HUMAN SLAVE X

LA CIUDAD DE ALTAS MURRALLAS

El viaje a medelen de ninguna manera es fácil, al menos no hasta que encuentres el camino principal que usan los comerciantes, eh caminado ya cinco días en este bosque que se supone es por donde pasa ese dichoso camino, pero hasta ahora no eh encontrado nada, como siempre tuve que dormir con un ojo abierto por si me atacaban goblins o ladrones, no fue muy cómodo la verdad pero según mis previsiones se supone que debo encontrar el camino hoy, empiezo a dudar ya que este bosque es muy frondoso, supongo que debo usar lo que le quite a los lobos, saque de mi bolsillo una brújula guiada por piedra mágica que la verdad me ha servido mucho estos cinco de viaje, se supone que debo ir al norte ¿verdad?, mientras empezaba a caminar a donde me guiaba la brújula, me vino a la mente el suceso de hace cinco días, pudo terminar muy mal, en un uno contra tres no hubiera podido ganar, mi única opción fue un ataque sorpresa, que no hubiera funcionado si hubieran notado que estaba armado, se puede decir que le debo la vida a mi saco ya que este oculto mi espada de la vista de los ladrones. esos ladrones no tenían mucho la verdad, un par de monedas, una placa y esta brújula, me siento un poco mal por buscar entre los cadáveres cosas que me sean de utilidad, pero ellos eran los que me querían robar y además ya no las van a usar, pasando por entre ramas y raíces de repente ya no siento terreno en mi pie y caigo por un pequeño precipicio

"qué diablos"

me levante y limpie para ver donde había caído, para mi sorpresa caí en lo que claramente era un camino, no había oído de más caminos en este bosque así que supuse que debía seguirlo, mientras caminaba me fije en el suelo y note marcas de ruedas y pisadas de caballo, lo que confirmo mi idea de que este era el camino por donde pasaban los comerciantes para llegar a la capital, esperanzado supuse que solo faltaba un poco más y podría llegar, después de un rato, el camino por fin salió del bosque y siguió por una colina, al llegar a la cima me asombro lo que vi, una ciudad a la distancia, enorme y amurallada, aunque había bastante distancia de donde estaba aún se podía apreciar su tamaño,

"definitivamente esta es la capital"

exclame asombrado, acelere el paso para acortar el último tramo que me faltaba para llegar. Mientras más me acercaba más grande eran sus murallas, ya había oído hablar de las inmensas murallas de medelen que ni los dioses podían derribar, pero nunca pensé que fueran tan enormes, aparte la vista de la maravillosa muralla para apreciar que la gente iba apareciendo en el camino, comerciantes con carrosas y gente a pie, todos en dirección a la gran ciudad, por fin llegue a la base de las murallas, donde acababa el camino, frente a mí una puerta por donde pasaban las carrosas de los comerciantes, no sin antes ser registradas por los guardias, al lado la entrada particular, una habitación donde se había formado un pequeña fila, me dirigí pues a la entrada y me forme, esta era la parte más crítica del viaje, si me descubren aquí la misión termina, debo concentrarme, no debo mostrar nerviosismo ni hacer que sospechen de mí, solo relájate estoy seguro de que todo va a salir bien. Entre pensamientos nerviosos me interrumpe una voz desde la habitación:

"siguiente"

había llegado mi turno eso fue bastante rápido, de todos modos, entro al cuarto de donde me llamaban, era pequeño con una reja de hierro protegida por un guardia armado, y una recepción donde me esperaba un guepardo con una sonrisa,

"buenos días"

me dijo el recepcionista con una actitud agradable, le conteste:

"si buenos días"

"bienvenido a medelen,"

"gracias"

"su identificación de ciudadano por favor"

"mi que"

"su identificación"

"oh claro, si por supuesto ya la busco"