Falsas esperanzas...

Capitulo 4

-¡Eh tú más cuidado!- Me dijo con cara de cansado.

Escondí el collar rápidamente y no llegó a vérmelo.

-Perdón señor-Dije yo simulando ser la sirvienta de Anna.

Yo seguí caminando, Jack se paró detrás de mi

-Espera, tú eres...-Dijo él ya recondandome.

Yo corrí hacia mi habitación cuando escuché

-¡Jane!, Jane espera por favor- Jack tenía su collar en la mano apretandolo con fuerza y con lágrimas en los ojos.

-Yo no soy Jane- Es lo primero que se me pasó por la cabeza, no tenía tiempo de pensar.

-Claro que eres tú-

-¿Quieres saber la verdad?- Estuve un rato callada pensando en que iba decir al final dije:

-Soy un producto de tu imaginación, estas tan enamorado de mi que me imaginas, yo estoy muerta-

-¿Qué? Eso no es cierto.-

-¿Y como sabes que no es cierto?-

-Porque si fuera cierto estaría todo el día haciendo esto-

Me besó, tuve un momento de duda pero al final le aparte, le dije que no estaba preparada y que después de tanto tiempo no estaba segura de lo sentía.

Me acompañó a mi habitación y se lo conté todo, Jack empezó a llorar:

-Jack, Jack no llores, por favor-Lo dije con un nudo en la garganta

-Perdón no puedo evitarlo, por un lado lloro de frustración por haberme mentido y hacerme pasar los peores años de mi vida sin estar a tu lado, por otro lado de felicidad porque te haya encontrado y estés aquí conmigo, y luego de frustración otra vez por que estés aquí y no pueda darte un beso.-

Le di un abrazo, él lloraba, yo lloraba, cada vez que me tocaba sentía lo mismo, era como si me sintiera fuerte y débil al miso tiempo, entonces me vio el collar, y una deslumbrante sonrisa le apareció en el rostro.

-Jane, lo...lo sigues teniendo, después de todo este tiempo...-

-Nunca me lo quité...-

-Te quiero Jane...- Me susurro al oido y se dirigió hacia la puerta.

-Jack...-Le llamé antes de que abriera la puerta

-¿Qué pasa?-

-¿Puedes quedarte aquí conmigo esta noche?-

-Claro-

Nos quedamos dormidos, era algo muy extraño, seguía oyendo su voz cuando dormía a mi lado, seguía sintiendo su abrazo en mis sueños.