Este día había sido tan largo que me quedé dormida enseguida, recordando algunos de los buenos momentos que había pasado con mis padres en estos 14 años.
A la mañana siguiente me desperté sobre las 11 de la mañana, lo primero que hice nada más levantarme fue ir a la habitación de mis padres para ver si seguían ahí o había sido una pesadilla, por desgracia mía no seguían ahí, pero tampoco había sido una pesadilla, todo había sido real. Unas lágrimas cayeron de mis ojos y me las sequé.
Bajé las escaleras con la intención de encontrarme a mis primos por el salón y así fue, estaban esperando a que me levantara porque me tenía que arreglar para ir al funeral. De nuevo comencé a llorar. Yo no quería ir allí pero mis tíos y mis primos me obligaron, ya que así podría "despedirme" de mis padres. Menos mal que mis primos estarían allí conmigo. Mis amigos también fueron a acompañarme en aquella dura etapa de mi vida, se lo agradeceré de por vida. Yo solo lloraba y lloraba. Cómo podía ser que en menos de un día, había perdido a las personas que me dieron la vida, mis padres.
Terminó el funeral y mis tíos, mis primos y yo nos fuimos de nuevo para mi casa, al llegar allí mis tíos me dieron la noticia.
Eva: Andrea, espera que te tenemos que decir algo
Yo: ¿que pasa ahora tita? -dije con unas ganas de llorar tremendas
Eva: cariño tu sabes que somos tus responsables en este momento ¿no? ya que somos tus padrinos
Yo: sí ¿y qué?
Juan Carlos: que tendrás que venirte a vivir con nosotros a Mairena...
Yo: si eso es lo que os preocupa, por mí no hay problema
Eva: ¿de verdad? nos has quitado un peso de encima, creíamos que no querías dejar a tus amigos y todo
Yo: sé que los voy a extrañar pero... si me quedo aquí todo me va a recordar a mis padres y no quiero... además estando con los primos me da igual
Juan Carlos: oye Andrea ¿ te importa quedarte esta noche con tus tíos Marina y Raúl? Los primos tienen concierto esta noche en Málaga, hemos intentado cancelarlo y no hemos podido...
Yo: no pasa nada tito, ¿cuando nos vamos para Mairena?
Eva: mañana por la tarde venimos a por ti, te ayudamos a recoger tus cosas y las maletas y nos vamos
Yo: vale, así podré despedirme de mis amigos mañana por la mañana
Eva: vale cariño. ¿Vas a querer algo de comer?
Yo: no tita, no tengo hambre
Eva: bueno vale, descansa cariño -le dí un beso y me subí a mi habitación.
Al llegar a ella, me tumbé en la cama y comencé a llorar, solo se me venían recuerdos de mis padres a la cabeza. Cuando me encontré un poco mas calmada me puse a sacar la ropa de mi armario y comencé a hacer las maletas y a empaquetar todas mis cosas, cuando de pronto entraron en mi habitación mis primos.
Dani: ¿Qué tal?
Jesús: ¿estas ya más tranquila?
Yo: un poco pero vaya...
Dani: tienes que ser fuerte Andrea y por supuesto cuenta con nosotros
Yo: gracias -dije apenada, notaron mi tristeza y me abrazaron
Jesús: ¿te ayudamos con todo esto? -dijo que refiriendose a toda la coleccion de ropa, zapatos, bolsos y demás que tenia en lo alto de la cama
Yo: sii por favor
Estuvieron ayudándome a meter todas mis cosas en cajas y mi ropa en las maletas. Eran ya las 6 de la tarde y ellos se tenían que ir para Málaga ya que esta noche tenían concierto allí, así que esta noche dormiré en el piso de mis tíos Raúl y Marina.
ESTÁS LEYENDO
Una vida junto a ellos (GEMELIERS)
أدب الهواةEsta es la historia de Andrea, una chica de 14 años que vive en un pueblo de Sevilla, aunque pronto se tendrá que mudar a Mairena del Aljarafe donde vivirá con sus tíos y primos, conocidos como Gemeliers. Por asuntos personales muy graves, tendrá qu...