Mi Chico Frío 2 (Jungkook y tú)

Capítulo 130

Estar sola en casa no me parecía la mejor opción, pero por otra parte me gustaba la idea de convivir con mi hogar y así poder familiarizarme mejor con cada rincón de esta casa, el día había iniciado con buenos ánimos o al menos así me sentía yo, comencé a lavar todo los platos que había utilizado para así dejar la cocina impecable, quiero decir que al hacer esto siento que cada vez entró al papel de esposa y es nuevo para mí ya que en mi casa con mis padres casi no hacía nada de esto, o al menos no tenía tiempo ya que la mayoría del tiempo me la pasaba acosando a Jungkook o pensando en él.

Luego de un buen lavado y secado de platos me dirigí hacia la parte de arriba de la casa, me gustaba cada habitación y en especial la vista ya que todas tenían un ángulo diferente el cual debía de apreciar, no me arrepiento de haber hecho tantas habitaciones la verdad es que a pesar que sabía que solo viviríamos nosotros dos no podía dejar de pensar en una gran casa con mucho espacio, pensaba mucho que eso se debió a que nací en una casa gigante solo para tres, la mayoría del tiempo me encontraba sola y me acostumbre a eso ya que entendía a mis padres y su vida llena de trabajo, pero a pesar de eso siempre trataron de darme mucho amor y trataron de estar para mí cuando más lo necesite, sin mencionar que me han dado todo lo que necesitaba y creo que hasta lo que no.

Luego de un largo recorrido por la casa me dirigí a mi oficina la cual esta se situaba en la parte de abajo en unos de los rincones más cómodos de la casa, y al estar ahí entre y al ver por completo la oficina quiero decir que me encante ya que dibujarla fue una cosa, pero al verla ya construida era maravillosa, y con solo entrar me inspira a querer trabajar desde luego no tarde en sentarme en la silla con rueditas que se encontraba detrás del escritorio de cristal, sabía muy bien que al lado de mi oficina se encontraba la de Jungkook y la razón por la cual decidí que fueran separadas era porque conocía a Jungkook y sabía que necesitaría su momento a solas y yo como toda una buena esposa se lo daría, pero fuera de esa oficina que se olvide de la soledad.

Comencé a trabajar en los planos que tenía pendiente en mi correo, suspiré al darme cuenta que de un día para otro ya tenía tanto pedidos los cuales debía de hacer tan pronto como sea posible, porque aparte de que Jungkook podría llamarme la atención esto podría acumularse y luego yo sería la afectada, no espere más tiempo y comencé a trabajar en ellos, sin duda tendría mucho trabajo esta mañana.

Al hacer cada línea completamente perfecta con mi lápiz sobre del papel blanco grande, era algo el cual me emocionaba, antes creía que jamás sería buena para algo y ahora soy TN la gran mujer que hace los planos en la gran empresa nacional, y bueno ya no nacional ahora seremos una empresa internacionalmente y de verdad me hacía sentir bien y orgullosa del trabajo que estoy logrando junto a Jungkook, aunque el con o sin mí siempre llegaría a tener éxito.

Después de haber terminado la mitad de mi trabajo escuche el timbre de la casa sonar y eso me sorprendió ya que Jungkook jamás dejaría el trabajo por llegar temprano a casa, y bueno mis amigos estan muy ocupado, y con los vecino apenas y me di cuenta que tengo ya que estaba muy emocionada por mi recién matrimonio y casa. Detuve mi trabajo para luego salir de la oficina y dirigirme hacia la puerta principal el cual al estar ahí no tarde en abrir, y esta al estar abierta tan solo me provoco la expresión de fruncí mi ceño ya que no se encontraba nadie detrás de ella.

Mire hacia todos lados y al dirigir mi mirada hacia mis pies me di cuenta que había una pequeña nota , la misma que me encontré la noche anterior, no tarde en tomarla en mis manos y luego volví a dirigir mi vista hacia todos lados mas no encontré respuesta ni rastro de nadie quien la dejara, al recibir la segunda nota concluí a la razón que estaban dirigidas hacia nuestra casa, lo único que no sabía era para quien se dirigía, cerré la puerta con seguro y de inmediato me dirigí hacia la sala principal el cual ahí me senté en el sofá grande para luego sacar la nota blanca el cual tenía impresa letras negras, sin duda lo enviaba la misma persona ya que era idéntico al anterior lo único que cambiaba eran las palabras las cuales decía:

''¿Nueva vida?, da siempre lo mejor de ti nunca olvides que nada es para siempre, pero lo que dura es valioso.''

A pesar que sus notas repetitivas me transmitían temor, debo de decir que lo que en ellas tenía escrito me motivaban, o tal vez así lo veía, desde ayer lo único que esas palabras escritas en esas notas me han deseado son cosas buenas aunque pienso que tal vez no sean para mi si no para Jungkook, ¿Y si es alguna admiradora?, o tal vez podría ser ¿Algún admirador mío?,  No eso es imposible a mí nadie me admira y lo se porque aun trato de creer que estoy casada con el hombre más codiciado del país.

Trate de procesar la situación a lo que decidí que me quedaría con las dos notas,  no es algo por el cual armar un alboroto, así que no le diré nada a Jungkook tan solo las guardaré para mi estoy segura que la persona dejará de enviarlas y todo seguirá normal. Me dirigí a la habitación para guardar las dos notas en un lugar del cual solo yo tuviera acceso aunque pensándolo bien Jungkook jamás se entromete en mis cosas, o tal vez solo no le importa y de verdad a mí tampoco así que solo las guardaré y ya.

He regresado espero aun me amen como el primer dia.