El inicio de la magia

18 1 0
                                    

"Es positivo sentirse asustado, significa que aún tienes algo que perder en el camino".

Quien dijo eso muy probablemente era un idiota, pero dejaré a un lado el citar frases de shows famosos de televisión dramática, para ahora ser yo el dramático.

Me resulta curioso, cuando dicen que el tiempo puede sanar todo, ¿Es eso verdad?, En mi opinión, son frases que la gente utiliza para dar o darse consuelo en una situación difícil, todos alguna vez lo hacemos, pero, ¿Que tan cierto es?

El tiempo en muchas ocasiones en lugar de sanar solo hace todo peor, más confuso y más borroso.

Por lo que he vivido, siempre he sido una persona bastante aferrada, muy obstinado a hacer las cosas hasta que consigo el resultado que quiero, no me cierro en como hacer las cosas pero si en el resultado final y bueno hay opiniones divididas entre si es bueno o es malo.

Por el lado profesional, puede ser algo bastante provechoso, el aferrarte a tus ideales, serle fiel a lo que siempre haz querido y sobretodo tener la fuerza para no desistir pese a las adversidades.

En ese aspecto la verdad es que me ha sentado demasiado bien, pero en cambio en las relaciones personales todo es mucho más complicado.

Soy una persona que no se rodea de mucha gente en su círculo social, por lo cual cuando logro hacer buena química con alguien para mí es muy especial, mi cariño crece de manera muy desatada y sin condiciones.

Y cuando de eso sale algo bueno como una amistad o una relación amorosa, me entrego sin miedo hacia ellos.

Almenos eso hacía, hasta ahora, que en mi ecuación apareció un tercer factor a considerar, algo a lo que muchos llaman Dios, otros Destino y yo prefiero llamarlo Resultado.

Cuando conoces a alguien, ese alguien llama tu interés, es algo muy lindo pero cuando ese interés es mutuo, es de las mejores sensaciones en el mundo el saber que todo es equitativo y el asunto pinta muy bien.

Pero que tan estúpido tienes que ser para decirle a alguien que conociste hace algunas horas, que físicamente te gusta, bueno, ese es mi caso.

Conocí a una chica, por medio de una red social, la agregué sin tener idea de quién era, con el paso de los meses me aparecían sus fotos en mis redes, alguien de cabello largo, rojo muy oscuro, grandes ojos, labios muy delineados y con una sonrisa muy pronunciada.

A decir verdad al principio no le tome tanta importancia, solo seguí con mi vida ya que laboralmente me encontraba pasando por una nueva etapa y tal.

Hasta que un día, ví que ella subió una foto con una sudadera de una serie que a mí me gustaba, ese día estaba de buenas, así que pensé, ¿Por qué no hablarle?, Ahora gracias a la sudadera de su foto, se que tenemos un tema para hablar.

La conversación inició, la verdad todo iba de maravilla, como pensé, esa sudadera sirvió de trompolin para que la conversación fluyera bien, así que por algunos días hablamos, nada personal, hasta que ella me platico que justo estaba saliendo de una mala relación y que después de eso estaba triste por otro chico, a lo cual yo desde lo poco que nos conocíamos, intente darle un poco de ayuda con unos consejos y fue ahí donde la plática se tomó un poco más personal.

Comenzamos a platicar de experiencias personales, preguntas más densas y así pasaron algunos días más, ella me comentó que tenía una fiesta, que no tenía a quien llevar, yo en broma me invité solo, pero como digo era en broma así que solo lo ignoramos y seguimos hablando, pero esa broma dió paso a la seguridad de poder invitarla a salir.

Así que me animé, le comenté que si podíamos salir a algún parque cercano, simplemente a platicar, ella accedió, pero antes ella quería ir a comprar un regalo para su madre, que en algunos días era su cumpleaños, curiosamente nuestras madres comparten día de cumpleaños.

Así que ya con un plan bien establecido, quedamos de vernos en la esquina de una calle muy transitada en nuestra localidad a las 6 de la tarde, era horario de invierno así que para esa hora estaba oscureciendo ya.

Llegó el día, a decir verdad sentía algo de nervios ya que era obvio que por parte de ella también había un poco de interés pero procuraba no tomarlo de otro modo que no fuese amistad, salí del trabajo, llegue a casa algo tarde, 5:40 así que sabía que iba a retrasarme y así fue, terminé llegando media hora tarde al punto de reunión, que buena primera impresión, ¿No?.

Mientras caminaba por la cera, acercándome al punto de reunión, recuerdo haberla visto recargada en una pared, volteando hacía mi, ella me reconoció y de inmediato caminó hacía mi, la verdad me sentía muy nervioso, pero verla en persona fue muy diferente.

No creo en el amor a primera vista, es una tontería, pero la chica la verdad era bastante bonita.

Diario de un mitomano.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora