Capítulo 1

3.1K 177 31
                                    

*Narra Ciel*

Estaba durmiendo, soñando, lo que era raro ya que nunca sueño, había oscuridad, mucha oscuridad, lo único que se veía era una figura, me acerque sin dudarlo y al llegar se volvió a alejar, tal vez me estaban haciendo una broma, corrí y corrí, por fin llegue a la figura, tenía buena postura, trate de hablarle y no me salieron las palabras, me cuesta admitirlo, pero tenía miedo, llamé a Sebastián, pero no me podía mover.

*Narra Sebastián*

Oí repetidas veces que el Bochan me llamaba, pero no podía reconocer donde estaba, ni en su cama ni en toda la mansión, pero era imposible que desapareciera sin dejar un pequeño rastro

-¡SEBASTIAN! - Grito Ciel - ¿Por qué no apareces? ¡SEBASTIAN! - Se detuvo abruptamente la voz desesperada de Ciel.

Bien, por fin reconocí donde está.

*Narradora*

Sebastián abrió las puertas principales y buscó entre los arbustos en donde encontró a Ciel moviéndose como una tortuga que se cayó de espaldas, estaba un tanto sucio, pero Sebastián de todas formas lo tomo en brazos, después de todo no lo iba a dejar en ese lugar.

-Bochan... ¿Cómo termino aquí?

-¡Eso lo deberías saber tú! Idiota...

-Cierto, sin embargo se me hizo imposible localizarlo, mis más sinceras disculpas - Sebastián se arrodillo delante del pequeño Ciel - el desayuno está listo, y todos lo están esperando...

-Disculpas aceptadas, primero supongo que me tendré que cambiar de ropa -Un poco entorpecido, se sostuvo de uno de los hombros del mayordomo-

-No se preocupe, yo lo haré, como siempre...

-Como siempre...

*Narradora*

Estaban a punto de entrar a la mansión, de forma totalmente coordinada parecieron todos los sirvientes: Mei, Finni y Bard, preguntando mucho y ayudando poco.

-Aléjense un poco del señorito -dijo Sebastián- está un poco aturdido y...

-No te preocupes, está bien.

-Como usted diga.

El mayordomo subió las escaleras con su amo en brazos de forma rápida pero segura.

Entraron a la habitación y Sebastián dejo delicadamente a Ciel en la cama, al instante empezó a buscar algo para vestir en el ropero, después de elegir le pregunto a Ciel si le parecía bien, a lo cual asintió un poco enojado, Sebastián tomo el pie de Ciel y antes de poder colocar el calcetín este hablo.

-Sebastian ¿Por qué no me encontraste? ¿Acaso tus poderes demoniacos están desapareciendo?

-Mph... - Sonrió de forma leve - ¿Le gustaría saber si mis poderes demoniacos están bien?

-Tengo curiosidad por saber a qué viene esa frase tan cliché... espero que no sea eso...

-¿Y qué seria "eso"? - Sebastian tomo el mentón de Ciel sutilmente- dicen que la curiosidad mato al gato...

-Sí, pero no soy un gato, creo que entonces tengo más posibilidades de conocer la verdad que un gato.

-Esas respuestas me encantan -Sebastian empieza a acercarse a Ciel, hasta el punto de que los dos conocían el calor del aliento del otro, sin duda, Sebastian empieza a besar a Ciel.

-¿Q-Que haces? No puedo creer que de verdad te hayas referido a eso, era de esperarse de un demonio...pero... ¿podrías ser más suave?

-Yes my Lord (En esa parte de mi imaginación morí)

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 13, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

-Matutino--SebasxCiel-Yaoi-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora