Dos días habían pasado, siendo este viernes. Ya era mediodía. Harry me había dicho que me pasaría buscando a las siete. También me dijo que no era necesario que me arreglara tanto. Que era un lugar que concia mucho. Pero, ¿Cuál? Aunque me estuviera dando pistas, no me ayudaba mucho. Me confundía más. Así que desde que me desperté estaba un poco estresada.
Le dije a Gemma que me ayudara, pero dijo que iba a poder, al igual que Holly. Así que esto estaba un poco difícil. Es decir, claro que sabía como arreglarme, pero estaba algo nerviosa. ¿Por qué? Ni idea.
Es decir, no sabía que iba a decirme. No sabía a dónde me llevaría. Y mucho menos, sabría que pasaría. La situación estaba algo intensa.
Luego de relajarme mientras comía algo de chocolate, me dirigí a mi habitación. Era el momento de escoger lo que me pondría.
Mi celular sonó, haciéndome levantar de la cama. No estaba dormida, estaba descansando. Tome mi celular y lo vi. Harry. “Ya no puedo esperar por verte. Aunque no lo creas, estoy algo ansioso”. Rápidamente le conteste: “Si tu estas ansioso, imagínate yo, Harry. Eres una mala persona”.
Luego de eso, nos seguimos mandando mensajes por un gran tiempo. Luego de que me mando este mensaje “Bueno preciosa, te tengo que dejar. Falta poco por vernos”. Y al terminar de leer, vi la hora. Eran las seis en punto. Me di cuenta de que no me había bañado, así que rápidamente me adentre al baño mientras me despojaba de mi ropa.
Luego de un rato, salí del baño y comencé a buscar mi ropa. Luego de unos cinco minutos discutiendo conmigo misma de que podría ponerme. Lo encontré. Me despoje de la toalla y me comencé a vestir. Dijo que no tenía que ser tan arreglado, así que me gusto lo que escogí.
Luego de estar lista http://www.polyvore.com/selly/set?id=93826981 , suspire y tome mi bolso junto con el celular y comencé a bajar las escaleras. Mientras bajaba, escuchaba las risas de mis padres y otras personas, pero no sabía de quien.
Al terminar de bajar estaban mis padres y los padres de Harry. Sonreí mientras comenzaba a saludar.
-¿A dónde vas, cariño? – Pregunto mi padre.
-Pues… Harry me invito a salir – Mordí mi labio mirándolo.
-¡Al fin! – Soltó Anne para luego soltar una risita.
-Tardo un poco en hacerlo, ¿no? – Dijo mi mama y nosotros reímos.
-Un poco – Dijo Robín y la puerta de mi casa sonó.
-Espera – Dijo mi padre deteniéndome – Me quiero divertir un poco – Rio mientras se acercaba a la puerta y la abría.
-Hola, señor – Sonrió Harry tomando su mano.
-Me acabo de enterar de que saldrás con mi hija – Dijo mi padre serio.
Yo me encontraba atrás con mi madre y Anne aguantando las risas.
-Sí, yo… bueno… fue algo que paso – Decía algo nervioso.
-Sí, eso creo. Si no, me hubieses dicho, ¿no? – Pregunto mirándolo serio.
-¡Si, claro que sí! – Exclamo riendo nervioso.
Yo no pude aguantarme y solté una carcajada.
-¡Harry! ¡Es una broma! – Decía mi padre entre risas – Se que no le harás daño a mi hija. Se conocen de pequeños – Dijo mientras daba palmadas en su espalda - ¿Cómo estas muchacho? – Pregunto sonriente.
-Creo que bien – Rio mientras entraba y me veía – Te ves preciosa – Sonrió mientras se acercaba a mí y besaba mi mejilla – Aunque te guste hacer bromas como esas – Añadió divertido y nosotros reímos.
-¡No fui yo! – Exclame riendo - ¿Ustedes saldrán? – Pregunte confundida.
-Sí, iremos a cenar – Sonrió mi padre pasando su brazo por la espalda de mi madre.
-Bueno, espero que tengan una linda cena – Sonrió Harry apegándome más a él.
-Igual nosotros – Sonrió Robín.
-Bueno, ¿nos vamos? – Pregunte mirándolo.
-Nos vamos – Sonrió volviendo a besar mi mejilla y dirigiéndome a la salida – Hare que esta noche sea inolvidable para ti, ____ (Tn). Lo prometo – Dijo cuando ya estábamos afuera, haciendo que mis nervios subieran un poco.
-Gracias, Harry. Ahora estoy más tranquila – Dije sarcástica y el rio.
-Lo siento – Dijo mientras me abrazaba.
Nos dirigimos a una camioneta, me imagino que la suya. El me ayudo a subir, para luego dar la vuelta al carro para montarse el.
-Nunca te había visto tan caballeroso – Dije divertida.
-¡Siempre lo he sido! – Dijo mientras se acomodaba.
-¡Si, claro! – Exclame sarcástica – Lo dice el chico que le quito la paleta a una niña de ocho años – Alce una ceja y el soltó una carcajada.
-¡¿Aun lo recuerdas?! – Exclamo riendo mientras encendía el auto.
-¿Cómo olvidarlo? ¡Me quitaste mi paleta! – Dije golpeando su brazo y ambos reímos de nuevo.
-¡Tú me estabas restregando en la cara que la mía se había caído! – Dijo fingiendo estar molesto.
-Te lo mereces – Me cruce de brazos y el rio.
-Sabes que fue divertido – Dijo tocando mi mentón.
-Antes no, ahora sí – Dije y volvimos a reír.
El camino siguió por un rato. No parábamos de reír y conversar. Sinceramente esto comenzó muy bien. Y lo que comienza bien, termina bien. Me gustaba estar así con Harry. Aunque estuviéramos solos, nada cambiaba. Seguíamos siendo los mismos.
De un momento a otro, Harry se detuvo y saco algo de su bolsillo. Un pañuelo negro.
-¿Qué harás con eso? – Pregunte señalándolo.
-Es para ti. Colócatelo – Sonrió mientras me lo pasaba.
-¿A dónde me llevaras? – Pregunte riendo mientras me lo colocaba.
-A un lugar que conoces – Respondió soltando una risita.
El carro volvió a andar y luego de un pequeño trascurso se detuvo. Escuche como el auto se apagaba y Harry bajaba. Me asuste un poco. No sabía dónde estábamos y ahora estaba sola. La puerta del auto se abrió y sentí como unas manos me ayudaban a bajar.
-Dime que eres Harry – Dije algo nerviosa y el rio.
-Sí, si lo soy – Dijo este divertido y seguimos caminando – Ya estamos entrando – Dijo luego de un momento.
Sentí como una ventisca de aire pasaba por tomo mi cuerpo, haciendo que mi piel se erizara un poco. ¿Un lugar frio?, pensé al sentir esa ventisca
-Ya puedes quitarte el pañuelo – Dijo soltándome y eso hice, para llevarme una hermosa sorpresa.
Estábamos en la pista de hielo, pero estaba tan diferente. La barra donde se podía apoyar habían velas. Lo que hacía un ambiente muy lindo. En el techo habían luces, muchas luces. En el hielo, había pétalos de rosa. Y en el centro estaba una pequeña mesa, creo que con un sobre en el centro. Tenía una rosa en medio de ella. También estaba decorada con petalos rosas y varias velas en ella. Era muy hermoso.
-Harry… - Salió de mis labios y voltee a verlo - ¡Esta hermoso! – Exclame y lo abrace con fuerzas.
Sinceramente esta noche seria inolvidable.
