Único

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—Una habitación por favor. —hablo un chico.

—¿Para cuántas personas? —pregunto un hombre.

—Dos. —respondió.

—¿Cuántos días? —lo vio.

—Un mes. —sonrió.

El hombre asintió y comenzó a hacer los trámites, al finalizar le dio una llave y el chico agradeció, otro chico que iba con él lo siguió, al llegar a la habitación la cerraron y se vieron.

—Tomaré un baño hyung. —susurro el menor. —Puede acompañarme si gusta.

—Ve tú. —hablo. —saldré a fumar.

El pelinegro vio como el castaño salía de la habitación, camino al baño, pero un ruido lo detuvo. Su vista se dirigió a un celular lo tomó y era de su acompañante lo encendió y vio el mensaje.

«Vuelve pronto»

Él lo volvió a poner en su lugar y se dirigió a bañarse, al salir vio a su pareja en la cama con el celular. Camino a paso lento y dejó caer la toalla para llamar la atención, pero esta no fue cumplida.

—¿Por qué no me dices nada? —pregunto el pelinegro.

—Jimin debes de dormir. —lo vio el castaño. —El viaje te agotó mucho.

—Mi amor eres mi todo. —susurro. —no hay nada que pueda reemplazarte.

El castaño se levantó y sonrió para darle un corto beso a su pareja la cual sonrió. Su beso cada vez se iba haciendo más subido de tono, el castaño tomó de la desnuda cintura a su novio y lo giro para tirarlo en la cama.

—Eres el único al que amo, amor. —le beso el cuello. —Serás mío para siempre.

El pelinegro sonrió al sentir como su novio lo tocaba, unos suaves gemidos salieron de sus gruesos labios al sentir como su novio besaba cada parte de su cuerpo, su sonrisa creció, pues su hyung era suyo y el de su hyung. Ellos se amaban y era lo que más importaba solo ellos dos.

—Voy a entrar en ti hermoso. —susurro el mayor. —haré que cada persona de este maldito lugar te escuche gemir mi nombre.

—Me parece perfecto. —sonrió el menor. —Quiero que todos escuchen que yo tengo dueño.

Yoongi sonrió ante lo dicho por su novio, él se fue acomodando hasta poder tener un mejor acceso a la entrada de su novio y que este estuviera cómodo.

Poco a poco fue entrando en él hasta que ambos gimieron al sentirse uno, los movimientos comenzaron a ser lentos y profundos, ambos se besaban y sonreían.

El choque de pieles, los chasquidos y gemidos hacían eco en aquella habitación, luego de una buena ronda de sexo por todo el lugar, ambos estaban exhaustos en la cama.

—Lo amo hyung. —sonrió Jimin. —lo amo con toda mi vida. —le dio un corto beso en los labios.

—También te amo Jimin. —le acarició la mejilla. —Vístete iremos a comer.

—Claro hyung. —se levantó mientras se ponía la camisa de su novio.

Luego de vestirse ambos chicos salieron rumbo a un restaurante de comida rápida, al llegar ambos se dirigieron a una mesa mientras esperaban ser atendidos.

—Ya vendré. —se levantó uno de ellos. —pide lo mismo que tú.

—¿A dónde irás? —lo vio confundido.

—Al baño será rápido. —le dio un corto beso y se alejó.

El otro solo vio como se iba y suspiro mientras que uno de ellos esperaba el otro en el baño se miraba en el espejo, de su chaqueta sacó un bote y leyó lo que decía sacó una pastilla y la llevó a la boca para tratarla.

Apego [YM][OS][✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora