Día 2. Apocalipsis

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"There is a house built out of stone 

Wooden floors, walls and window sills 

Tables and chairs worn by all of the dust 

This is a place where I don't feel alone 

This is a place where I feel at home."

Frondosa pradera en lo más profundo de las montañas, el pasto es arrullado al ritmo de la brisa que pasa entre cada hierba

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Frondosa pradera en lo más profundo de las montañas, el pasto es arrullado al ritmo de la brisa que pasa entre cada hierba. Una brisa algo fresca, pero no al punto de congelar los lirios que reposan en el suelo, algunos podían verse algo secos, por la escasez de lluvias en la región; sin embargo el sol los bañaba con sus ligeras capas de iluminación. Ese mismo sol estaba muriendo en medio de dos colinas verdosas; provocando así un espectáculo de luces danzando entre sí: moradas, amarillas, naranjas y rojas. 

Cualquiera que viera por primera vez ese atardecer caería profundamente enamorado.

En la punta de una montaña de gran altura, un chico de cabello castaño se hallaba sentado y contemplaba el gran espectáculo de luces que le ofrecía el ocaso.

Osamu Dazai era un simple espectador.

Inconscientemente sus labios se curvaron en una ligera sonrisa; fue espontanea, hace días que no sonreía de esa manera. La causa de su sonrisa fue observar los colores amarillo y morado mezclarse entre sí en el cielo; le recordaban a Atsushi Nakajima.

"—Siempre lee el mismo libro.

Osamu dejó su lectura para prestar atención al chico que estaba en frente de él.

—Un buen libro siempre es un buen libro, no importa las veces que lo hayas leído.

—Dazai-san, pero—comenzó a decir dudoso—¿es necesario que sea un libro sobre suicidios?

—Es muy necesario si quiero comprender la esencia de la muerte—cerró su libro y continuo con la plática—¿es doloroso morir por las sensaciones que pasan por tu cuerpo o por los tristes sentimientos que se alojan en tu corazón?

—Aah, ni idea—contestó Atsushi—¿Usted qué cree?

Dazai sonrió.

—En la segunda cita que tengamos te cuento, ahora hay que regresar a la Agencia o Kunikida-kun se pondrá como loco. Aunque me da igual si se molesta—bosteza Dazai—pero tu debes regresar a terminar informes.

—¿Cita?—balbuceó Atsushi mientras sus mejillas y orejas enrojecían.

—Sip—afirmó al levantarse del banco del parque—tu elegirás esta vez el lugar."

Los árboles de roble rojos forman una hilera, como si estuvieran trazando un camino o marcando un dibujo, éstos se encontraban en la pradera y el color de sus hojas se confundían con el violento rojizo que formaban los rayos del sol.

DazAtsu Shipptober 2020 - BSDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora