Mami, ¿por qué no me dejas jugar con él?

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Yo sólo...quería dormir, al igual que el. Y talvez, volver a vernos.

(THOMAS)

Habían pasado ya 3 meses desde aquel incendio y 2 meses desde el velorio. Pude despedirme...pero no es lo mismo. Quisiera que el me hubiera escuchado, pero no podía...ya no. No he podido comer últimamente, no tengo hambre. No tengo ganas de jugar y no quiero ver a nadie. Pero...tengo mucho sueño, duermo en el día y la noche. Sueño con él. Eso me basta para disculparme mil veces...pero aún así, no siento que sean suficientes disculpas y yo...no merezco su perdón.

Y al parecer, nadie más que yo había sobrevivido. Eso me hacía sentir como escoria...¿por que solo yo estoy vivo? Si ni siquiera lo merezco...

Hace tiempo empezaron las clases. Fuí la primera semana, pero...todos me veían como si fuera un mounstro. Mis antiguos amigos ya no querían jugar conmigo, dijeron que si se acercaban a mí se les pegaría lo raro. Ellos nunca me habían tratado así. La razón de esto es por mis ojos. Todos piensan que estoy enfermo o que tengo algo malo.

Es algo gracioso, ya que, antes todos me felicitaban por mis hermosos ojos azules. Pero ahora, con mis ojos completamente negros, les doy miedo o asco. No solo son los niños, los adultos también me miran feo y apartan a sus hijos de mi. Debido a eso, ya no tenía nada que hacer allí. Mi mamá decidió cambiarme de escuela, dijo que no puedo perder mi segundo año de primaria. Yo sólo puedo asentir, quiero ser un buen hijo para ella. Al igual que yo, ella últimamente se la pasa en su cuarto. Y a veces, cuando paso por su puerta, la escucho llorar. No quiero que se sienta peor si me porto mal, intento obedecerla en todo lo que me dice.

De igual manera, las cosas ya no son como antes...la casa esta tan silenciosa la gran mayoría del tiempo. Ya no hablamos tan seguido como antes. Ya no jugamos ni miramos la TV juntos. Supongo que es mejor así, ella no se merece un hijo como yo. Si supiera que por mi culpa Charlie murió...ella me odiaría...y lo merezco completamente.

Ahora estoy sentado en mi cama, es de noche. Mi ventana está abierta y veo las estrellas en el cielo. Sólo puedo pensar en él. Pensar en lo bien que la pasábamos antes. Sin poder evitarlo, unas lágrimas salieron de mis ojos. Me las seque con el brazo y me tape con las sábanas. Apague la pequeña lámpara que había a un costado de mi cama. Me acomodé en mi lugar y cerré los ojos.

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-¿Hey Tommy, quieres escalar la pequeña montaña?

-¡Si! ¿Pero me puedes llevar en tus hombros? Porfavooooor.-

-Ash, esta bien. Pero recuerda que cuando crezcas ya no podré llevarte más, serás más gordo que yo jajajaja.-

-¡Callate, que tu pesas como mil kilos!-

-Mimi mimimi, ¡ven aquí, pequeño mounstro!-

Ambos subimos la pequeña montaña que estaba en frente. Estabamos en un bosque, nuestra madre nos había traído. Había una bella cascada, y teníamos que subir una pequeña montaña para verla.

Yo estaba feliz, Charlie me llevaba en sus hombros mientras yo solo admiraba la vista. El bosque era tan hermoso, tenía unos colores verdes muy llamativos, parecía un bosque de cuentos de hadas.

-¡La cascada esta allí, mírala Tom!-

Quedé con la boca abierta al ver tan hermoso paisaje, la cascada era definitivamente el lugar más hermoso de este bosque. El agua descendía de unas rocas y llegaba a un pequeño río. El agua era tan cristalina, tenía ganas de vivir ahí.

-¡Está increíble!-

-Si, eso es seguro. Por suerte las personas no visitan casi nada este lugar. Este lugar no es muy fácil de encontrar.-

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⏰ Última actualización: Dec 24, 2021 ⏰

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