capitulo 33

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Pov Narrador

-¿esta insinuando que su hijo está aquí porque encontró un tazón de fresas podridas en su loker?- dijo atónito pensado en que todo era un chiste de mal gusto

-así es- respondió con una sonrisa burlona ante la expresión de todos los estudiantes- mi pequeña copia jamás desperdiciaría algo tan valioso para el eso va en contra de sus principios por si no lo sabían mi hijo tiene una grave adicción a esta fruta por eso sería imposible que la dejara olvidada- explicó con una expresión tan sería que era imposible pensar que bromeaba- ¿Que dicen nos ayudaran a buscar?- era imposible negarse sobre todo si los miraba con cara de "si dicen que no conocerán el verdadero terror" era un poco exagerado pero se sentían intimidados ante la presencia de ese alfa pelirrojo así que sin más empezaron con la búsqueda del omega

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No tuvieron éxito durante tres largas horas todos buscaban con esmeró empezando a sentir el cansancio dándose por vencidos

-¿Que están haciendo? Vamos levántense tenemos que seguir-

-lo lamento señor pero no creo que el este aquí-

-es sierto hemos buscado por todos lados y no hay rastros de el- hablo un grupo de cansados estudiantes alterando a Nagisa

-no me daré por vencido estoy seguro que está en algún lugar de esta escuela- tomo las manos de una chica viéndola suplicante- por favor ayúdenme siento que si no encuentro a mi bebé me voy a volver loco- pidió con lágrimas resbalandose por sus mejillas entristeciendo al pequeño grupo quienes se conmovieron por el pequeño omega peliceleste ellos aún eran jóvenes pero no les gustaria en un futuro no saber nada de sus hijos o pasar por una situación como la del joven padre asi que olvidándose del cansancio asintieron con determinación continuando con su labor

-¿Dónde estás hijo?...- se encontraba caminando por un lugar que al parecer no era muy habitado lo cual dedujo al ver el interior de los salones los cuales parecían estar llenos de polvo y telarañas inspeccionando con sus orbes zafiros cada pequeño detalle,observo extrañado como un montón de mesas estaban amontonadas en el ventanal de un salón impidiendo ver el interior de este no le tomo importancia hasta que escucho un quejido que al parecer venía de hay dudoso se acercó a la puerta divisando a través del cristal una cabellera roja irreconocible para el

-lo encontré....¡Lo encontré!!- trato de abrir la puerta desesperadamente fallando en el intento al ver que tenía seguro,sus escandalosos gritos llamaron la atención de todos quienes a paso rápido fueron hacia donde se encontraba siendo Karma quien llegó primero al frente de los demás

-apartate- ordenó tumbando la puerta

Nagisa no perdió tiempo en entrar quedando horrorizado al ver el estado en el que se encontraba su pequeño cachorro y no solo el varios de los que lograron entrar también estaban sorprendidos ante lo que presenciaban sus ojos,se apresuro a desatar al pelirrojo liberando  sus muñecas notando lo rojas y lastimadas que estas se encontraban para después retirar ese inmundo trozo de tela de sus labios los cuales estaban resecos y partidos,su cara estaba con rasguños y un poco hinchada sin mencionar que tenía un ojo morado

-Dios....pero que te hicieron- sentia su corazón estrujarse al ver a su pequeño asi,se sentía incapaz de retener sus lágrimas las cuales no habían dejado de salir desde el primer día que el pelirrojo no llego a dormir a casa- Aki cariño hablame- retiro algunos mechones de la frente del menor dándose cuenta de algo preocupándose más de lo que ya estaba- está ardiendo en fiebre- anuncio viendo como el pecho del pelirrojo subía y bajaba cada vez más rápido dando a entender que tenía dificultades para respirar

contra las reglasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora