15

22.8K 1.8K 561
                                    

Narra el escritor

Laito jadeaba y gemía de placer, tu hombría lo estaba volviendo loco, cada embestida golpeaba con fuerza su próstata, el estaba en cuatro y ti detrás de él.

Laito: kyaa!!--cierra los ojos y se muerde el labio -- me corro!

Angel :--jadeando-- ¿de verdad? --levanta su mano y la estrella contra su trasero-- ¿mi pequeña zorrita no aguanta más?

Laito grito al sentir como lo mordias sin nada de piedad y como tus embestidas se volvieron más violentas.

Angel: aguanta por tu amo~ --se tira el cabello hacia atrás mientras suda-- lindura gime más fuerte, para tu amo y señor

Laito gimio, estaba por llorar, se estaba volviendo loco de placer, en un momento te detuviste, te colocaste boca arriba y dejaste que Laito controlará los últimos minutos, lo veías subir y bajar mientras lloriqueaba, jamás había sentido tanto placer, acariciabas sus caderas, sus piernas, y en eso, te sentaste mientras Laito aún seguía saltando, y lo besaste, el gimió y enrollo sus brazos detrás de mí cuello, no aguantaste más y te corriste en su interior, Laito de separó del beso y gimió de placer puro.

Lo viste temblar, y sollozar, mientras trataba de moverse un poco. Tocaste su trasero y lo abrazaste.

Ángel:--sonrie-- hora de despertar cariño --le besa la mandíbula-- mi pequeña zorrita debe levantarse.

....
Laito pego un salto y desperto, estaba agitado y miraba a todos lados, había sido un maldito sueño, se movió un poco y gimió al sentir sus piernas empapadas de su semen, se había corrido mientras dormía, sollozo al récordar como lo tocaste y se levantó para limpiarse, sus piernas le temblaban por el placer y al final se limpio y un escalofrío le recorrió la columna cuando experimentando dirigió su dedo a su entrada, casi callo arrodillado al sentirla muy sensible.

Laito: Ángel ....--avergonzado--
....

Mientras tanto tu, estabas en tu casa, tu cabeza dolía y sentías fuertes punzadas, esa noche no irías a la escuela, tus amigos no estaban enterados de nada, a ellos si los ibas a mandar, no porque tú estuvieras enfermo esos flojos no iban a ir, le dijiste al conductor que los llevará a la escuela y que no le dijera que ni ibas a ir, hasta que estuviera el auto en marcha.

Rato después, escuchaste a tus amigos gritas algo sobre una "traición" mientras el auto se alejaba con ellos adentro

Por fin pudiste descansar, te acomodaste en tu cama y cerraste los ojos, te cubriste bien y te dejaste llevar al mundo de los sueños.

Rato después, te volviste a despertar, pero ahora tu cabeza te dolía más, gruñiste y le pediste al mayordomo que te trajera analgésicos y también un termómetro, aparentemente te estaba subiendo la maldita fiebre.

El chico de cabello rubio llegó nuevamente y te dio las pastillas, estabas muy mal, no sabías como te habías enfermado así, en eso el chico se estaba llendo para dejarte descansar pero agarraste su muñeca.

Angel: quédate, por favor....--mueca-- no me dejes solo --comienza a ver borroso--

El chico de ojos rosados se sonrojo y rápidamente se sentó a tu lado en la cama, puede que sea una falta de respeto, pero tu le pediste que no se fuera, se mordió el labio al verte hacer esas muecas de dolor, acerco lentame su mano a tu cabello y lo acarició, milagrosamente dejaste de sentir tanto dolor, tus muecas y quejidos disminuyeron, y el se sintió feliz al ver como dejabas de quejarte tanto, acariciaba tu cuero cabelludo con suavidad, era algo relajante, suspiraste y te relájaste, tu mano se aferró a la orilla de él traje que llevaba el chico, por fin, pudiste descansar.

El chico de nombre Alex se quedó a tu lado en todo momento, acariciando tu cabello logrando que tuvieras un buen sueño, paso el tiempo, cuando la puerta fue abierta por un rubio, tu menos amigo venía con... ¿Los Sakamaki?

Todos quedaron en silencio al ver al mayordomo personal del pelinegro, sentado en la cama, dormido sentado, mientras tenía una de sus manos en tu cabeza, enredada entre tú cabello, y tú con tu mano aferrada a su ropa, durmiendo plácidamente.

Pero a ninguno de los vampiros, les gustó la escena. Y la sed de sangre que los inundaba era evidente.

Continuará

Carajo (Diabolik Lovers X Malé reader seme) En PausaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora