Sabes a Caramelo ♡WowKwan♡

ÚNICO

ByeongKwan despertó por los brillantes rayos del sol, se encontraron recostado sobre el gran pecho de su pareja, sus piernas enredadas entre si, un brazo fuerte sosteniendo su cintura; sonrió embobado inhalando el aroma varonil que SehYoon emanaba.

Sintió unos labios cálidos en su coronilla y su sonrisa engrandeció.

-Buenos días gatito -susurró ronco debido a que seguía medio dormitado.

-Buenos días Yoonie~ -saludó mirando los ojos medio cerrados de su chico, soltando una pequeña risita- ¿aún quieres dormir? -preguntó acariciando su pecho.

-No -respondió cerrando por completo sus ojos.

Hubo silencio por unos minutos- ¿te dormiste? -susurró suavecito notando la respiración calmada de su chico.

-No -susurró de igual forma.

-¿Por qué cierras tus ojos? -preguntó delineando su pecho descubierto.- ¿tienes sueño?

-No -abrió los ojos- es que huele delicioso, tanto que me trae calma -dijo entre una sonrisa viendo los ojos curioso del menor, mientras movía su naricita en busca de receptar algo.

-No huelo a nada -lo miró confuso.

De repente y sin previo aviso, fue tomado de las caderas y puesto debajo de aquel cuerpo grande de su pareja, provocando que se sonroje de inmediato.

-¿Q-qué haces? -preguntó mirándolo.

SehYoon no se molestó ni en hablar, simplemente fue acercando su nariz al cuello del menor inhalando el dulce aroma natural de la piel de porcelana.

-Huele a caramelo -susurró aun estando en su cuello, provocando que al pequeño se le ericen los pelos y se sonroje aún más- Hueles a caramelo -dio un besito en su cuello para luego mirarlo y sonreír. El pequeño tapaba su rostro por la vergüenza.

-N-no digas es-esas cosas -meneó su cabeza.

Con cuidado y amor fue quitando las pequeñas manitas que cubrían aquel rostro que tanto amaba.

-No me prives de tu belleza -expresó al ya poder observar su rostro sonrojado- te amo Kwanie.

-Y-yo también te amo.

SehYoon sonrió en grande acercando su rostro a la mejilla del menor, dejando un beso sonoro y cálido allí, riendo por el pequeño quejido del menor.

Luego volvió a inhalar su cuello, dejando pequeños besos por allí, sintiendo a su chiquillo removerse debajo de él.

Se tomo el tiempo de apreciar cada facción de su amado, sonriendo y diciéndose a si mismo lo afortunado que era. Nuevamente acercó su rostro al del menor, dejando un recorrido de besos en todo su rostro, mordiendo levemente al llegar a la barbilla, escuchando el suave suspiro del menor.

-Eres tan bonito -soltó acariciándolo al ver sus ojos cerrados por el momento cálido.

Poco a poco y como si fuera un perezoso los abrió viendo la gran sonrisa del mayor provocando que también sonría.

-¿Por qué eres así? - SehYoon lo miró extrañado -¿por qué eres así de perfecto? - los dos se miraban con ternura.

-Porque soy tuyo -besó su naricita para luego morderla suavecito riendo ante el quejido que el pequeño soltó.- Que soniditos tan dulces.

-Eres un malo -reclamó sonrojado y riendo de igual manera.

Sonrió acercando nuevamente su rostro, observando esos labios gruesos, rojizos y provocativos que el menor tenía; los dos cerraron los ojos dejándose llevar por el momento de calidez.

-¿Me dejas probar tus labios? -susurró sobre estos.

-Hazlo -le dio paso susurrando de igual manera.

Poco a poco se fundieron en un beso cálido y profundo, un beso que dictaba amor por doquier, un beso por más meloso y cariñoso, un beso que llenaba sus corazones y almas, un beso que esos dos amaban.

Pequeños suspiros salían de la boca del pequeño siendo atrapados por el mayor, quien también se tomaba espacios para susurrar pequeños "te amo" sobre los labios regordetes de su chico.

-Por ti no me importa la diabetes -dijo al separarse completamente, volviendo a admirar la cara del menor, sus mejillas sonrosadas y labios mas rojizos debido al beso.

-¿Q-qué diabetes? -en su voz detonaba preocupación.

Rió leve acariciando la mejilla de Byeongkwan- Es que sabes a caramelo -dio un beso casto- y no quiero dejar de probarte -dio otro beso- así que no me importa si me da diabetes por ser adicto a mi dulce niño -susurró sobre sus labios para volver a dar otro beso cálido.

-Eres un tonto -dijo riendo bajo y dejándose dar mimos.

-Pero soy tu tonto -sonrió- tu tonto enamorado.

Los dos se sonrieron calidamente para luego fundirse en nuevos besos y abrazos, demostrándose el amor mutuo que se tienen, un amor inquebrantable.

Aquella mañana del sábado SehYoon solo quiso probar el dulce chico recostado sobre su pecho, y lo hará por el resto de sus días.

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-Eres mi dulce preferido Kim ByeongKwan.

-A ti no te gusta el dulce.

-Pero me gustas tú.

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"El amor no es el simple hecho de una atracción, ya sea sentimental o sexual, el amor es aquel sentimiento que te permite ver más claro el mundo, aquel sentimiento que te vuelve alguien que no pensaste ser pero que te enorgullece"