Extra #1.

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-¿No vas a decir nada?- preguntó Pia, acurrucada contra la ventanilla del auto, un suspiró se le escapó, empañando la ventanilla, sorbió su nariz.

-No sé qué quieres que diga- admitió Ben, sintiéndose un poco derrotado, Pía asintió- realmente, ni siquiera se que decir.

-Qué me odias, quizás- respondió Pía, sin mirarle.

-No puedo odiarte por algo que no es tu culpa, Pia- habló firmemente. La castaña secó sus lágrimas, aunque en vano, ya que sus mejillas quedaron empapadas en cuestión de segundos.

-Perdí al bebé- lloriqueó- lo perdí otra vez- tapó su rostro, dejando salir un llanto descontrolado, Ben trataba de mantenerse firme, para ella, para apoyarla- lo siento tanto.

-No es tu culpa- susurró Ben, cuando apagó el auto, en el estacionamiento privado del edificio, Pía bajó rápidamente, todavía sin mirarle y caminó hasta la entrada.  Ben tomó sus cosas y siguió a Pía hasta el ascensor.

Eran las tres y media de la madrugada, venían de regreso del hospital, porque Pía despertó con un sangrado fuerte e inusual, un sangrado que ambos conocían muy bien, cuando llegaron y la revisaron, le dijeron lo que temían, Pía había sufrido un aborto espontáneo, otra vez.

La pareja había intentado tener hijos, tres veces, pero cada intento terminaba igual, siempre terminaba con Pía sangrando y perdiendo a su bebé. El camino al apartamento era silencioso, un silencio pesado, doloroso, un silencio que ponía a Ben con los nervios de punta. Se quitó el abrigo, y dejó las llaves en su lugar.

-¿Quieres que te prepare papas?- preguntó en un intento de hacerla sonreír un poco, Pía lanzó una sonrisa triste y dio una breve respuesta afirmativa.

-Ni siquiera se porque sigues conmigo- dijo en un tono de voz bajo, esperando que Ben no la escuchara, pero el hombre sí lo hizo.

-No digas eso- murmuró buscando las papas- Basta de decir eso.

-Necesitas buscar a una mujer que pueda tener hijos, no una que apenas lo tenga en su vientre, este lo deseche- escupió, sintiéndose asqueada consigo misma, sostuvo su cabeza con ambas manos.

-¿Qué demonios estás diciendo?- dijo incrédulo, mirándola mientras apoyaba sus manos del mostrador- ¡No voy a buscar a nadie más! ¡no voy a cambiar a mi esposa para poder tener hijos! ¡no!

-¡Pues conmigo nunca los vas a tener!- gritó la modelo, con la voz rota- ¡No es fácil, Ben! ¡no es fácil ver tu cara de emoción cuando te digo que estoy embarazada y no es fácil ver tu cara de decepción cuando lo aborto! No quiero hacerlo, te juro que no quiero perderlos.

Ben suspiró, dejó las cosas y se acercó hasta ella, pero Pía lo apartó suavemente, hipeó:-Pia, entiendo tu dolor, es el mismo que siento pero no es tu culpa. Tu no tienes la culpa de que esto esté sucediendo ¿si?

-Veo tu cara cuando ves niños- sonrió tristemente- tu cara cuando pasamos por las tiendas con ropa para bebés, me duele tanto no poder...- su voz fue interrumpida por un sollozo- Puedes decir que no es mi culpa pero sabes que es la verdad.

-Pía, basta- la sostuvo de las muñecas- Basta de odiarte por cosas que no puedes evitar, claro que quiero un hijo, claro que me duele, pero no haré nada buscando culpables. No hay nada malo en ti y no voy a buscarme otra esposa.

-Todo mi vientre está mal, todo en mi está mal- sus ojos ardían- deberías pensar mejor tu discurso.

-¡No es un maldito discurso!- exclamó Ben- Dios, no se que demonios debería decir, porque aunque ya hemos pasado por esto, es el mismo dolor, es la misma situación. Nunca has pensado que también me duele, también eran mis hijos, también eran parte de mi.

Strangelove 🔞 (Ben Hardy)✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora