Un Lago Lleno De Secretos

FIESTA I

CAPÍTULO CINCO

Después de largas horas de clases, llegó la hora de salida. Donde me encontré con Hashley, estaba preparada para que viniera hacia mi, a repetirme nuevamente lo de la fiesta.

- Hello Crystal -Dijo Hashley diría yo que emocionada

- Hola Hashley

- ¿Porque no te vas conmigo en mi auto? Somos vecinas así que vamos hacia prácticamente el mismo lugar. - Dijo Hashley manteniendo su sonrisa

- Lo siento Hash pero mi chófer está ahí esperándome - Le dije mientras señalaba a un señor cuarentón, con un poco de canas.

- Vamos, es tu chófer el solo sigue tus órdenes, dile que te vas conmigo. - Dijo Hashley intentando poner una cara de nostalgia.

- Fingir esas caras tristes no va en ti, pero me haz convencido.

Le hice una seña al chófer para que se fuera y seguí a Hashley, la cual me llevó a un auto deportivo, color amarillo neón, sin dudas era un carro hermoso.

- Vamos Crystal, sube - Dijo Hashley

- ¿Estás segura que sabes conducir perfecto? - Le dije con un poco de miedo, osea llevaba apenas un día de conocerla pero es suficiente para darme cuenta de que está un poco loca.

- Claro tonta - Me dijo mientras me enseñaba su licencia.

Y ok, me subí al auto aún sin saber si moriría en un accidente o si podría terminar de vivir.

Para mi sorpresa Hash conduce con cuidado.

- ¿No te interesa tomar el puesto que hay en mi casa de chófer? - Le dije a Hashley bromeando

- Ja-ja, que graciosa, claro que tengo que conducir como se dictan las reglas. Todavía tengo mucho por vivir, tomar más, acostarme con más chicos, salir de fiesta, reír con mis amigos, etc etc baby. Por tanto y demás nos cuidamos que soy muy joven para perder un pie en un accidente y que más nadie me mire por el resto de mi vida.

- Tu si que sabes vivir - Le dije a Hashley con un tono de tristeza.

- Y tu Crystal, ¿que es lo más loco que has hecho?

Mmmm llegar a la cifra de 273 personas asesinadas para luego lanzarlas al lago que estaba atrás de mi casa y coleccionar fotos de sus cuerpos sin vida.

- La verdad, nada. Creo que mi vida es aburrida desde que tengo memoria - Le dije a Hashley.

- Llegamos - Dice Hash parando su auto frente a mi casa

- Gracias por traerme.

- No es nada, y no olvides que a las 10 paso por ti. - Dijo Hashley emocionada.

Asiento a lo que dijo para luego darme la vuelta y entrar a casa.

- Que bueno que llegas - Dice mi madre con una expresión que no me gusta para nada.

- Que quieres

- Es primera y última vez que me dices todo eso delante de un invitado, ¿ok? Si quieres me lo dices cuándo estemos a solas, porque la verdad lo que me digas no me importa, pero no voy a dejar que arruines mi buena imagen solo porque eres una dramática y estúpida hija que solo sabe joderle la vida a uno. - Dijo Bianca.

- Ok - Le dije sin expresión alguna, porque ya me había acostumbrado a todos sus insultos, me podía doler cada una de sus palabras por dentro, sintiendo como todo lo que sale de su boca arde en mi pecho. Pero un día llegó el punto donde no expresar el dolor de ellas en mi rostro.