VOLVIENDO A TI

PARTE 1

─ ¡WangJi ! WangJi! – Un muchacho de cabello castaño entraba corriendo hacia la sala de juntas –

─ Deja de gritar Qiong Lin ¿Qué pasa? – Pregunto el de orbes dorados, viendo al muchacho con una ligera sonrisa trayendo un papel en sus manos –

El otro sonrió ampliamente, mientras ponía el papel impreso delante de los ojos del novelista.

─ Tu próximo trabajo – Anuncio emocionado –

El de orbes doradas, tomo el papel comenzando a leer, para levantar la cabeza y conectar la mirada con la contraria.

─ No lo creo – Dejo la hoja a un lado –

─ ¡Que! – Tomo la hoja - ¿Por qué?, la historia es buena.

─ Es fantasía que se basa en habladurías en un foro de internet. Encima es una historia entre dos chicos, eres mi agente ¿Acaso no sabes que escribo?

─ Ya lo sé, pero el foro es muy activo ¿Sabes? – Camino, y sonrió nuevamente –

─ Sea lo que estés pensando, mi respuesta es no.

─ Lo más interesante es que busque algo de información y este supuesto Patriarca era parte de una secta y su pareja era nada más y nada menos que el famoso Hanguang-Jun

─ ¿Famoso para quién?

─ Escucha y no me interrumpas – Regaño – La cosa es que este muchacho era un gran cultivador y a la corta edad de quince años ya tenía desarrollado su famoso núcleo dorado.

─ ¿Por qué todo es famoso contigo?

─ Shhh, te dije – Rodo los ojos – Y este personaje es descendiente de la Secta Gusu Lan, ¿y quien fue su fundador? – Hizo cejitas - Fue el monje Lan An ¿Te suena?

El de orbes dorados se acomodó en su cómoda silla reclinable, mientras se cruzaba de brazos.

─ ¡Aja!, tengo tu atención – Sonrió el muchacho – Estaríamos hablando de tu tátara, tátara, tátara y otro tátara por las dudas, abuelo.

─ No sería mi tátara nada, estaríamos en si hablando del fundador de mi apellido– Levanto su mano derecha, mientras acariciaba su lóbulo ─ Igual, que tenga algo que ver con mis ancestros, no es suficiente como para un libro.

─ Claro que sí, además leí algo muy interesante – Saco su teléfono– Hay un usuario que tiro un dato y los del foro se pusieron locos.

El de ojos cafés se acercó inmediatamente para mostrarle.

─ "Vagaras eternamente, por los siglos de los siglos y solo descansaras cuando el dorado de sus ojos vuelva a brillar" – Recito el ojos cafés alegremente–

─ ¿Y eso que significa?

─ Según este usuario, fue una historia que le conto el abuelo, de su abuelo de su abuelo – Sonrió – Es la maldición que le lanzo la hechicera.

─ Estas demasiado feliz, te dije mi respuesta y es no.

─ ¿Acaso no entendiste el hechizo?

─ Es una maldición.

─ Es lo mismo – Se defendió – Aysh, le quitas la emoción – Repitió haciendo comillas con los dedos - "el dorado de sus ojos" ¿No te suena?

El otro le miro enarcando una ceja.

─ Sí que eres idiota - Suspiro frustrado - Ojos dorados, ¿Quién tiene ojos dorados?

─ No creo ser el único ¿Cómo se llama el foro? – Le restó importancia –