Rumores [Drarry]

Capítulo III

   Harry Potter no creía haber cometido un error al haberse visto con Cedric, pero desde luego lo llegó a considerar porque, al día siguiente, el desayuno fue un desastre. Y cuando pensaba que fue un desastre, es porque realmente lo fue.

   Hasta ese momento no había creído en lo que Malfoy le había dicho, aquello de "rumor". Creyó que nadie se enteraría y también, pensó que nadie le importaría que él haya pasado tiempo con Diggory. Hasta llegó a pensar que eran cosas que Draco se inventó para hacer que la pase mal, sin embargo, que equivocado estaba.

   Cuando cruzó la entrada del comedor con la idea de desayunar, por supuesto, le sucedió algo que nunca creyó que pasaría, o por lo menos nuevamente. Las cuatro mesas correspondientes a cada casa quedaron en silencio por su sola presencia y luego, le dieron lugar al chisme. La gran mayoría de alumnos murmuraba y le daban lugar al cuchicheo. Harry trató de no demostrarlo pero, estaba bastante asombrado e incómodo y en ese momento no entendía por qué, hasta que se sentó junto a sus amigos en la mesa Gryffindor.

—¿Por qué no nos lo dijiste, Harry? ¡Somos tus mejores amigos, idiota!—Fue el primer susurro que escuchó por parte de Hermione. Ron, al parecer no estaba molesto, o por lo menos no más que ella.

—¿Decirles qué?—Respondió Harry mientras se servía algún par de salchichas asadas junto a unos huevos y bueno... Lo primero que se encontraba por ahí, en las fuentes de comida.

—¡Que estás saliendo con Cedric! ¡¡Cedric Diggory!!

Y fue ahí donde Harry comprendió todo lo que sucedía.

— Espera, espera... Confieso que no les hablé de la situación con Cedric pero yo solo lo vi ayer y como amigos. No sé que es lo que están diciendo.

—¡Nunca sabes nada! Pues, entérate, todos dicen que se trataba de una cita. Que estaban en las gradas del campo de Quidditch y bueno, parecían muy juntos según dicen.

—¡Pero es mentira! Solo nos vimos una sola vez. De hecho, hasta le hablé de él, o sea, patético... Me sorprende de verdad que crean algo así.

—Harry, todo el colegio sabe que eres gay, no debería sorprenderte esto—Ron se había metido en la conversación, algo fastidiado por lo obvio de la situación. Debido a eso, recibió un codazo en las costillas por parte de Hermione—¡Auch!, ¡Está bien! Es que es cierto, digo, no todos sabían que tenía una relación con Drac...¡Hey, para, eso duele!—Hermione repitió la acción, Harry en el interior se lo agradeció, no quería más rumores. Aunque eso era cierto— Pero es bastante obvio, así que es normal que ahora esten desesperados por saber si estás con él. Además, es Cedric Diggory, todas mueren por él-Aquello último lo soltó con más fastidio, pero Harry lo comprendía.

—Bien, pero que yo sea eso, que sea conocido por lo que ustedes ya saben y que Cedric sea guapo—Trató de no hacer énfasis en la última palabra— , no quiere decir que esté pasando algo.

—¡Es que no lo entiendes! Es como una explosión. Son una explosión. Tú, que el niño que vivió, todo lo que sucedió en Hogwarts, lo que hiciste y la gente que te admira con él. ¡Es mucho! Muchísimo—Ahora Hermione es quién le hablaba.

—Bien, pero no estamos saliendo... Y no pretendo hacerlo.

—Mejor, porque deberías mirarle la cara a tu ex. De hecho, te está mirando—Ron se metió nuevamente y apuntó con su dedo pulgar atrás suyo, a la mesa Slytherin.

   Harry enfocó la vista y se dio cuenta de lo que Ron estaba diciendo. Draco se había dado vuelta para verlo. No se le veía feliz, ni se burlaba de él como solía hacerlo en su intento de disimular, no. Malfoy tenía el ceño fruncido, se le veía muy tenso y podía notar que en la mesa de los Slytherin definitivamente no había un buen ambiente. Aunque eso si, Pansy Parkinson cuchicheaba con otra chica y miraba de reojo a Draco y luego a Harry.