Parte Cuatro

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Cuando llegué a casa, Alex me excusó con papá, por lo que él no me regaño ni me dijo nada. Distinto fue con David, al él le dijo cosas bien feas, según él era inaceptable que desapareciera dejando a los Moore en casa y sin siquiera despedirse.

David llegó casa pasado las nueve de la noche y para esa hora los Moore ya se habían ido a su casa.

-Solo ignoralo, luego se le olvidará y será como si nada hubiera pasado - Me recosté sobre su cama para hablar.

-Lo dices porque a ti jamás te dice nada.. - Era comprendible el hecho de molestarse, yo fui quien lo hizo quedarse con Sarah en la heladería y lo acabaron regañando solo a él.

-Lo siento ¿Le voy a escupir en la cara para que se enoje? - Dije claramente con sarcasmo. Papá jamás se enfadaba conmigo por nada y ambos lo sabíamos.

-Seguramente te daría las gracias si lo haces - Rió conmigo.

-Ay, cállate tonto.. - Puse mi mano sobre su feo rostro, para molestarlo y el lamió mi mano para que lo soltara - ¡Iugh! Que asco, cochino - Me limpié la mano en su playera.

-Mis babas son exquisitas, cállate.. Oye, por cierto ¿Hoy la pasaste bien con tu noviecito? - Me miró tentandose, se quería reír. - Un pajarito me dijo que volviste a casa con él.. -

-¿Qué? ¿Quién te lo dijo? - David explotó de la risa al ver mi rostro de desesperación, papá no había sido, ya que no hablaron, solo se gritaron y ninguno de los Moore pudo ser, ya que no estaban, seguramente alguien nos vio ¿Quién me había visto con él en la calle vestidos como estabamos? Que vergüenza.

-Mira tu móvil.. - Dijo sin poder dejar de reír. Lo hice revisé mi móvil, las redes sociales y allí había una foto de Alex y yo, parecía que paseabamos juntos. La había tomado el idiota y yo ni siquiera lo noté, que horror, por culpa de nuestra vestimenta parecía que estábamos en una cita. - ¿Cómo puede ser tan estúpido? - Dije frustrada. De inmediato lo llamé.

No tardó nada en contestar.

-Buenas noches, cariño ¿Qué haces llamándome? - Jamás lo llamaba, mucho menos a esa hora.

-Escucha, uno, no me vuelvas a llamar así o te asesino.. Y dos ¿Por qué Demonios publicaste esa foto en tu perfil? Pareciera que estuviéramos saliendo.. -

-Uno - Imitó mi voz, claramente no se parecía. - Cariño.. Desde ahora te llamaré así siempre.. Y dos - volvió a hacerlo- ¿Qué tiene de malo eso? De todos modos te encantaría estar saliendo conmigo. - Dijo de una manera totalmente engreída.

-¿Pero qué dices? - Mi rostro definitivamente demostraba el desagrado que sentía. - Preferiría salir con una patata antes que contigo.. Eres repugnante.. -

-No creías lo mismo esta tarde.. - Podía imaginar fácilmente la expresión facial que puso, era tan predecible.

-Que odioso eres, me sacaras eso en cara cada que puedas ¿no? - Sentía que podía sacar humo por los oídos.

-Es cierto, lo siento, no debí hacerlo.. -

-Claro que no, eres un idiota.. ¿Podrías por favor borrar esa foto? Además salgo fatal.. -

-¿Pero de que hablas? Sales hermosa.. - Era un completo mentiroso.

-Como sea, borrarla ya.. - Como él era el "guapete" del instituto, casi todos ahí los seguían en la red social, por lo que ahora todos creerían que somos algo más que sólo compañeros de insti y no, que espanto.

-Claro, claro, como digas.. ¿Solo me llamabas para eso? - Dejé salir un "mhm" dándole a entender que si - Bua, y yo que creía que me llamabas para darme las buenas noches.. - Parecía estar triste, obviamente lo fingía o eso creo.

-Ash.. Cállate, mejor vete a dormir, adiós - Antes de que pudiera colgar dijo algo.

-Duerme bien bonita, descansa.. - Colgué. Él en sí, es un completo idiota, pero cada que me dice ese tipo de cosas me agrada, hace que millones de mariposas se alboroten en mi estómago. Soy una estúpida por sentirme así por un miserable halago de el sin cerebro de Alex.

-Leah.. - David me miró extraño.

-¿Qué? - Pregunté confundida dejando mi móvil sobre la cama.

-Tus mejillas.. - Presionó sus labios entre sí para no reírse, pero se tentó demasiado y comenzó a reír.

Miré mi rostro y estaba como un tomate, que horror. Ese idiota me hizo sonrojar. Me avergoncé tanto que me sonroje aún más.

-Es que hace calor.. - Me intenté excusar, pero era una excusa totalmente absurda, no lo pensé dos veces antes de decirlo. Había un frío tremendo en la habitación, por lo que lo que dije no fue nada creíble.

-Ajam si.. - Negó con su cabeza mirándome - Admite que te gusta, te encanta.. Estás completamente enamorada de él.. - Era tan terco, obviamente no me gustaba Alex, era cero posible, era un patán.

-Uy... Mejor me voy a mi habitación, tengo sueño - Rodé mis ojos y me levanté para irme.

-Leah y Alex se aman - Alargaba la primera "a" de "aman" - Leah y Alex se aman - Cantaba una y otra vez. En serio David parecía un nene de cinco años cada que me molestaba con según él "mi novio", que estupidez más grande.

Siguió con su absurdo canto hasta que me fui de su habitación hacia la mía, donde me quedé sentada por unos minutos pensando en las cosas que David decía, en cierta parte eran tan malditamente absurdas. Él me molestaba con Alex desde que ambos éramos unas crías. Para mí era claro que nunca pasaría nada con él, porque simplemente era como todo lo contrario a lo que yo buscaba en alguien, pero cada vez que me decía algo lindo, me acababa poniendo roja como un tomate, algo que usualmente nadie es capaz de hacer.

No entendía nada, mis pensamientos eran un completo desastre y para qué hablar de mis sentimientos, jamás le hallaría un orden, ni en un millón de años, por lo que preferí dejar de pensar en aquello y simplemente relajarme, dándome un rico baño de espumas, para luego ir a dormir.

Eres un idiota MooreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora