Uno

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P R I M E R M E S 


Rafael tenía 6 años cuando sus padres le dijeron que iba a convertirse en hermano mayor, pues, su papi Magnus estaba en embarazo.

Rafael había sonreído mientras preguntaba que qué significaba eso.

Alec sonrió, y cargó al niño para dejarlo sentado en su regazo.

—Significa que aquí —se inclinó hasta tocar el vientre aún plano de su esposo—, aquí, está creciendo un bebé. Tu hermanita o hermanito.

Magnus le miró enternecido.

—¿Aquí? —preguntó ceñudo.

—Si —respondió ahora el moreno—, ¿te gusta la idea de tener a alguien con quien jugar?

—Siii —sonrió ampliamente—, jugaré mucho con él.

—No solo se trata de jugar —habló Alec—, también deberás cuidar de él, recuerda que será más pequeño que tú.

—Si, papá. Lo haré -prometió, lanzándose encima de su papi para abrazarlo. 

Magnus lo recibió con gusto, dentro de un par de meses esto sería un poco más difícil.

Alec capturó el emotivo memento en una foto para el álbum familiar, antes de unirse al abrazo con los chicos de su vida. 

Familia Lightwood-BaneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora