-Preguntó y Joaquin salió de su escondite aún llorando.

-¡Es que tú no viniste por mí ayer y yo tenía mucho miedo de que ya no regresaras y me dejaras sólito!.-Sollozó aún más recio y Camilo le sonrió tierno al escucharlo, abrazándolo y haciendolo más bolita mientras lo apresaba entre sus brazos.

Porqué Joaquin era tan chiquito ante Camilo,era como una masita moldeable y eso para el moreno era muy tierno.

-Tonto.-Siguió él.-¿Cómo puedes pensar que yo te dejaría?,es más ¿cómo puedes simplemente pensar que yo podría vivir sin ti?.

-Bueno.-Joaquin bajó la vista hacia sus manitas las cuales jugaban entre sí.-Es que mamá se fue porque no me quería,yo pensé que tú también lo harías.

Camilo suspiró y vio por un segundo a su madre quien sólo negó con la cabeza y se metió a la cocina de inmediato evitando el tema, ella no era quien para hablar de eso. Si, tal vez sí podía decirle cuando Camilo y Ethan se besaban, pero sobre su madre ya era otro tema.

Finalmente Camilo besó la frente de su hijo en un beso largó y después lo dejó en el suelo,poniéndose en cuclillas frente a él para acariciarle por un segundo los cabellos.

-Joaco, ya hablamos de esto hace mucho. Tú mamá si te quiere, ella y yo simplemente nos alejamos porque aveces las parejas tienen sus diferencias.

-¿Y por qué se fue?.-Preguntó más bajito.-Ella no quiere verme, ¿verdad?.

-Joaquin,no es que no quiera verte. Mamá te ama mucho, más de lo que te puedes imaginar, pero ella tiene trabajo ahora. ¿A caso no quiere ver a tu mamá en la portada de una revista como algunas veces salgo yo?.-Joaquin asintió lentamente.-Entonces debemos dejar que mamá trabaje, ella vendrá a verte y cuando lo haga llenará esas mejillas de besos con dulce,¿te gustaría?.

Joaquin volvió a asentir pero esta vez más emocionado, dejando las lágrimas de lado y yendo a abrazar a su padre en un enorme y grande abrazo de oso.

Cuando por fin llegaron a la casa, limpia claramente después de todo el desastre de la noche anterior, Joaquín se dirigió de inmediato a su habitación para jugar con sus juguetes y Camilo a su oficina diciéndole a su hijo que gritara si algo ocurría, obviamente dejando la puerta abierta para escucharlo mejor.

Después de un rato vio como su hijo salía de su habitación con hojas blancas y un enorme paquete de crayolas para bajar por las escaleras con cuidado. Sabía que a Joaquin le gustaba ver las caricaturas mientras dibujaba así que simplemente lo dejó pasar y siguió con su trabajo.

Una hora después, cuando ya no sentía su trasero de tanto estar sentado, se estiró escuchando sus huesos tronar y finalmente se levantó para ir a encargar algo de comer, no tenía muchas ganas de preparar comida y además era domingo, nadie hacía de comer esos días de flojera. Bajó las escaleras rápido y cuando no vio a Joaquin en la sala, aunque la tele estaba prendida, lo buscó en la segunda sala más pequeña y ahí lo encontró, rayando las paredes alegres.

Abrió los ojos mientras ponía las dos manos en su cabeza.

-¡Joaquin!.-Gritó y el nombrado dio un pequeño salto, escondiendo de inmediato la crayola roja detrás de él.-¿Qué has hecho Joaquín Gress?.-Se acercó a él en pasos rápidos y se agachó a su altura.-¿Sabes cuanto trabajo me costo pintar esta pared porque tu madre quería un nuevo color?, Joaquin cómo pudiste, esto esta muy mal, para eso te compro paquetes con cientos de hojas blancas, no debes hacer esto.Esto es muy malo, solo estás haciendo gastar a papá.

Los ojos del pequeño se llenaron de lágrimas de inmediato y su labio bajo tembló, en segundos ya estaba llorando escándaloso.

-No, espera.-Camilo se asustó un poco.-Joaquin ya no llores.-Acarició sus cabellos y le dio un pequeño abrazó para después alejarse y ver a dónde Joaquín rayaba antes.Viendo así a dos hombres tomando de la mano a dos niños y abajo, con letras algo chuecas, escrito un "Mi nueva familia" y un enorme corazón a lado.

Y eso hizo que el corazón de Camilo estallara por la ternura que estuvo guardando gracias a Joaquín.

-Joaquin.-Murmuró.-Esto...es muy bonito hijo,pero no debiste rayarlo en la pared.

-Pensé que si lo dibujaba en la pared tú no podrías botarlo. Vi al papá de Erick tirar a la basura el dibujo que le hizo , y yo no quería que tú lo hicieras.

-Joaquin, yo nunca haría algo así, tú muy bien sabes donde está la carpeta llena de tus dibujos. Aún así.-Se apresuró a decir.-Es muy bonito de tu parte incluir a Ethan y Dylan a nuestra familia, solo por eso no volveré a pintar la pared.

Joaquín sonrió aún con el rastro de lágrimas en sus mejillas y emocionando asintió.

-La abuela dijo que si Ethan fuera una mujer él tendría un bebé tuyo en la panza, así como mamá Rose me tuvo a mí. Ella dijo que tú y él vinieron a hacer cosas de mayores a la casa, pero yo no entendí muy bien que es eso, ¿a caso se pusieron a trabajar ó a hablar del presidente como lo haces con tío Alejandro y tío Jackson?.

Camilo rió nervioso y sonrojado, se levantó de nuevo y agarro la mano de Joaquín.

-Qué cosas dice tu abuela, no le hagas caso, vamos a que te bañes y después comemos,¿de acuerdo?.

-Papá.-Los dos comenzaron a caminar.-La abuela también le dijo al abuelo que te comerías al maestro Ethan, los escuché mientras hacían la cena,¿de verdad te lo comiste?.

Camilo apretó los ojos negando y tragandose las groserías.

-Claro que no, cómo podría hacer eso yo. Tus abuelos son viejos, no debes hacerles caso,a veces ellos deliran.

Joaquín asintió subiendo las escaleras sin soltar la mano del moreno.

-Papá.

-¿Qué ocurre?.-Se detuvo y volteo a ver al menor quien lo veía fijamente.

-¿Estás enfermo?,tu cara esta muy roja, y cuando la mía se pone así está caliente, y cuando está caliente yo estoy enfermo.

-No estoy enfermo, solo es el calor, ¿entiendes?.-Los dos siguieron su camino.

-Okeeey...

Xd
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Tengo una nueva adaptación por si gustan ir a leerla ❤️