𝐈𝐌𝐏𝐎𝐒𝐒𝐈𝐁𝐋𝐄 - 𝐬𝐨𝐨𝐣𝐮𝐧. [pausada]

04

*si quieren escuchen la canción mientras leen*

"Entonces el director acepto mi carta, y lo citaron aquí para nuestra primera clase." Sonrió el menor. "Grandioso, ¿no?"

Yeonjun casi sufre un desmayo ahí mismo al escuchar todo lo que pasó.

"No, no es para nada grandioso." Alboroto su cabello con ambas manos y una mirada fría, así dándole una nueva imagen a Soobin para soñar en las noches. "¿puedes dejar de mirarme así?"

Soobin negó con una sonrisa más grande.

"Se que dirás que parezco un acosador... pero, sólo quiero socializar contigo."

"Soy mayor que tu." Dijo con una mueca el mayor al escuchar que Soobin se dirigia a el sin honoríficos. "Bueno.." suspiro. "¿Viniste a darme una clase no?"

Soobin asintió y busco un libro entre todos los estantes de la biblioteca. No había nadie a excepción de ellos dos ahí; incluso la bibliotecaria les dejo las llaves porque no quería estar mucho tiempo en el colegio.

El menor luego de haber tomado dos libros, volvió a su lugar a un lado del mayor y se los extendió.

" 'Los cinco sentidos' y 'animales vertebrados e invertebrados'." Leyó las carátulas de los libros. "¿Es una broma no?"

"Claro que no. Si quiero enseñarle bien, tenemos que ir desde el principio. Debo encontrar el problema para arrancarlo desde la raiz."

"Ahora falta que me pongas a dar la fotosíntesis." Bufo el mayor.

Soobin miro de forma perversa al mayor y este fruncio el ceño confundido. El menor empezó a reirse, y ahí fue cuando el peliazul entendió y sus mejillas empezaron a tornarse de color carmesí.

"Se que no quisiste decirlo de esa forma. Pero, si, si daremos las fotosíntesis."

Yeonjun miro sus manos y apretos sus ojos. Sólo estaba haciendo el ridículo.

"Esta bien. Empecemos, entre más rápido salgamos de aquí mejor."

Soobin tomo el primer libro y empezó a leer. Yeonjun sólo miraba un punto muerto escuchando la dulce voz del menor. Quería fingir indiferencia y falso interés ante lo que decía el pelinegro, pero, esto a Yeonjun le beneficiaba, y Soobin claramente lo sabia.

El mayor recosto su cabeza sobre su brazo sosteniendo su propio peso. Soltó un suspiro pesado y se dignó a mirar a Soobin.

El menor sólo mantenía su mirada en el libro, mientras leia y hablaba con delicadeza para que el mayor entendiera totalmente todo, aunque literalmente  le estuviera enseñando un tema de primaria.

Yeonjun no sabía como, pero de un momento a otro ya se había perdido en los hoyuelos, ojos marrones, y rasgos bien definidos del menor. Soobin tenía una belleza indescriptible, así como podía ser un bebé y al mismo tiempo un super daddy.

"Hyung, se que soy feo... pero deje de mirarme así y preste atención a lo que le estoy diciendo." Soobin hizo un puchero mirando al mayor.

Yeonjun apartó su vista lo mas rapido que pudo y soltó un suspiro.

"Si te estoy prestando atención." Dijo rodando los ojos. "Y no eres feo."

Lo último, lo había dicho en un susurro, pero fue lo suficientemente alto para que Soobin logrará escuchar. El menor prefirió hacer de que no escucho nada, pues no quería que Yeonjun saliera huyendo como siempre, pero, por dentro se estaba muriendo de felicidad; su Hyung lo había llamado bonito indirectamente.

"Si ha prestado atención, ¿puede decirme que le acabo de leer?"

"Se llama visión a la capacidad de interpretar el entorno gracias a los rayos de luz que alcanzan el ojo. La visión o sentido de la vista es una de las principales capacidades sensoriales de los humanos y de muchos otros animales. Y bla bla."

El pelinegro rio y nego. Su Hyung era bueno para memorizar, pero muy flojo.

"Eso está bien." Sonrió. "Ahora veremos el olfato..."

"Yo quería ver el gusto." Se cruzó de brazos.

"Claro Hyung, nada más espere que terminemos de estudiar." Volvió su vista al libro dejando confundido al peliazul.

"¿ah?"

Soobin aguanto las ganas de reírse y siguió leyendo. Al parecer Yeonjun era un tanto inocente.

Las horas pasaron relativamente rápido, y no se dieron cuenta cuando ya había oscurecido. Si no fuera porque el vigilante de la escuela les dijo que ya tenían que salir, hubieran seguido ahí dentro.

"Nos vemos mañana, Soobin." Se despidió el mayor.

Como ya había oscurecido, el ambiente era frío, demasiado frio. Soobin no quería arriesgarse a que Yeonjun pescara un resfriado, o pero aún, fuera asaltado.

"¿Lo puedo acompañar Hyung?" Pregunto antes de que el peliazul empezará a caminar.

Yeonjun miro con una mueca al Soobin. Este último sabía que lo más probable sería que el mayor se negara, pero eso no importaba, igual iría detrás de el como siempre.

"Esta bien." Dijo después de meditarlo un poco.

¿Qué dijo?

"¿Ha... habla enserio?"

Yeonjun asintio con su rostro neutro. Su nariz empezaba a tornarse roja y sus mejillas de un color carmesí. Seguro por el frio.

Soobin había quedado en shock. Choi Yeonjun, su crush, había aceptado a que le acompañase. Eso sí que no se lo esperaba. Y mucho menos se esperaba que Yeonjun al ver que el no reaccionaba, enganchara su brazo con el de él para empezar a caminar. La diferencia de altura era muy notoria, algo que era tierno y a la vez causaba risa.

"Hyung, ¿no le molesta que lo este acompañando?" Pregunto un tanto nervioso Soobin.

Nunca había conseguido estar á tal distancia de Yeonjun, y pensó que cuando estuvieran así, se lo estaría comiendo a besos, más no que estaría temblando como  virgen cuando lo van a follar.

"Un poco si. Pero prefiero que me preguntes a que me sigas sin mi consentimiento." Dijo normal. "Porque créeme, no es bonito tener un acosador."

El pelinegro sonrió y asintió. Todo era totalmente perfecto, hasta que a su mente salto la imagen de Hueningkai. El definitivamente no quería hacerle daño a ese chico, pero no podía negar, que ahora quien le gustaba:

Era Choi Yeonjun.

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