20. Museo

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Austin no sabía como acercarse a su amiga, hace tiempo que no habían salido juntos, el ya le había pedido salir (como amigos) pero ella se negó argumentado sus estudios, era real, al no tener a nadie más con quien pasar el tiempo  Charlotte se refugio bajo los libros y autores.
Tony siempre insistía en que saliera pero ella respondía los mismo "NO".

Austin estaba desesperado, necesitaba sacar a la chica de ese falso refugio pero no sabía como.
Pepper llegó, vio al chico sentado en la recepción con lápiz y libreta en la mano, pensando.

-¿Austin cierto?

El chico miró a la mujer sonriéndole.

-si, buenos días.
-¿vienes a ver a Charly no?
-eso quería hacer pero no se...
-El museo de historia.
-¿que?
-a ella le gusta ese museo, va a dibujar las maquetas y huesos. Oí qué hay una nueva exhibición, deberías llevarla es gratis.
-¿en serio? ¿Cree que le guste?
-o si, créeme, le gustará.
-pero...¿porque me ayuda?
-conozco a Charlotte desde que era pequeña, quiero lo mejor para ella y algo me dice que puedes ayudar en eso.
-lo haré, muchas gracias.

El chico se fue corriendo hacia el piso más alto de la Torre.
Hablo con Tony y le contó su plan, ambos estuvieron de acuerdo.

Tocó su puerta, la chica abrió.

-¿quieres salir?
-Piano. Practico piano.
-Museo natural.
-¿que?
-vamos al museo natural, podemos estudiar ahí...
-¿que planeas?-dijo cruzando sus brazos.
-vamos!!! El museo, nueva exposición, gratis, tu y yo!!!

El chico lucia bastante entusiasmado, Charlotte pensaba en su puerta.

-iré por mi abrigo y libreta.

Al fin cedió.

El museo no estaba tan lejos así que tomarían un autobús.
Al llegar el chico tomó de la mano a su amiga y la adentro al edificio mientras corría.

La nueva exposición era sobre fósiles.
Ambos se paseaban por las instalaciones sin separarse demasiado.

-¿y qué cuentas?
-álgebra.
-vamos-rio-cuentame algo.
-Austin-sacó su libreta y lápiz- ¿porque haces esto?
-¿hacer que?
-insistir en salir conmigo.
-por los viejos tiempos.

Charly miraba detenidamente cada fósil expuesto y lo replicaba en su libreta.

-eres muy buena en eso.
-pues...tu no eres tan mal detective.
-ah...si. Gracias.-si gana a mi se desvaneció por un momento.
-aún no lo eres cierto?
-¿por que lo dices?
-eres muy joven.
-tu también y planeas estudiar licenciaturas y doctorados.
-a esta edad no puedes tener una licencia oficial.
-algún día la tendré.
-aún falta mucho para eso.
-si, tienes razón y aprenderé más para cuando sea el momento seré el mejor detective.

La chica sonrió.

-¿acaso no me crees? Lotty.
-sabes que te creo y se que serás el mejor pero...-su sonrisa se borro-¿porque jugar a ser adulto?
-estoy haciendo mi trabajo.
-No, en Sokovia te pusiste en un innecesario peligro, pudiste haber muerto!!!
-tu también estabas en peligro!!
-¿porque juegas a ser adulto?
-ambos sabemos que no soy el único. El mundo nos enseñó a vivir así Lotty, no podemos cambiarlo.
-¿y qué haremos?
-No podemos cambiar el pasado pero podemos hacer algo con nuestro futuro...
-y ser felices...claro que podemos pero no lo lograremos si seguimos tratando de impresionar a alguien más para cambiar la idea que tienen de nosotros.
-quieres impresionar a Tony ¿no es verdad?
-....No....pero tú si a Fury.
-No.

Ambos mentían

Quedaron en silencio por unos minutos mientras recorrían cada sala.

-¿quien te dijo del museo?
-Fuentes confidenciales.
-¿recuerdas que puedo leer tu mente?
-Pepper. Fue ella. Ahora porfavor!!! No leas mi mente, no quiero que veas lo que estoy pensando ahora.
-No te preocupes, ella debió volver por algo.
-¿y ahora todo está bien?
-¿a que te refieres?
-¿te sientes mejor? Con todo esto...
-si, podría estar mejor pero...no me quejo

Las horas habían pasado, ambos salieron del museo.
Caminaron por las calles uno al lado del otro, pasaron tiendas, avenidas, callejones...Austin se detuvo, tomó del brazo a la joven y caminó más rápido, se escondió en un muro.

-¿que suc....-le tapó la boca.

Charlotte reaccionó por instinto y lo mordió.

-perdón, perdón, perdón. No quise hacerte eso.
-No te preocupes.-sonrió-alguien nos sigue.
-¿que?
-en el callejón.
-agh! Odio los malditos callejones. Espera...¿callejón? Ya se qué pasa.

Charlotte salió de su escondite y se metió al callejón.

-hey, ¿que sucede?-dijo al callejón.

El joven corrió hacia su amiga poniéndose frente a ella, con una mano mantenía alejada a la joven mientras con la otra tomaba su arma.

-No hace falta el arma. ¿Cierto Stuart?

El hombre salió del callejón.
Parecía un indigente.

-la vida siempre cambia ¿cierto?
-Charly...¿como supiste?
-eres tan malo ocultándote, se cada ves que me miras.
-¿se han visto otras veces?- preguntó el chico.
-si, desgraciadamente si.
-¿porque esa obsesión?-dijo Charlotte.
-¿obsesión?-preguntó el hombre.
-pudiste tener una gran vida, ganabas bien, tenias tanto...y lo dejaste todo para seguirme. Ja, pudiste haber hecho otra vida pero nooo...decidiste seguir a alguien a quien no le importas.
-eres igual a él...
-¿a quien?
-Stark.
-es mi padre. ¿Qué esperabas?
-Stark me lo quito todo!!!
-¿todo?
-me quito a mi hija.
-la abandonaste.
-me quito mi trabajo.
-lo destrozaste.
-me quito mi vida. Eres lo que más ame...Charlotte eres mi hija.
-No-rio-No tienes hija, la mataste. Enfermo. Perdiste todo por querer poder, usaste a tu "hija" para obtener todo y al final ¿ lo tuviste?
-si, por un tiempo.
-¿a que costó?
-todo lo perdí, te perdí...te fuiste.
-No Stuart, entiende mataste a tu hija y ahora estás aquí pidiendo una segunda oportunidad, cosa que no tendrás.
-yo te amaba.
-No!! Yo te amaba, creí que en realidad me querías pero no...no era así y ahora dices quererme pero ¿adivina que? El día que mueras estaré tan feliz...reiré sobre tu tumba.

Eso hizo enfurecer al hombre quien corrió hacia la chica tratando de tomar su cuello y estrangularla.
Antes de que hiciera algo Charlotte invirtió los papeles, ella antes era la víctima y Stuart su abusador, ahora ella era una sobreviviente y el un indigente.
Austin le dio un golpe en el cuello al hombre tirando al suelo dentro del callejón.
Charly se aproximó al hombre y con lágrimas en los ojos enfrentó a su abusador, tomó de su cuello, sonrió y le dijo:

-¿ves? Ya no te tengo miedo-su voz se entre cortaba, parecía susurrar- jaja, ¿hueles eso? Es tu miedo, maldito. Ahora tu me temes y..deberías...podría sacarte los ojos aquí mismo-las lágrimas resbalaban por su rostro.

-¿si estás tan..segura..porque lloras?-preguntó el hombre.
-porque jamás creí decir esto. No te necesito, jamás te necesite, ahora moriras en las calles mientras yo viviré con mi verdadero padre, tu sangre recorrerá las alcantarillas mientras yo estaré viendo cada atardecer, anochecer y amanecer. Estarás solo así como yo una vez lo estuve y moriras sin saberlo así como yo mori el día en que me dejaste...¿sabes que es lo más gracioso? Ja, yo te dejare morir aquí como cuando tu me dejaste, en un callejón, sola, a mi suerte...pero la única diferencia es que yo tuve una segunda oportunidad-se acercó a su oído-tu ...tu solo morirás aquí y las ratas reclamarán tu cuerpo, nadie más. Jajaja, en verdad a nadie le importaría, solos serás un borracho más.

Se levantó, tomó la mano de su amigo y se marchó del lugar.
Aún las lágrimas salían de sus ojos atravesando sus frágil rostro.

-¿estás bien?
-de que hablas? Jamás estuve mejor-dijo Charly mientras lo miraba con una sonrisa en el rostro.-tenias razón, alguien nos seguía. Gracias.
-claro, no importa.

En realidad Austin sabía que alguien los seguía, Charlotte supo que era Stuart pero...no era el único que los miraba a través de la lejanía, no, aún seguían siendo acechados por alguien más.

La hija de Tony Stark II: nueva eraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora