Le supliqué a Anna que por favor no me hiciera ir a cenar, fui tan pesada que al final cedió, me perdonó la cena, pero me dijo que se quedarían aquí unas dos semanas porque mientras desempaquetaban las cosas la casa estaría hecha un desastre, le dije que me daba igual lo único que no tenia que hacer era salir de mi cuarto.
"No salir del cuarto"... Era imposible, me repetí la misma frase cientos de veces, pero cuando llamaron a la puerta abrí la puerta de mi habitación de golpe y me senté en las escaleras, corría el riesgo de que me vieran pero Víctor tenía cataratas en los dos ojos, no veía tres en un burro así que me despreocupé.
Pero en cuanto adentré la mirada en los profundos ojos azul cielo de ese muchacho supe la verdad, no era Víctor y su hija, eran Jack y Cristal, claro ellos me daban por muerta y eso convierte a Jack en viudo. El chico en el que posé mis ojos no era el mismo que el de la primera vez, se le notaba el dolor en la mirada, había sufrido mucho y seguía sufriendo, se lo notaba.
-Siéntense, por favor-Dijo Anna haciendo el gesto.
-Gracias, majestad-Resopló Jack.
Cuando se sentó vi que llevaba puesto todavía el collar que me regaló por San Valentin, yo nunca me lo quité, eso significaba que después de todos estos años me seguía amando, con lágrimas en los ojos salí corriendo hacía mi habitación, pero me resbalé y caí al suelo, se oyó por toda la sala.
-¿Qué fue eso?-Preguntó Cristal
Anna corrió a ayudarme con Jack y Cristal, pero antes de que subieran ya estaba yo en mi habitación.
-¿Quién era esa?, me resulta bastante familiar-Dijo Jack
-¿Quién? ¿La que se ha caído? Es la torpe de mi sirvienta, es un poco tímida-Le contestó Anna un poco nerviosa.
-Supongo que será mi imaginación, me estoy volviendo loco.-Dijo Jack muy apenado.
Al terminar la cena Anna les enseño sus habitaciones, me sentía aliviada, no me descubrieron, solo tenia que aguantar dos semanas, era fácil, o...al menos eso pensaba.
Aquella noche, a las 00:32 exactamente, contemplaba el collar que me regalo Jack, era una cadena de plata con un corazón grabado que ponía "Te querré siempre", al leer esas palabras vi nuestra historia pasar delante de mis ojos, vi cuando cada beso y cada lágrima, vi como había desecho y compuesto mi corazón, lo vi, todo...
Vi a mi familia y entendí que por culpa de mi egoísmo lo había echado todo a perder, pero luego recordé el dolor y supe que había hecho bien.
Tenía el collar en mis manos cuando salió a jugar mi factor torpe y lo tiré, se me escapó por debajo de la puerta, salí a buscarlo y me tropecé con Jack.
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Falsas esperanzas...
RandomContinuación de 'Reina de su silencio, esclava de sus palabras...'