-- III --

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_-Jungkook, sal de ese cuarto en este instante. ¡LLEVAS AHÍ METIDO TODA LA SEMANA! -_Gritó la señora Jeon.

No la culpen, ella no sabía que su hijo estaba pasando por un mal momento. Desde hace casi una semana que su retoño no habla con ella, no come bien, solo lo ha visto salir a recibir a Jimin.

Ya no lo soporta más. Va a hablar con su hijo, no quiere seguir viéndolo como si de un zoombie se tratará.

Jeon Nayeon subió las escaleras. Ni lenta, ni perezosa llegó hasta la habitación de su segundo hijo. Decidió abrir la puerta con cuidado, ya suficiente espanto le había dado a su cachorro con sus gritos de antes.

_-Jungkookie, cariño voy a pasar-_ dijo, después de dar unos sueves toques a la puerta y sin hacer mucho ruido entró en la alcoba. Dejó semi-junta la entrada y se aproximó a su decaído lobito.

Todo el cuarto destilaba tristeza. Habían algunas cosas tiradas en el suelo, envases de comida instantánea y paquetes de pañuelos usados adornaban la habitación. ¡Oh por dios! Su adorado hijo estaba viviendo entre toda esa basura. Eso era inaceptable.

-_Jeon Jungkook, será mejor que te levantes de esa cama ahora mismo-_ordenó la omega mayor.

-_Omma, no estoy de humor, ¿podrías dejarme en paz? - _la voz de el peli negro denotaba molestia en ella, algo totalmente inusual en el tierno Jungkookie.

Nayeon quedó anonadada por las palabras de su hijo. Tapó su boca con sus manos y sus ojos se abrieron demás. Avanzó unos cuantos pasos más hacia la cama y tomo asiento en el lado izquierdo, justo al frente de lo que se supone es la cara del menor.

Jungkook sintió una mano sobre su hombro. Con suma delicadeza deslizó la manta que estaba sobre su cabeza, dejando ver su rostro con los ojos hinchados, su nariz roja, su tez pálida y sus labios con pequeñas heridas por haberlos mordida por largos periodos de tiempo.

El corazón de la mujer se quebró en miles de pedacitos. Sin decir palabra alguna toma a su hijo entre sus brazos, y le dio gran abrazo, de esos que brindan calidez y seguridad.

Pasaron unos minutos en esa posición hasta que la mayor habla.

-_Mi pequeño Kookie, tu sabes que mamá siempre va a estar para ti verdad-_dijo con una voz tranquilizante Nayeon. Jungkook asintió apenas moviéndose.

_-Quieres contarle a mamá lo que está sucediendo, cachorro-_preguntó mientras daba algunas caricias a la cabeza de su lobito.

-_Om- omma, so-soy un mal omega. Ta-e Tae hyung no me quiere. H-he intentado todo tipo de co-cosas para hacer que cambie de opinión. Pe-pero parece que para el s-so-solo soy una molesti-a. No lo sopor-to o-omma, duele mucho su rechazo-_contó con lágrimas en los ojos, mirando directamente a los ojos de su progenitora.

Así que eso era, su tierno lobito había tomado la valentia de contarle de sus sentimientos hacia el mayor, sin embargo, fue rechazado. ¡Ahora lo entiende todo! Taehyung no habia venido desde hace unos ¿dos... Tres meses?

-_Porque dices eso mi pequeño bebé, tu eres precioso y no me refiero solo a lo físico-_ Conlocó sus manos sobre las mejillas de Jungkook para que este lo mirara fijamente.

-_Cachorro, quizás Taehyungie solo esta confundido. No debe ser fácil asimilar que le atraes a alguien a quien consideras como tu hermanito menor.-_Declaró la mayor.

Y si era cierto lo que su mamá decía... Él no había pensado en los sentimientos de su hyung. Él siempre estaba hostigando al alfa. Otra razón más por la cual su Tae Tae no lo quiere. Siempre es tan tonto.

-_Omma, soy tan egoísta, no pensé en que pudiera estar sintiendo mi hyung-_ Señaló el peli-negro. Tomando un pequeño impulso se lanzó para abrazar a su madre.

-_Esta bien cariño, puedes seguir intentando. Seguro que Taehyung te quiere también, solo dale tiempo_- Delibera. Mientras mira con una gran sonrisa que le transmite confianza a su hijo.

Ese día Jungkook se quedó pensando todo lo que restaba del día. Se preguntaba si era correcto seguir intentando ser algo más con el alfa. Y si decidía que iba a continuar que iba a hacer para que el corazón del alfa se derrita tanto como el suyo.

Las palabras de su omma lo habían motivado. Ella nunca lo aconsejaría a hacer algo si sabía que él iba a terminar herido ¿verdad?

O bueno eso creía él ...







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-_Jungkookie, cariño. Ya no llores por favor-_pidió Nayeon apunto del colapso.

-_Omma, tu dijiste que debía de seguir intentando, pero duele, omma, mi pecho duele, ya no quiero más... -_ Y con una mano apretando el lugar, donde se supone esta el corazón. Jungkook cayó desmayado...

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