Nunca había esperado escuchar eso de Jimin, pero sus palabras lo llenaban de paz, se aferro más al abrazo, sintiendo el dulce aroma de su amigo, y fue como si estuviera en su hogar, los brazos de su alma gemela lo hacia sentirse seguro, protegido, y amado.
Jimin acariciaba la espalda de Tae a la vez que le cantaba una canción, el haría de todo para que su niño bonito este bien, su mejor amigo, su alma gemela, su menor, que siempre va a cuidar sin importar que, por el que estaría dispuesto hasta dar su vida y más.
-¿Estás más tranquilo Tae?- preguntó Jimin, pero no hubo respuesta.
Miro a Taehyung y pudo ver como se había quedado dormido, es muy triste ver como alguien llora hasta quedarse dormido, pero le alegro estar ahí para el, para que no se sintiera solo.
-todo estará bien mi niño -susurro y beso su cabeza. -te lo prometo Taatae