Capitulo 2

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<<Esa voz...>> fue lo único que detuvo a Raizel al escuchar la voz detrás de él.

—Raizel.

<<No...>> Seguía escuchando su llamado.

Incluso si escuchaba sus pasos no tenía la intension de voltear, no cuando acordaron algo.

Y al parecer es algo que él únicamente cumplió aunque por dentro no se sorprendió ante eso.

Incluso si sentía todas las miradas encima suyo como si fuera el centro de su propio espectáculo aunque fuera de la realidad no estaba.

Nadie se oponía y nadie se atrevía a mencionar algo ya que era algo que no les incumbía o no sabían cómo reaccionar.

Aunque todos se inclinaba más por la segunda.

—Cadis Etrama Di Raizel —El mencionado dio un suspiro por debajo al escucharlo mencionar su nombre completo. —Tenemos que hablar. —Cada palabra que decía era más bien una orden. Incluso si todavía lograba diferenciar entre una orden y una petición, no logro ni siquiera voltearse a verlo.

—Me niego —Cortante, asi sonaron sus palabras, aún sin siquiera darle una mirada, empezó su andar, tratando de ignorar su actitud. Pero nada funcionó después de ser sujetado por su muñeca con una fuerza que no sería apropiada para un humano común.

—No, tenemos que hablar ahora —Una orden, eso fue lo que era, no una sugerencia ni una petición, eran sus órdenes lo que siempre daba cuando no tenía el control, incluso si los dos no lo tenían en esos mismos instantes.

El simple hecho de verlo ante la brusca manera de ser sujetado solo lo hizo tensar, milenios pasaron y aún así nunca logró olvidar esas memorias que lo consumían por cuenta propia.

—No. —Y después de tanto tiempo lo miro a los ojos. La tensión los carcomía, solo eran ellos dos, olvidándose de que estaban en un lugar público con humanos a su alrededor.

—Siempre tan insolente. —Bramó de manera inconsciente dejando que un brillo adornara sus ojos.

—Suéltelo —Y solamente fue por M-21 que regresaron a la realidad, incluso si Raizel sentía como el hombre lobo sostenía de manera gentil su brazo, no podía decir lo mismo por parte de su gemelo al notar como sus venas se marcaban en sus manos.

Pero a pesar de eso, su gemelo no se dejó intimidar y era algo imposible que eso sucediera.

—Suéltame es que si no quieres desaparecer. —Amenazo aún si tenía su mirada en Raizel, quien aún se mantuvo firme a pesar de que su mente la carcomía por dentro, mientras hacia su agarre más firme.

—Será mejor que... —Incluso si trato ignorar el aura que lo rodeaba no logró evitar su pequeño sobre salto al ver como el Noblesse sujetaba, con su único brazo disponible, el repentino golpe que le trató de proporcionar aquel desconocido.

El hecho de que tenga la apariencia de Raizel no le ayudaba a mantenerse sereno.

—No te atrevas. —masculló de manera seria, apretando de manera inconsciente el brazo de Reynold.

Frunció su ceño ante el repentino cambio de su gemelo por una peste.

—¿Señor? —Y como si las plagas se multiplicarán llegó uno más.

El hecho de sentir un aura oscura en él lo hizo querer atacarlo, cosa que no logró al sentir como su brazo siendo sujetado con demasiada fuerza siendo raro de ver por parte de Raizel.

—Hablemos. —Decretó soltando primero a Raizel empujando al peligris con la fuerza suficiente como para hacerlo retroceder varios pasos, cosa que ocasionó que el peli morado se pusiera a la defensiva.

—.... —Aún si sentía una amenaza por parte de Reynold, no tendría más que obedecer.

>>Los niños<< Recordó por un instante, tratando de buscarlos con la mirada observando que el único que causaba alboroto era Shinwoo quien trataba de salir del agarre de Tao, para tratar de resolver ese asunto a su manera.

Que era algo que nadie quería.

—Ahora. —Puntualizó al sentir que era ignorado, sintiendo por sus adentros su enojo crecer.

—Me temo que no podré permitir esa conversación si es que me permite opinar. —La voz de Frankenstein haciendo presencia, calmo un poco al Noblesse dejando que su agarre se aflojara lo suficiente como para hacer que Reynold se soltara.

—Tienes razón, no se pidió opiniones de terceros aquí.

—Jefe. —El llamado de Takeo lo hizo voltear a su dirección tratando de buscar una aprobación para sacar su arma, incluso si estaba a la vista de civiles.

—No. —Pero fue Raizel quien lo decreto, ya sea porque sabía que eso solo iba a provocar más tragedia que resolverla. —Hablemos. Lejos. —Fue su último mando, caminando lo más lejos posibles de los demás siendo seguidos de Reynold incluso si escuchó ser llamado por distintas voces.

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⏰ Última actualización: Mar 24 ⏰

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¿ℍ𝕖𝕣𝕞𝕒𝕟𝕠? (ℕ𝕠𝕓𝕝𝕖𝕤𝕤𝕖)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora