➥ ❞ Sólo Una Pesadilla. ❞ [Nightmare×Todos]ఌ︎ [PAUSADA]

Ω×- Prologo -×Ω

†~ Narrador Omnisciente.

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Era una madrugada ciertamente "Normal" en el castillo de un esqueleto tan oscuro y baboso como su alma.

Apenas se asomaba el sol radiante por la ventana de Nightmare, indicando que ya había amanecido. 

Aquel brillo inminente del amanecer justo iba atravesando por dónde estaban sus cuencas, en ese transcurso de tiempo, empezaba a tener algo de molestia, debido a que quería seguir durmiendo por un poco más de tiempo.

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Aún teniendo las cuencas cerradas por la pesadez del sueño, se propuso a pensar un poco...

llegando a la conclusión de que... 

"Algo anda mal".

Era cierto, algo andaba sumamente mal, algo que quizá no pensaba que llegaría el día.

El que solía ser aquél villano oscuro se levantó de golpe de la cama. Sentía que era más liviano de lo que solía ser antes, cómo si no cargara con ningún peso sobre él.. como era de costumbre.

Podía llegar a ver con sus dos cuencas, sintiendo aquella sensación extraña.. luego de tantos años. 

Pero había algo aún más importante que eso para él ahora.

Empezó hablar para sí mismo, mientras tocaba suavemente su cuerpo sobre sus delicadas prendas antiguas .

"Soy yo o el lugar es más grande?"

Nuevamente, Estaba en lo correcto.
Fue corriendo al baño, portando un gran estado de miedo y nerviosismo sobre sus pensamientos.
Trató de mirarse en el espejo del baño, pero apenas llegaba a verse, era demasiado alto para él... empezaba a temer lo peor. Ya sabía lo que sucedía.

Delicadas lágrimas de color morado cayeron de sus cuencas, con algo de temblor en sus manos hasta las muñecas, agarró un espejo de mano que había colgado en ese baño.

Él estaba por soltar un grito de miedo y angustia. Pero simplemente no lo hizo, sabía que si lo hacía iba a llamar la atención de todo el castillo, y eso era lo que menos quería en este momento, llamar la atención de todos sus aliados y que ellos se burlaran de él o peor, que lo vieran como un ser inferior.-

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Pasaban las horas, cada uno de los integrantes del castillo despertaba de manera tranquila, uno a uno iban con pereza a "desayunar", a pesar de que ya era la hora del almuerzo.

...Aunque...

El pequeño príncipe de las pesadillas seguía llorando, bajo el resguardo de sus mantas de la cama, aún no podía creerse que volvió a su forma original.

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⟪🥐❌⟫Pov. Cross.

[13:30]

Ya eran las una y media de la tarde. El jefe seguía sin aparecer; esta actitud es rara en él. Siempre es el primero en despertarse, salir de su cuarto y despertar a todos para desayunar temprano, aparte de darnos tareas para hacer durante el día.