TOM FELTON ONE SHOT

EL ENCARGO QUE CAMBIO MI VIDA

Era una mañana bastante tranquila comparada a como empezó la semana, me encontraba desempeñando mi trabajo en una tienda de ropa la cual es muy popular entre los jóvenes

-Perdone señorita- me menciona un cliente, por lo que dejó de doblar las camisetas de las estanterías para poder prestarle atención-

-Buenos días ¿En que puedo ayudarle?-le pregunté con una pequeña sonrisa, la cual el me correspondió-

-Esta sudadera- dijo mientras me enseñaba la sudadera- ¿la tendrías en el almacén en la talla M?- me pregunto amablemente-

-Dame un minuto y se lo miro- dicho esto me fuí hacia el almacén y busque donde se encontraban las sudaderas que el me pidió y me puse a busca la talla M, pero no había ninguna-

Una vez que salí del almacén y localice a ese chico me acerque a él

-Perdone- dije captando su atención- pero no la tenemos aquí en la tienda, pero se la puedo encargar- mencione-

-Vale, me parece bien- comentó mientras jugaba con su cabello-

-Acompañame por favor-

Nos dirigimos hacia el mostrador para poder hacerle el encargo

-La encontré- mencione a los pocos minutos- ¿Se la encargo, no? - pregunté para asegurarme-

-Si por favor ¿Cuantos días podría tardar?- me preguntó el chico de ojos azules-

-2 días-le confirme mientras realizaba el encargo- Debes dejarlo pagado- le comunique una vez que terminé de realizar el encargo-

-De acuerdo- respondió mientras me daba la tarjeta de crédito-

Realice el cobro, le devolví la tarjeta, él la guardo, salieron los tickets correspondientes, los grape

-Deberá traer este ticket para poder recoger la prenda- le informe mientras le entregaba el ticket-

-Vale- dijo mientras cogía el ticket y me regalaba una sonrisa tímida-

Le correspondí la sonrisa

-Que pase un buen día- le dije sin quitar la sonrisa-

-Tú también- me contestó sin quitar su somrisa-

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Al día siguiente gran parte de la mañana hubo bastante público, cuando la tienda estuvo más tranquila, mi jefe nos mando a llamar a mis tres compañeros y a mí

-Hola- empezó mi jefe- necesito que uno de vosotros vengáis mañana en el turno de la tarde- hizo una pequeña pausa- os ponéis de acuerdo entre vosotros y me lo informáis- nos echo una mirada y se alejó dejándonos a los 4 solos-

-Yo mañana no puedo- empezó Rose- Tengo una tutoría con la profesora de mi hijo-

Rose era una mujer agradable, de 37 años, ojos miel y pelo negro, lleva trabajando en esta tienda 17 años

-No te preocupes Rose- mencionó Austin-

Austin es muy bromista, ojos verdes y pelo castaño, lleva 6 años trabajando aquí

-Mañana viene mi familia de visita y me es imposible- mencionó Kristen-

Kristen es de ojos verdes, pelo castaño oscuro con mechas negras en las puntas y es mi mejor amiga. Entramos juntas al trabajo, quizás esa es la razón por la que me llevó tan bien con ella

-No te preocupes Kristen- le dije con una sonrisa tranquilizadora, que fue correspondida al instante-

-Yo no tengo inconveniente en cambiar el turno- mencionó Austin mirándome mientras se apoyaba en la pared-

-No, lo haré yo, tú cambiaste el turno la última vez-dije al momento-

-¿Segura? de verdad que no me importa- volvió a insistir Austin-

-Segura, esta vez me toca a mí- mencioné finalizando la conversación y yendo a buscar al jefe-

Le indique a mi jefe que era yo la que cambiaba el turno

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El viernes por la mañana después de ver el whatsapp de Kristen que me mencionaba que tardaría en llegar 5 minutos, llame al camarero para poder pedir mi desayuno y el de Kristen, me encontraba en una cafetería que está a 5 minutos de la tienda, donde me solía ver con mi amiga para desayunar mientras hablábamos sobre nuestras cosas antes de ir al trabajo

Tal como me había dicho, pasado los 5 minutos apareció, me localizó rápidamente y se dirigió a mí

-Hola ___- me saluda Kristen con una sonrisa-  ¿Que tal la tarde de ayer? -me pregunta mientras toma asiento delante de mí-

-Hey-le correspondí la sonrisa- Bueno ya sabes-di un pequeño suspiro-  normalmente por las tardes suele haber más público y también se hace más pesado-

En ese momento llegó el camarero con nuestros pedidos, le agradecimos y empezamos a desayunar

-Por cierto-dijo mi amiga después de darle un sorbo a su café- ahora que me acuerdo- dejó el vaso que contenía el café donde anteriormente lo había puesto el camarero y me mira con diversión- un chico vino ayer preguntando por tí-

-¿Un chico? - le pregunté confundida mientras cogía mi vaso de café y le dí un sorbo-

-Si y uno muy guapo, venía a recoger un encargo-le da otro sorbo a su café-

Entonces se me vino a la mente ese chico  rubio de ojos azules

-Dijo que ya volvería otro día que estuvieras tú- su sonrisa se vuelve cada vez más grande, empiezo a sentir como mis mejillas arden- Te estás poniendo roja- soltó una pequeña risa y le dió un mordisco a su tostada-

-No digas tonterías- dije poniéndome más roja y comiendo mi tostada tratando de disimular-

Kristen no paró de bromear con eso durante todo el desayuno, una vez que terminamos de desayunar,pagamos cada una lo suyo y nos dirigimos hacia nuestro lugar de trabajo

Había bastante público y estábamos bastante atareados, Kristen que estaba a mi lado en el mostrador que justo acabamos de terminar de cobrar a dos parejas, note como se le iluminó la cara y me miro con una sonrisa que no supe interpretar, la mire alzando una ceja, me hizo señas de que mirara hacia la puerta, sin entender muy bien que pasaba, le hice caso, mire hacia la puerta y ví a ese chico rubio y antes de que me diera cuenta Kristen había desaparecido de mi lado.

Me puse algo nerviosa cuando el chico de la linda sonrisa se acercó a mí

-Hola, vine ayer pero no te encontré- me hizo saber-

-Es que tuve que cambiar el turno, lo siento- le mencioné mientras le ofrecía una sonrisa de disculpa-

-Eso no vale, tenía la ilusión de volver a verte pero no fue así- su tono de voz era muy dulce-

Ese comentario logró sonrojarme

-Pero, la sudadera si estaba ¿no?- le pregunté intentando ocultar mi sonrojo-

-Pero mi interés era más verte a ti, que a la sudadera-su mirada estaba fija en mis ojos-

Este chico estaba cada vez poniéndome más nerviosa

-Esto...iré por su pedido- dije titubeante-

Dicho esto me encamine a buscar su pedido, una vez dentro del almacén, respire hondo varias veces para intentar calmar mis nervios, una vez que me conseguí calmar, me dispuse a buscar la prenda, la encontré y me volví a acercar a él para poder entregársela

-Aquí tiene-le dije mientras se la entregaba-

-Muchas gracias- agradeció- Por cierto el ticket- comentó mientras sacaba el ticket-

-No hace falta, no te preocupes- él guardo él ticket nuevamente- serias tan amable de firmar aquí-dije mientras le indicaba el recibo-

-Por supuesto- contestó mientras lo firmaba- ¿Tienes planes para esta tarde?- me preguntó una vez que terminó de firmar el recibo- Me gustaría salir contigo-me mira tímidamente-

-Me gustaría mucho salir contigo esta tarde- le respondi mientras mis mejillas se sonrojaban-