Armagegod

Dudas

Estaba todo escuro y no lograba ver más que un pasillo con fuego en el fondo, pero el fuego que se veía no era rojo, si no azul, incluso podría decir que parecía como hielo.

-Sé que esto es un sueño, pero...¿ donde están aquellos hombres que vi en mi sueño anterior?

Cuando dije esto dentro del mi sueño una sombra se asomó por las llamas azules. Su silueta era de una mujer ya mayor un poco igual que la directora. Aunque no podía ver su cara, esta solo mostraba su espalda, la cual tenía una clase de reboso que no podía ver muy bien.

-Hijo... por favor tienes que cuidarte mucho, ellos vendrán por ti pero debes de ser fuerte. - Me dijo mientras se le escucha una voz quebradiza que lograba llegarme a crear un nudo en mi garganta. Aunque la voz se me hacía familiar mi corazón se sintió en calma.

-¿Quién eres? ¿Y porque dice que soy su hijo? No la conozco.- Le dije mientras me veía las manos las cuales empezaron a esfumarse, fue ahí cuando sabía que mi sueño estaba a punto de acabar.

-Sé que debo explicaciones pero tienes que cuidarte, aunque se de lo que eres capaz y de lo que serás. Nadie sabe de lo que eres capaz inclusive tu mismo, pero créeme, tu serás el cambio que este mundo necesita. – en ese momento se acercó a mí y sin poder hacer nada me dio un beso en la frente, no sabía cómo es que llegó de aquel pasillo tan largo hasta mi lugar, pero si sabía algo, ese beso me transmitió una sensación de paz absoluta que nunca pude sentir. – Creemos en ti – fue lo último que escuché, pero a excepción de que esta vez se escucho una voz más grave, la de un señor.

Desperté esta vez no de un salto ni nada exaltado, si no lo contrario, tranquilo. Pero algo sentí caer en mi mejilla y era una lagrima que derrame mientras estaba dormido. Mire el reloj y note que era bastante temprano. Me sequé mi lagrima y me agache debajo de mi cama para ver en libro de las mitologías que me había dado el maestro, lo decidí abrir de nuevo y la pagina que estaba mi marcador era acerca de Odín el padre de la mitología nórdica, el cual al abrirlo esa tranquilidad se convirtió en preocupación. Decidí leer más acerca de el, me di cuenta que el es el dios más fuerte y más sabio de esta mitología nórdica, pero que tuvo que hacer bastantes sacrificios para obtener lo que hoy se conoce como el conocimiento absoluto.

-Tuvo que dejar un ojo en un pozo ¿enserio? – dije bromeando ya que tal cosa se me hacía un poco tonto, porque si era demasiado sabio porque no sabría saber el futuro, simplemente no tiene sentido. En ese momento un cuervo tocó la ventana de repente, lo cual me provocó un susto, no tan grande pero si que llamo mi atención. El cuervo se quedó parado en la ventana solo viéndome. – ¿que haces aquí amigo? No tienes que estar aquí, a volar. – le dije pero este no se inmutó, así que lo ignore para seguir leyendo. Pase un poco de texto para leer algo curioso.

-Odín contaba con dos cuervos los cuales le decían acerca de lo que pasaba en el Midgard. Midgard es el reino el cual fue creado por el en donde se alberga la vida del hombre y los animales que conocemos. Siendo parte del árbol Yggdrasil... - en ese momento me dio un dolor de cabeza que interrumpió mi lectura, escuché una voz diciéndome:

-Reconóceme y lograrás saber acerca de ti y tu pasado – era la misma voz que escuché en mi sueño, la que se hacía llamar a mi madre. Al terminar de escuchar esa voz mire al reloj y me di cuenta de algo bastante raro, habían pasado en mi cabeza 15 minutos máximo que había leído, pero en el reloj mostraba que había leído 2 horas. Fue tanto tiempo incluso que Joshua se estaba despertando, eran casi las 9 de la mañana y nos faltaba una hora pata entrar a clase de ciencias, así que decidí prepararme para hacer una cosa al terminar esa clase, ir con la directora y hablar acerca de mi madre. Cuando voltee a ver la ventana el cuervo había desaparecido dejando consigo una pluma de él.