Scar hurts

Who the fuck are you?

+Jason+
La vida es curiosa, de momentos uno está robando unos neumáticos y para el otro instante vive en una mansión con un loco aficionado a las mayas y peleas callejeras y cuando menos lo esperas la muerte arriba. sería el fin, el fin de Jason Todd, pero nada es fácil con Jason Todd, con migo hay drama, aventura y una locura sin fin, reviví y me quise vengar, no lo logré...la vida es caprichosa, juré no volver a ayudar al anciano y heme aquí, empiezo a creer que solo soy un perdedor con suerte, un idiota que ni si quiera pudo robar unos neumáticos, no pudo ser un buen robin, ni para morir fui bueno, mi venganza?, un asco y esta misión... adivinen que?, tampoco pude jajaja, veamos si esta vez me quedo en el infierno por más de 24 horas.
Atrapado por más de... cuanto es 10,000 seg más algo así como… ¿un mes de tortura?, no es el tiempo real, espero que no, pero así se siente el estar encadenado en un bonito cuarto sin ventanas con tres o… 4 costillas rotas, y saben lo que es peor?, me robaron mi chaqueta! Esto es simplemente genial!
- Hey tú. – entre la obscuridad una suave voz, casi un susurro rompe los sollozos de dolor del chico obligándolo a ponerse en alerta. Esa voz trajo con sigo un destello, una barra de fulgor de color anaranjado (proveniente del otro lado del cuarto) marcó el suelo y la pared ensanchándose a medida que la puerta se abría, una sombra gigante se estira y se encoge a medida que ese pequeño cuerpo se acerca. “Batman?”, esperanza, esa persona la emitía, pero en definitiva, no era el murciélago, ni cualquier otro que conocido. Quien era?. el fulgor ajeno a su habitación  se escabulló entre las curvas de la figura femenina, la repelente claridad atravesó de manera brusca la habitación cayendo de golpe en el maltrecho rostro del mercenario, forzando a este a gruñir por la molestia y fruncir el rostro apretando los parpados con fuerza para tratar de ocultar sus urbes de tan dolorosa vista, dolía, joder todo le dolía, hace cuanto no veía la luz del sol?.
Se había abierto la única puerta de aquel cuarto y dejó entrara a la dueña de esa voz, una joven de no más de 18 años con una bata blanca y cabellera marrón- ¿Cómo estás hoy?-
- volvió a hablar la joven, con amabilidad
Jason queda estupefacto hace no más de 2 días que lo molieron a golpes y desde ese momento no tuvo contacto con alguna persona que no se viera a reventar de virilidad, se limitó a contestar sarcásticamente, ella no era una amenaza- ohh, dormí muuy bien, estoy muy descansado ya sabes, el suelo ayuda a la espalda y, en general, me siento animado, gracias por preguntar… ¿Quién eres?-escupió lo último sonando más curioso de lo que quería demostrar
La chica solo lo miró presumiendo sus finos rasgos, aun ocultos entre las sombras, el azul de su iris parecía brillar con la poca luz emitida opacando lo demás de su cuerpo, pero inesperadamente a pesar de su tan amigable presencia ella contestó neutral, algo que no parecía al acorde con tan atractivo rostro – Soy quien te atenderá esa herida y cuidará antes de que llegue tu juicio.-le restó importancia-
Jason contestó con una risita incrédula. - diablos, ¿me harán un juicio? pero que nobles y justos son estos asesinos.- fue inevitable reír a carcajadas-
La chica lo miró con los ojos bien abiertos, clara mente sorprendida, ¿es que acaso no sabía para quienes trabajaba?. Y en su rostro apacible se dibujó una sonrisa traviesa- ¿Y tú no eres un asesino "Red Hodd"?- entrecerró los ojos cuestionando la respuesta del mercenario, mantenía la sonrisa, seguro se estaba riendo a carcajadas en sus adentros-
El chico la miro ofendido y contesto cabreado a tan estúpida comparación-Yo mato criminales, a tipos malos que se lo merecen: Violadores, drogadictos, asesinos seriales! y la lista sigue y sigue princesa!, coff, cofff, haaghh coff- esa costilla, seguro había perforado un pulmón- no me compares con esos tipos.
La joven lo miró con ternura, pero la curvatura en sus labios permanecía- Ellos hacen lo mismo, juzgan.
Jason no entendía de qué diablos hablaba-  ??? coff
La joven al darse cuenta de la confusión del otro aclaró rápidamente- Los que te capturaron, ellos exponen las fechorías de los criminales, héroes, dictadores, mercenarios, asesinos, violadores, policías etc. en un juicio, los juzgan, y después los ejecutan.
Jason contestó entre carcajadas, esa niña no sabía nada- ¿dices que lo que ellos hacen es justicia?, que son los tipos buenos y coff, cof yo el malo?
La joven dejó de sonreír y la mirada neutral regreso a su rostro-No. Para mí, los dos son unos asesinos. Sólo que uno usa túnica y otro, un lindo casco. – con sus dedos golpeo levemente la frente del joven- Pero son lo mismo.- Se arrodilló y levantó la camisa de Jason, asustando al contrario, al quitar la camisa se mostró su torso maltrecho, ensangrentado golpeado y caliente -creo que morirás antes de llegar al estrado- su sonrisa parecía más una mueca, hundió una tela un agua y empezó a deslizarla por el cuerpo magullado, suave, lento, como si limpiase a la cosa más frágil e indefensa del mundo.
Jason permaneció callado, la chica de alguna manera le agradaba- JA!…Quien eres, niña?, me refiero a tu nombre señorita doctora.
Hablas mucho para tener un pulmón perforado.-la joven bateo por completo su interrogante- y no soy una niña
El de mechón blanco sonrío mostrando los dientes, se encogió en hombros y dijo manteniendo su sonrisa - tengo que intentarlo, moriré dentro de poco no? coff, haa haaa cofff tengo que hablar lo más que pueda, y tal vez... así lograr que entres en razón, a los tipos malos y a sus trabajadores no les va muy bien con migo -eso en definitiva sonó como una amenaza, tal vez lo era-
Pero la joven simplemente permaneció callada sumida en su trabajando en el costado del mayor- trataré de enyesar tu torso, pero antes de eso… la herida, tengo que hacer una operación “casera” dentro de ti, no tan profundo, tranquilo- dijo con una mueca-hay hematomas y coágulos de sangre que están creciendo por un sangrado interno, un pedazos de hueso, que supongo no es tuyo, además de que te guste meterte molares en el cuerpo- un diente?, hay un diente dentro de mí?, fue cuando ese tipo me mordió?, se le calló un diente y me lo dejó???- así que te lo quitaré, no puedo dejarlo ahí, o se infectará y bueno… morirás, después de eso coseré y listo, no tengo mucha anestesia, no me dieron la cantidad que les pedí, lo siento,-parecía angustiada incluso más que su paciente- pero hice una casera-dijo con emoción- con plantas y… no importa, inyectaré alrededor de la herida, será rápido. Dolerá.
Jason sonrío de lado y contesto orgulloso y nostálgico- He pasado por peores cos- AHHHHHHHHHHHHH, dios!, señorita! ¡¿¿Que tal una advertencia??!,-
La chica bricó por sus gritos y contestó divertida- Se la dije, le dije que dolería ¿o no?-
Jason se mordió el labio con desespero tratando de ocultar el siguiente grito desgarrador, la anestesia había empezado a trabajar,.. Tarde pero ahí estaba, agradeció que empezara a hacer efecto en su cuerpo, permaneció callado, con los ojos cerrados, aun consiente de lo que pasaba a su alrededor, indefenso ante el bisturí y las pinzas que profanaban y abrían su cuerpo, escuchaba los sonidos húmedos y el crujir de su interior, la chica era experta, una especialista. Hábil con las manos y muy rápida, tal vez demasiado rápida, sabía que mentía, la adolecente en definitiva trabajaba en algo más fuera de sacar un diente y arreglar los hematomas. Jason la miró, había pasado más de 4 horas y ella seguía con las manos dentro de él, ella hablaba entre dientes, memorizando libros de medicina, seria, admirable, calmada, adorable, los ojos azul eléctrico de la joven brillaron con intensidad 8 horas de haber empezado con “la breve operación”,- terminé, señor Hodd- esbozo una adorable sonrisa, aliviada, fatigada-
Jason sonrío de lado-¿cómo quedaron esas costillas señorita doctora?-
La chica abrió enormemente aquellos ojos enmarcados por pestañas negras y sonrío rendida, había sido descubierta- es mi mejor trabajo- se estiró como un gato en su asiento y rio
-Tiempo record, he?-
Me merezco un novel- jugó con el mercenario- estuviste al tanto?, pensé que habías dormido, debes estar agotado- se paró y se estiró en puntillas para alcanzar las lámparas de operación, ocultándose una vez más en las penumbras-
Imposible!- dijo cansado el asesino- tenía que ver si metías drogas o algo, pero no, un trabajo limpio y en solitario, increíble, pero me mentiste señorita doctora, no era solamente un diente el que tenías que sacar?-
Lo hice, eso era todo lo que se supone que haría pero…- acarició con delicadeza la herida que ahora se encontraba limpia y cerrada- no podía dejarte con eso dentro de ti, te mataría al poco tiempo, arreglar esa costilla era mi prioridad- sus urbes se postraron en los del contrario-
Crees que haciendo esto te perdonaré?- la voz de Jason rompió con tan extraño momento - eres un cómplice, uno más de estos asesinos, dime, te secuestraron?, te obligaron? Que eres de esta organización? Dime-
La chica sonrió enormemente - No -rio con diversión- no lo hice por compromiso, o como un pago para que me perdones la vida, tienes que estar fuerte Hodd, para cuando llegue el momento,-gimió con cansancio después de tronarse el cuello- descansa caperucita roja, mañana nos veremos de nuevo- empujó la silla y salió lentamente de ahí.- el mercenario guardo silencio, hasta que se aseguró que la femenina se había ido, se removió y sonrío de lado-
Claaaro, mañana señorita doctora- la mano derecha aprovechó la poca movilidad que le permitía las correas unidas a la camilla, y presionó bruscamente contra la recién cerrada herida, gimió con dolor, pero aun nada, tomo vuelo y golpeo una vez más las costuras, mostrando un metal que salía de su cuerpo abriendo nuevamente su piel, lloró en agonía pero en silencio, sus labios sangraban por la fuerza en la que mordía, acallando más sonidos, un bisturí salía de su cuerpo, una vez que el objeto estuvo lo suficiente mente fuera, casi se dislocaba la muñeca al voltearla tan anormalmente para que sus dedos lograsen por lo menos rosar el objeto y con suerte sujetarla para sacarla de una buena vez. Lo había logrado. La interminable extensión de la cuchilla por fin había surcado su anatomía, blandeo el objeto sobre sus dedos para que el filo quedase atrapada entre sus muñecas y las correas de pastico, presionó el objeto contra su piel y empezó a tirar de arriba y abajo cortando las ataduras, una mano libre, después de serruchar por casi veinte segundos, se había deslizado hasta su cabeza y pecho para proseguir a liberarse, tenía que hacerlo rápido una nueva herida había resurgido y morir desangrado era una de las preocupaciones.

Continuará...