¿Qué tanto miraba?
Se miraba al espejo cada día.
Todos los días del año, literalmente.¿Y quién no lo hace?
Se miraba al levantarse, al peinarse y al lavarse los dientes. Pero también pasaba por el baño solo para contemplar su reflejo.
Y pensaréis, "¿qué tanto miraba?"
El reflejo no mentía ni cambiaba, ¿no se cansaba de verse?Sus brazos, sus piernas, su abdomen, su cara, su pelo, su nariz; todo en general, era escrutado por la mirada de ella como por lo menos cincuenta veces al día.
Pero, ¿qué tanto miraba?
De vez en cuando también le hablaba al espejo.
-¿Por qué eres así? ¿Por qué, por qué, por qué? ¿Por qué no eres bonita?-le cuestionaba sin cesar, obviamente sin obtener respuesta.
Se pasaba horas y horas delante de este, tocándose la piel, deformándola de manera inútil intentando darle otra forma.
Incluso gastó todos sus ahorros en una buena paleta de maquillaje.
No le sirvió de nada, pues en un arrebato semanas después rompió a llorar encima de esta destrozando los pigmentos.Qué triste, ¿no?
Pero aquel día fue diferente.
Sus ojos ya no miraban el reflejo con tristeza, decepción o impotencia; ahora en su mirada reinaba la rabia.-¡Estúpida!-le gritó al espejo.
Su mano impactó con tanta fuerza contra la superficie dura que comenzó a agrietarse.
Poco a poco la grieta se hizo más y más grande, y con muchas más ramificaciones.A punto de romperse el espejo, ella se cubrió con sus odiados brazos y cerró los ojos.
La primera vez delante del espejo con los ojos cerrados.¿Qué tanto miraba antes?
La oscuridad era más amena que su reflejo.Escuchó el sonido de los cristales caerse al suelo y chocar unos contra otros, pero sin embargo, no notó las afiladas cuchillas en su también odiada piel.
Abrió los ojos desconcertada pero solo vio negro.
Negro a su alrededor, salvo en el espejo intacto.
Se acercó a él y pudo ver que su reflejo sonreía, pero... pero ella no sonreía.-¿Ahora qué tanto miras?-le dije yo.
Ella torció la cara en un gesto de terror con el que yo solo me reí.
Sus puños aporreaban el espejo como si pudiera salir.No volví a mirarme en el espejo de esa manera, no como ella se miraba, pero siempre que lo hago, me sonrío.
*Si lees esto y me das tu opinión, estaría eternamente agradecida :)*
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Escribiendo algo nuevo que seguro nadie leerá y no terminaré
Teen FictionQuizás le ponga título y foto