☆𝑲𝒊𝒏𝒌𝒕𝒐𝒃𝒆𝒓 𝑺𝒕𝒐𝒍𝒊𝒕𝒛𝒐

¹²

Lugares públicos
◇
AuHumanos

⚘

Sí había algo que Stolas detestaba era mostrar su afecto en público, no era por que no quisiera simplemente no podía y se llegaba a sentir incómodo sí alguien lo hacía. También se llevaba mucho el hecho de qué jamás había séntido mucho por alguien que no fuera un amigo cercano o su familia. A excepción de ese año escolar, muchos nuevos habían llegado, él ya era de segundo grado por lo que al ser el más inteligente de su grupo le tocaba formar parte del cómite de bienvenida deportivo, para su mala suerte era el grupo de primer año

Apenas había puesto un pie en el gimnasio, pero el aura a nuevo y novato ya se había hecho presente. A muchos les captaba la atención las chicas nuevas, era típico de sus compañeros. Pero a él, a él le había cautivado un chico bajito, de cabellos negros y piel casi acaramelada, se encontraba con un pequeño grupo de amigos jugando baloncesto. Vaya, su rostro realmente le calentaba, ¿qué sucedía sí ese rostro comenzaba a ponerse rojo, babear y...?

Sacudió su cabeza frenéticamente ruborizado por sus propios pensamientos, ¡por dios Stolas! Lo acabas literalmente de ver, ni siquiera le has hablado. Además, lo que acabas de pensar no es digno de alguien de tu presigio ni inteligencia, era algo vulgar y de baja clase, algo que debía se-

-¡Cuidado!

Sus pensamientos fueron brutalmemte cortados por aquel balón naranja que había estampado en su rostro tirándolo hacía atrás y rompiendo sus anteojos en el proceso. Todo el gimnasio se quedó en silencio mientras que el chico brillante se levantaba con la nariz sangrando, los cristales de sus anteojos regados y una cara de malhumor

Giró la mirada tomando el balón en manos buscando quién pudo haberla lanzado. No tardó mucho cuando el mismo chico de estatura baja se le acercó rápidamente extendiéndole la mano

-Hey, ¿estás bien? Lo lamento, se me ha resvalado

Stolas no podía creer nada, su rostro era mucho más resplandeciente de cerca y era asombroso. Dios sus ojos, quería a ese chico para él. Y por primera vez el mayor se sintió extrañado por todo lo que le estaba ocurriendo en un segundo

-Ahhh, ¿hola? ¿Necesitas ir a la enfermería?

Así de extraño fue el primer día conociéndose. Desde aquella vez ninguno pensó en llegar a ser tan contrarios y tan iguales a la vez. Stolas terminó siendo su tutor en la materia de astronomía y Blitzo su entrenador en educación física. Todo un cliché ¿no? Pero gracias a ese cliché, ambos llegaron a ser lo que eran ahora, todo comenzando con ese balonazo que le había dejado una contusión al mayor momentos después, una bonita relación entre compañeros, incluso hubo una época de rivalidad pequeña en el salón, pero después de eso ambos parecían ser bastantes cercanos. Hasta que finalmente y por un pequeño accidente ambos terminaron revelando ser pareja y bueno, a nadie le sorprendía, ya se veía venir. Lo que sorprendía más era cómo el mejor alumno de la academia rechazó a tantos chicos y chicas para terminar saliendo con un alumno de primer año aficionado al baloncesto

♤

-¡Anda Stolas, ¿qué te cuesta?!-Frunció el ceño caminando al lado del mayor

-Ya te dije que no, no me agrada, además... estamos en la escuela

-¡Pero sí ya todos saben que salimos!

-B-Blitzo, no hagas una escena aquí por favor-Se cubrió un poco con su libro que llevaba entre brazos ya que de repente, eran el centro de atención de todos. A veces odiaba que su novio fuera tan gritón

-¡Es que no es una escena Stolas, es la verdad, siempre es lo mismo!-Apretó sus puños dándose la vuelta-... A veces realmente creo que no me amas, nada de esto ha válido la pena

Stolas lo volteó a ver alterado. ¿no lo decía enserio verdad? ¡era su primera relación amorosa! ¿Qué demonios se hacía o decía en estás situaciones? Todos los alumnos comenzaron a murmurar entre abucheos y penas

El menor comenzó a caminar y el contrario tembló levemente soltando su libro

-¡B-Blitzo, espera!-dió pasos largos hasta él alcanzando a tomar su mano. El mencionado volteó sorprendido por eso, realmente estaban haciendo una escena aquí ¿no?-Lo lamento, tienes razón... es que, no sé como manejar esto, jamás he sabido

Todo el mundo decidió regresar a lo que hacían. A este punto preferían no estar entrometidos

-Stolas, sólo te pido algo de inciativa ¿si?

Los dos se quedaron viendo. El mayor asintió sonriendo levesito, recogió su libro y con temor y temblores tomó la mano del jugador logrando caminar por los pasillos con calma

💞

Cambié un poco la dinámica aquí jsjsjsb

Publicación:12/10/2020