Luna azul [Kuroko x OC]

Capitulo 2

23:41 PM

Lo primero que hizo Seiichi Futaba al ingresar a su departamento fue poner cualquier canción que pasara por la radio.

Se deshizo de sus zapatos y su abrigo en la entrada, y estiró sus músculos camino a la cocina. Con un bostezo tomó una botella de agua de la heladera y puso su bolsa de compras en la mesa. Sacando la comida preparada que había comprado, ya que no tenía ganas de cocinar, pensó en lo que había pasado hoy.

"Trabajará con nosotros, si pasa estos los próximos dos días de prueba." Tomó un trago de agua, la canción de la radio aún sonaba.

—James Arthur —murmuró distraída, agregando luego— Kuroko tetsuya.

8:40 AM

Caminaba por las calles con el frío colándose en sus huesos y los audífonos puestos con la música a tope en sus oidos, no obstante, a la gente no parecía importarle el frío, ya que a esa hora comenzaban a transitar las calles y las tiendas empezaban a abrir.

El incidente sobre haberse olvidado a aquel chico, quedó en disculpas a su jefe en su otro empleo de lavaplatos. La perdonó, con el día descontado, por supuesto. Más allá de haber trabajado un día sin paga, en su cabeza aún tenía al pequeño individuo de cabello celeste. Cuando hubo tenido la cabeza fría y lo pensaba con detenimiento, lavando los platos y secándolos, había llegado a la conclusión de que el peliazul efectivamente había estado en la mesa. Podía recordar que ella había mirado al otro asiento y lo vio concentrado ver el menú, además antes de que Futaba fuera a dejar la orden fugazmente lo vio levantando su mano en señal de que faltaba él, pero claro, con las prisas que tenía la joven no le había dado importancia.

"Pasó una semana desde entonces", pensó la joven ingresando al establecimiento por la puerta trasera "y aún recuerdo como me fui por la puerta delantera con mis cosas, sólo para verificar que el chico seguía ahí."

Olvidándose del asunto se dirigió a los vestidores, no saludó a nadie, aunque los había visto muchas veces. "Cómo en la secundaria", pensó quitándose los audífonos y colocándolos en el casillero.

La mayoría de mujeres que trabajan con ella en iban o venían del vestidor. Mientras se colocaba el uniforme escuchaba las conversaciones, las risas entre ellas, quién se enamoró de quién. Unos mechones negros le taparon la vista, bufó ante esa molestia y se hizo una coleta alta.

...

9:40 AM

La mañana había transcurrido sin inconvenientes. Futaba llenó tazas de café, fue de un lugar a otro, lo normal de todos lo días.

Justamente se retiraba a comprar su almuerzo ya que estaba en su descanso, cuando su jefe le hizo señas para que se acercara. De repente, Futaba sintió un deja vu y presentía que si cruzaba la misma puerta que había cruzado su superior encontraría a...

Y no se equivocaba, unos ojos azules le devolvieron la mirada tranquilamente.

La joven entrecerró sus ojos, "Esta vez no desaparecerás" pensó sin quitarle la vista de encima, éste simplemente escuchaba a su jefe, ignorándola. Estaba tan absorta mirando su precencia que no escuchó lo que le había dicho su superior. Sólo captó lo último.

—...Trabajará aquí —dijo. Futaba parpadeo confundida y solo respondió un "¿Perdón?"

Su jefe suspiró.

—Señorita Futaba, el señor Setsuya trabajará con nosotros, si pasa los próximos dos días de prueba. Si lo hace, será el que remplace a Arian.