Mextina: Príncipe Alfa

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Heya! Este one-shot ya tiene una historia! Busquenla en mi perfil~!

Hoy era un hermoso para la ciudad de los countrys los cuales estaban la mayoría alegres por que era uno de los desfiles donde se veía la familia real. constituida por Azteca, un gran alfa el cual su seriedad eh instinto de guerra lo llevo a ser el rey entre sus hermanos; Maya, una hermosa omega que le había conquistado el corazón desde un inicio, aparte de ser su predestinada claro esta; y México, su único hijo que era un Alfa con carácter fuerte y algo testarudo para cualquiera que lo conozca.

Estaban saludando a todos los ciudadanos como siempre con una sonrisa algo fingida ya que no le gustaba estar en esos desfiles, prefería estar en su casa jugando con sus perros. O cualquier cosa que sea diferente a esa.

Que aburrido era eso, saludar a la gente a la que gobiernas, ver que se ilusionan cuando las miras y que todas quieran ser tu. sin duda era un poco asfixiante para el alfa.. Para colmo, no encontraba a su predestinado aun así que, todos querían ser ese predestinado.

Hasta que un olor llamo su atención.. era uno que nunca había sentido antes, apenas podía olerlo así que miro hacia esa dirección y justo en la otra calle había pasado un chico, giro su cabeza hacia un lado como si se tratara de un cachorrito. su madre noto ese y palmeo el hombro de este.

- lo encontraste, ¿verdad?

- no se a que te refieres. - miro hacia ese lugar pero ya no estaba mas.

- ve a por el.. Yo distraigo a tu jefe. - le sonrió la omega.

México asintió y bajo del carro lo mas disimulado posible sacándose el saco que tenia y corrió hacia aquel omega. al llegar su alfa no aguanto y salio tirándose encima de el. el argentino pego un gritillo asustado y miro con algo de miedo a aquel lobo alfa que estaba encima suyo.

- uy y la reputa madre - dijo con rabia. - no se por que dejaste salir a tu lobo pero voy a llegar tarde. - y empezó a insultar al aire.

Argentina se levanto de el suelo y se paro para darse la vuelta eh irse.escucho un quejido por parte del lobo a lo que bufo dejando le irse con el, pero antes junto la ropa que se había roto ya que generalmente tenes que estar desnudo para convertirte.

Entonces el argentino se resigno a ir a su trabajo en el hospital con el alfa que no sabia para que lo quería. mientras el alfa del mexicano estaba feliz por tener a su omega a su lado y así ver como era.

Minutos después llegaron a la recepcionista del hospital a lo cual el portador el sol le dijo que se quedara quieto en lo que se cambiaba, el alfa le hizo caso recostándose en un lugar cómodo junto a la puerta en donde se había ido el omega. unos niños lo vieron y empezaron a acariciarlo y a rascarle la cabeza o tirando le de la cola. 

A decir verdad, ya estaba acostumbrado a ser tratado como un juguete con los niños ya que su mama le obligaba a jugar con los príncipes y princesas de otros reinos en lo que discutía con los reyes de estos. 

Al volver el rubio alejo a los niños del canino el cual agradeció internamente por eso. Le hizo señas para que lo siguiera y lo llevo hasta su consultorio junto a las rasgadas prendas. El omega no sabia por que lo ayudaba, solo sabia, gracias a que su Omega le advirtió, que si no lo hacia su omega le molestaría hasta el cansancio.

En estos momentos se arrepentía de haberse mudado a esa ciudad... También de haber nacido.. Pero eso era cosa de todos los días así que eso no le presto mucha atención.

- siéntate en la esquina en lo que logró contactar con tu madre. - dijo mientras se sentaba en su silla.

El alfa se sentó a un lado de este poniendo su cabeza en las piernas del omega llorando como un cachorro por mimos.

- ay como jodes boludo. - dijo con rabia mientras le acariciaba la cabeza.

Tuvo que atender a sus pacientes con el lobo sentado ahí intimidado a algunos alfas que entraban con sus hijos.

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La reina tuvo que buscar a su hijo ya que el argentino le había llamado molesto, ya que casi mordió a un Alfa que quiria saludarlo.

Todos hacían referencia a su paso, les sorprendía verla allí sin su esposo, ya que iban a todos lados juntos.

Entró al consultorio que era y se encontró al argento regañando a su hijo por lo ocurrido.

- ..hola. - dijo algo nerviosa. Hace tiempo no hablaba con un Omega hombre.

- hola señora. - le sonrió y miro al lobo. - es... ¿su hijo? O ¿viene por alguna consulta?

- es mi huerco. - dijo poniendo la ropa del menor encima de la mesa del consultorio. - disculpe la tardanza.

- no hay de que preocuparse. - sonrió de lado. - había un desfiles de no se que cosa y en la carretera principal. - dijo acompañaba a la omega, que estaba confundida, mientras la acompañaba afuera del consultorio.

se quedaron bajo la mirada de todos los que estaban dejando incomodo a ambos. se quedaron en silencio hasta que el príncipe grito un ''ya estoy'' haciendo que los omegas entren. 

México abrazo al amante del mate con una sonrisa mientras ocultaba su rostro, que estaba ruborizado en el pecho del mayor.

- al fin te encontré. - murmuro con una sonrisa de lado feliz por eso.

- señora... ¿usted sabe de que habla?  

- tu eres su predestinado. - respondió con una sonrisa. 

''oh, mierda... lo ultimo que faltaba'' pensó mientras miraba al menor.

¡One-shots! (Argenxtodos) CompletoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora