Alexa Mason, una chica que perdió a su familia en un accidente aéreo y ahora tendrá que aprender a vivir con ello. Con el paso del tiempo se seguirá preguntando como es que fue la única que no murió de su familia en dicho accidente.
Ella y su mejor...
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—Eso fue raro—
—Definitivamente—
Quedamos en reunirnos con las chicas para ir a tomar algo saliendo de clases, al principio Rayhan no quería ir porque quería estudiar, pero Rachelle lo convenció ¿Quién en su sano juicio estudia los temas que apenas verán al día siguiente?; a pesar de ser tan diferentes, notamos que su hermanita es su debilidad y que son muy unidos
—¿Puedo preguntar algo?—
—Ya lo hiciste— él solo sonríe y se acomoda el cabello con los dedos sin decir nada
—Era broma, si puedes— espero que no me haya malinterpretado, tendré que evitar este tipo de cosas con él de ahora en adelante
—Ese tal Daniel ¿Tiene algo contigo?—
He de decir que me tomó por sorpresa, soy nueva y es evidente que no conozca a nadie, no entiendo su pregunta pero evito decirlo, por pena y por su rostro que no expresa emoción alguna.
—A penas hoy lo conocí— digo con sinceridad
—¿En serio? Parece que se conocieran de antes— el sorprendido ahora es él
—Nunca lo había visto en mi vida— No cuenta mi sueño —Es un buen tipo—
—Lo noté— por lo visto, no le simpatizó mucho que digamos
Llegamos con las chicas y los mellizos nos guían en el trayecto; hemos llegado a una librería que también es una cafetería, ¡Jamás había ido a una! Empezaré a venir más seguido, no me considero una fanática de leer, últimamente me ha llamado la atención y no estaría mal empezar a leer de vez en cuando, a parte no tengo para comprarme libros y tampoco quiero que mis abuelos gasten más en mí, este lugar sería una buena opción, no está lejos de casa.
Lo primero que veo, es un letrero donde solicitan personal que pueda manejar la página y redes sociales del lugar, desde el accidente muchas veces les dije a mis abuelos que me gustaría trabajar, ellos se niegan y me ponen muchos peros, podría hablar y plantearles sobre este lugar.
Al entrar nos encontramos con el lugar dividido, del lado izquierdo está la bibliotecaria junto a su escritorio atendiendo a una muchacha, justo a lado empiezan las estanterías de libros, no son muy altas pero si son largas y tienen muchísimos libros; del lado derecho se encuentran las mesas y sillas así como la pequeña cocina donde preparan bocadillos y bebidas, otro punto a mi favor, —No podrán decir mis abuelos que pasaré hambre— pienso... no se cuanto tiempo ha pasado que Rachell sacude su mano frente a mi cara
—No sale mucho de casa— dice Andrea haciendo una pequeña pausa, dudando si decir la verdadera razón o no —Le gusta estar en su cueva— agradezco que no mencione el accidente, aunque si Calista lo sabe, no creo que ellos no
—Perdón, me perdí por unos segundos— me siento apenada pero tiene razón Andrea, nunca salgo
—Ya lo notamos— Rachell pone los ojos en blanco y se ríe, empiezo a creer que tiene un Tic —Vamos a sentarnos—
