two; the happiest dog

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Daegu/ Sur Corea 18:37 p.m.

Los rayos del sol a penas daban contra el azul del agua en el mar, en la esquina del puente podía verse nuevamente a ese chico cantar, parecía ser una canción alegre.

O al menos así lo percibía Taehyung, puesto a que las personas a su alrededor bailaban y reían, él pequeño pelinegro sentía que se perdía de muchas cosas hermosas en el mundo.

Una de ellas la música.

Suspiró profundo y decidió mirar al pequeño que caminaba a su lado, llevaba unos Jeans negros y un suéter en color rosa pastel con rayas del mismo color unos tonos más oscuro, su cabello iba desordenado debido al viento que traía la marea y sus celestes orbes brillaban mas que el mismo sol poniente al sur.

Era hermoso.

Taehyung no podía entender de que universo venía Jimin, pero parecía ser el hijo de un dios, sonrió al pensar en Jimin como hijo de afrodita, pues sí, ciertamente era perfecto.

Sus facciones eran delicadas y justas en torno a su rostro, sus labios eran carnosos, su nariz pequeña y sus ojos de igual manera, sus cejas eran notables y cuando solía ponerse serio, tenía una apariencia hasta sexi, todo lo contrario al Jimin real.

Taehyung se sonrojo al recordar las millones de veces en que había amanecido con problemas, debido a la imagen de un Jimin sexi, se sentía como un pervertido mirando a su mejor amigo de tal forma.

Pero le era imposible y le fue aún mas en las épocas de juventud, sus hormonas desenfrenadas, su cuerpo descubriendo el sexo y él imaginando a Jimin en cada una de las chicas con las que se acostaba.

Un pervertido.

-Tae, ¿pasa algo?- Taehyung no se dió cuenta cuando habían parado la caminata y Jimin se había posado frente a él haciendo señas una y otra vez. Pero una vez más, quería evadir el tema, así que negó- ¿De verdad? ¿Por qué te noto serio?

Taehyung sonrió.

-No me pasa nada, bebé- Taehyung le respondió a señas, sin embargo Jimin no parecía convencido.

-¿Piensas que no te conozco? ¿Por qué me mientes?- ahora Jimin parecía molesto, eso hizo a Taehyung sentirse un poco mal.

Más sin embargo, no podía decirlo, no podía hablar de todo lo que abrumaba su cabeza en las noches o terminaría perdiendo a su mejor amigo.

¿Pensaría que soy un pervertido? ¿Que estoy enfermo? Ese tipo de preguntas abruman su cabeza algunas noches, aún si sabe que su mejor amigo jamás haría algo como eso, tenía miedo, de perderlo.

"Puedes decirme una sola vez, que no vas a dejarme. Tengo miedo de perderte".

-Estas raro últimamente- Taehyung observó a su mejor amigo hacer los últimos movimientos con sus manos y después un puchero, Jimin realmente estaba enojado y eso hacía a Taehyung sentirse peor.

-Bebé, solo estoy cansado ¿bien?- Taehyung movió las manos casi temblando, rezando a esa deidad para que no se diera cuenta de su nerviosismo y casi grito de emoción, de no ser por qué no puede, cuando el chico asintió y tomó su mano para guiarlos hasta el final del puente.

Al llegar incluso se sintió alegre de ver al cantante callejero, pues sabía que Jimin se perdería en aquellos orbes y hermosa voz, y no preguntaría más.

Mientras que él, él sólo vería a Jimin, mientras la luz del atardecer iluminaba su suave y brillante rostro, sus pupilas celestes serían mas claras por el brillo del sol, sus rosados labios resaltarían en tonos brillantes y Taehyung, él quedaría más enamorado.

All of me ⚝ vminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora