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POV de Ivy.

Mi Nombre es Ivy James, tengo 16 años, estudio diseño gráfico, pero me gusta más dibujar cómics en mi tableta, soy una artista de cómics muy conocida, inicié de manera anónima en 2016 con una página de Instagram donde publicaba mis dibujos, al principio no lo hacía con otras intenciones, pero mi página empezó a crecer poco a poco, a la gente le encantan mis dibujos, logrando recolectar 800k seguidores hasta la fecha. Me mudé recientemente a España con mi madre y mi hermano mayor Axel para poder culminar con mis estudios, no tengo muchos amigos, la verdad no soy muy sociable, soy tímida hasta que entró en confianza con alguien, por ahora sólo cuento profundamente con mi mejor amigo Jing, es un chico coreano que conocí hace 6 años cuando fue a estudiar de intercambio a Reino Unido, mi país natal, hasta que me fui a España para estudiar la carrera que me gustaba.

Jing también iría, pero había una diferencia, y es que yo me mudé apenas iniciaron las vacaciones, y él se mudaría casi al iniciar el siguiente año.

Y para ser sincera, después de ahí no volvimos a hablar mucho, no es que no quisiere, simplemente estuve muy ocupada en esos meses y con el estrés y demás, no hable con casi nadie en las vacaciones.

La vida aquí es muy agradable, antes de viajar tome 2 años de clases de español para cuando me mude para poder hablar fluido. Nos mudamos en un residencial muy grande y bonito. A mitad de las vacaciones, otra familia se estaba mudando al lado nuestro, eran una familia de una madre y 3 chicos, voy a admitir que el chico más grande es muy apuesto, alto, rubio, ojos azules y su peculiar sonrisa que tanto destacaba en el me llamó mucho la atención, pero no soy lo suficientemente extrovertida para ir a hablar con él.

Mañana empiezan las clases y admito que estoy muy nerviosa.

***

6:35 A.M

El sonido de la alarma me despertó, tome mi celular para revisar si los bocetos que había dibujado anoche se hayan guardado hasta que un mensaje de Jing me interrumpió avisándome que tenía escuela.

6⁚44 A.M

Apague el teléfono me lave la cara rápido y bajé a desayunar.

-Buenos días preciosa. - dijo mi madre besándome la mejilla.

-Buenos días ma, que hay para desayunar. - pregunté curiosa.

-Lo que quieras. - dijo sin más.

Cogí unas galletas de avena y una taza de café con hielo -mi favorito me ayuda a dibujar-. Terminé de desayunar y me puse el estúpido uniforme, laceé mi pelo, me puse mi perfume favorito y eché mi Tablet para terminar mi comic y salí a esperar a mi hermano, a quien, por desventaja para mí, apuntaron en mi instituto.

Yo no era millonaria pero cuando mi padre murió dejo una herencia a mi madre, la cual la ayudo a convertirse en una excelente abogada y le va muy bien, por lo que me puedo dar uno que otro lujo como un auto, si, tenía uno, ir en el autobús era una pesadilla, sabia manejar, pero debía tener edad suficiente para la licencia, mi hermano era mi chofer privado. Un aburrido día me esperaba.

*De camino*

Ya había terminado el boceto de mi siguiente comic solo faltaba pintarlo y mi hermano me podía ayudar, además tenía tiempo suficiente ya que el instituto quedaba un poco lejos de casa.

-Terminé. -dije orgullosa.

-Qué bueno. -dijo al aire Axel, es de pocas palabras. -¿Aun no piensas dar a conocer tu verdadera identidad? -preguntó.

-Ya hablamos de esto, todavía no estoy lista. -dije sin ánimos.

-Es lo más estúpido que he escuchado. -dijo sin darle importancia.

La Chica Y mi Obsesión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora