¿Es Tu Amor Suficiente? ©

Capitulo 27 - FINAL (Primer libro)

POV VERONICA

William me ve asustado, creo que mas que asustado  esta de que pueda hacerle una escena que hacerse ver con sus amantes frente a la sociedad.

- Cállate y sigue bailando -toma mis manos y trata que lo vuelva a tomar a seguir bailando.

Sin ninguna fuerza alguna me vuelvo a soltar, actuando como si me sucediera algo.

- Mi esposo me tiene muy bien cuidada,William, el Señor Parici a escuchado esas palabras salir de mi boca muy bien, no creo que quieras que el te vea de manera diferente ¿cierto, cariño?.

William aprieta la mandíbula ,callado y aun enojado me guía hasta la mesa, donde los señores Parici nos miran extrañados cuando mi "esposo" me pone el abrigo que me había llevado.

- ¿Se van tan pronto? -Dante Parici pregunta.

- No me siento muy bien Señor Parici, la única que se va a casa soy yo, pero mi esposo se queda,les ruego que me lo devuelvan entero -toda la mesa estalla en risa ,también mi Will.

Me despido de todos y salgo escoltada por Will hasta el auto donde ahí me espera Lev, abre la puerta y cuando ya estoy adentro del auto ayuda a acomodar el vestido carmín que a quedado afuera y lo mete delicadamente dentro del auto ante la mirada acusadora de William.

- Nos vemos en el hotel -había murmurado William cuando la puerta había sido cerrada y la ventana había sido bajada por completa,  ya se  noto el  enojo en su voz ,pareciera ¿arrepentimiento?.

El lugar donde estábamos si bien no era muy lejos del hotel en el que nos alojabamos, pero en transcurso del camino Lev cambia el rumbo hacia una carretera concurrida de muchos camiones con carga, me parecía muy raro pero estas ultimas semanas Lev no desmostaba ningún comportamiento extraño, por lo que había pensado tomo tal vez un atajo.

El atajo ya había comenzado a asustarme cuando empezamos a adentrarnos a pastizales con enorme plantas de maíz.

- Lev -lo llamo pero el no responde y cuando me escucha empieza a acelerar, llego a temblar cuando los seguros de las puertas del auto se cierran impendiendo al menos mi idea de saltar del auto.

¿Iba a matarme?¿Eran ordenes de William?.

No se cuento tiempos pasa, ni cuantos kilómetros pasa, para que el auto se detenga donde hay un poste de luz.

- Sal -ordena el abriendo las puertas, al ver que no lo hago, el ya afuera, abre la puerta y me saca del brazo.

Grito pidiendo ayuda cuando el me lleva unos paso mas allá del auto, casi en medio de la carretera entre los campos de maíz ,con las poca luz que tenemos .

- ¡Basta ya! -grita zarandeandome de los hombros- ¡Cálmate! No voy a hacerte nada.

Hacia su declaración paro de moverme.

- Escúchame bien ,eres una mujer muy inteligente y se que tu haras lo que te digo -me mira fijamente- esto es un escape, ahora mismo no puedo decirte quien lo planea, pero debes seguir todo lo que yo te diga. 

Asiento dudosa y frenéticamente.

- Te sacaras los zapatos y me golpearas en la cabeza, cuando lo hagas tomaras mi arma y me dispararas en la pierna, ves a tu atrás, solo hay pastizales, pero si abres bien las primeras hileras encontraras un camino, cuando lo hagas síguelo recto , corre, no pares nunca.Unos kilómetros adentro encontraras una cabaña ,te  estarán esperando alla, tienes que hacer todo lo que te digan ,en todas las personas que te ayuden, somos los buenos Ronnie.

- ¿Como puedo confiar en ti? -el rápidamente arranca la cadena que estaba colgando de su cuello de una virgen, ese momento la pone en mi cuello.

- Cuando nos volvamos encontrar devuélvemelo,somos los buenos.