handong junto a sus amigas sua, jiu y gahyeon forman a las chicas más populares de su secundaria.
dami junto a sus amigas siyeon, yoohyeon y amber forman el grupo de las nerd insignificantes.
ambos grupos se odian, sobre todo handong y dami, per...
Estaba muy nerviosa, ya había sonado el timbre para irnos hace diez minutos pero Handong no aparecía por ningún lado-
-Le daré diez minutos más y si no llega me voy -me dije a mi misma mientras apretaba el agarre en mi camisa-
Diez minutos después
-Le daré diez minutos más, e-ella llegará...-murmuré con algo de esperanza-
Media hora después
-E-ella, ella llegara...- llevé mi mano a mi mejila limpiando una pequeña lagríma que se deslizaba por esta-
Sentí caer en mi rostro gotas, esas gotas se volvieron más y más fuertes, busque refugio débajo de un árbol, no sé como pude tener la esperanza de que Handong fuera amable una vez, que no piense solo en su maldita y hermosa cara.
Sentí que alguien me abrazaba con fuerza por detras.
-Dami, Dios mio, lo lamento tanto, me olvidé por completo nuestra tutoría -su voz sonaba preocupada y solo por eso la perdono un 5% - seguro estas molesta pero para mí no habría problema de aun hacer la tutoría -sonreí un poco antes de voltearme-
-Me tendras que hacer chocolate caliente -le dije y ella sonrió asintiendo para luego abrir la sombrilla e irnos a su casa-
Casa de Handong
Cuando entre a su casa me soprendí bastante, era una casa sencilla pero muy elegante.
-Quedate aquí te traeré ropa seca -asentí a lo que me dijo Handong y la ví subir las escaleras hasta perderla de vista-
Me acerqué a ver las fotos colgadas en la pared, contiene fotos de Handong con una mujer que lo probablemente sea su madre, también fotos de un chico, seguro un primo o hermano.
-Aquí tienes -me entregó la ropa y sonreí asintiendo-
-agarré la ropa- ¿Dónde está el baño? -pregunté y Handong me señalo una puerta que seguro llevaba al baño de invitados- gracias -agradecí con una sonrisa y caminé al baño, tal vez Handong si era buena persona-
Handong
Me maldecí por no haberme acordado de la tutoría, Dami se había mojado y tenía miedo de que le fuera a dar un resfriado por mi culpa.
Corrí a la cocina a preparar el chocolate caliente, tal vez con esto se pueda calentar.
Caminé a la sala a ver si Dami había salido pero al parecer no, pues la sala estaba sola.
-¿Qué tal? -casí doy un brinco del susto, me voltee y miré a Dami sentí un rubor en mis mejillas, ella se veía realmente bien con aquella ropa-
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-T-te ves bien -murmuré mirando a otro lado-
-Gracias, oye, huele a que algo se quema -ay no, corrí a la cocina y por supuesto se quemó el chocolate-
-Estúpida Dami...- susurré y volví a la Sala- no podré darte chocolate caliente -la miré apenada pero ella me sonrió calmadamente-
-Esta bien, empezemos a estudiar -asentí para luego a su lado en el suelo frente a la pequeña mesa-
Una hora y media después
-¿Era así de facil? -pregunté divertida mientras completaba el ejercicio-
-Si Handong, el problema es que tu entendíeras -rodee los ojos por su comentario, pude sentír como Dami se acercaba a ver lo que hacía, mire que su mano se apoyaba en el suelo a mi lado, podía sentir como su suave respiración chocaba en contra mi oreja, trague saliva nerviosamente- Handong, concentrate-su voz sonó algo ronca al hablar-
-¡Listo! -exclamé con una sonrisa, levanté la vista y me encontré con el rostro de Dami muy cerca del mio- l-listo...- murmuré suavemente-
Ella sonrió y se acercó un poco más, no se porque pero no retrocedí, me quede quieta mirandola.
-Handong te han dicho lo hermosa que eres, que digo, seguro te lo dicen a menudo -reí suavemente asintiendo, la distancia se fue acortando, un poco más y la podía besar-
-¡Hola! -las dos nos separamos de inmediato, mi madre había llegado y les aseguro que no en el momento correcto- oh, hola -miré a mi madre, esta sonreía grandemente viendo a Dami- Soy la mamá de Handong, un gusto -Dami le sonrió amablemente-
-Lee Yoobin, tútora de su hija -mi madre asintió-
-¿Te quedaras a comer? -le preguntó mi madre- dudo que te vayas con esta lluvia -las dos miramos por la ventana y estaba lloviendo aun más-
-Yo, no sé...- ella me miró apenada-
-Claro que te quedas -le sonreí y pude notar un fuerte rubor en sus mejillas, adorable-
-Genial, puedes dormir com Handong -ay no, hoy íba a ser una larga noche...-
