Fiesta

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Kara y yo paseábamos hacia mi casa hablando de nuestras vidas y de cotilleos de lo que nos habíamos enterado cuando Sandra llamó.

---- Llamada ----

Yo: Buenaas

San: Tía, estas con Kara? Os tengo que contar una cosa.

Kara: ¿Qué pasa guapa?

San: Vale ahora que se que estáis las dos tengo notición. Me he enterado de una fiesta en casa del tío guapo de clase de Alex, estamos invitadas.

Yo: Me apunto.

Kara: Ni lo preguntes.

Yo: Nos vas diciendo por whatsapp como va la cosa y si queréis nos preparamos en mi casa antes de ir.

San: Vamos hablando. Os quiero.

Kara: Te queremos, puta.

-Fiesta en casa de un tío que todavía no me conoce, genial. Puede que sea mi próximo punto. - Le dije a Kara riendo.

-Oye no puede ser, tu consigues al camarero, al maromo de ayer y a este? Ya basta tía. - Se quejó Kara - A que al final me lo ligo yo.

-Si veo a alguien mejor te dejo a este. - Le guiñé el ojo.

***

Llegamos a la fiesta y Alex nos esperaba en la puerta. Le dio un beso a Sandra y entramos detrás de el. La música estaba altísima y había gente por todas partes. En la barra de la cocina un chico trabajaba como barman para sus amigos pero igualmente conseguimos que nos sirviese también a nosotras. Con copas en las manos San y Alex desaparecieron así que Kara y yo decidimos dar una putivuelta para ver el panorama y ver si conseguíamos encontrar al dueño de la casa. No se en que momento, perdí a mi compañera en aquel chalet y salí al jardín en su busca, pero en vez de eso me encontré un montón de gente jugando a Beer Pong.

-Madre mía como me gusta el Beer Pong -dije- otra razón absurda para beber hasta no poder mas, que le den a Kara, te amooo.

Me uní a la partida pero los vasos no estaban llenos de cerveza sino de diferentes tipos de licor y alcoholes y aunque se me da genial este juego acabé borracha, como siempre. Terminé mi tercera partida y entre en la casa, dirección al sofá para sentarme un rato, cuando alguien me agarro de la cintura y me paró. Me di la vuelta con la mano en alto dispuesta a soltar un sopapo pero me tope con una cara conocida, el camarero del Ágora. Me seguía agarrando de la cintura y se me quedo mirando fijamente sin decir nada, pero yo soy un poco bocas asique solté lo primero que se me pasó por la cabeza.

-¿Me vas a dejar de follar con la mirada o lo vas a hacer de verdad?

-Estaba pensando exactamente lo mismo sobre ti. -Levanté una ceja- pero el ver tu cara de confusión me hace mas gracia.

- Ya se que has echado de menos esta cara desde esta mañana, es complicado alejarse de alguien como yo. -Sonreí.

-La música está muy alta, puedes decírmelo un poco mas cerca? No te escucho demasiado bien. -Respondió el pegándonos mas uno al otro con su brazo.

La verdad es que la música si que estaba muy alta y era complicado tener una conversación, pero ese truco ya me lo sabía yo demasiado bien y como siempre digo, hay que hacerse la poco interesada para que se interesen mas. Así que hice lo que siempre hago en estas situaciones, me acerque a su oido y le susurre con mi voz mas seductora.

-No me hace falta repetirlo porque todos sabemos que es verdad. -Le di un beso en la mejilla, me puse frente a el, guiñe un ojo y me aparté para dirigirme otra vez hacia el sofá.

Como era de esperar mi truco funcionó, siempre funciona. Me senté en el sofá y el se sentó a mi lado. Al otro lado del salón, sentada en el otro sofá estaba Kara, como no, junto al dueño de la casa. Cruzamos miradas y nos empezamos a reír. Kara llevaba un paquete de tabaco en la mano y me hizo un gesto para que saliésemos a fumar.

Me levanté y agarre a mi amiga de la mano mientras sentía varias miradas posadas en mi. Nos sentamos en una mesa del exterior y hablamos de lo graciosa que era la situación de como cada una había conseguido exactamente lo mismo y había acabado en el mismo sitio pese a no ir juntas. Acabamos los cigarros y nos quedamos un rato hablando antes de volver al salón.

- Bueno tía, al final te has quedado tu a Jairo, guárdalo en la agenda por si hace otra fiesta de estas y nos invita. -Reí.

-Te llevo ventaja, tengo su numero, su instagram y hasta su twitter. Para no perderme ningún movimiento. Ha resultado ser un tío de puta madre. Tu de todas formas no te has quedado a dos velas, no? El que estaba sentado a tu lado no era el camarero de esta mañana?

-Se llama Wes y la técnica del tonteo pasivo agresivo siempre funciona. Lo tengo en el bote pero si nos quedamos mas tiempo aquí fuera se me va a acabar el chollo.

Las dos nos levantamos y volvimos al salón, para encontrar que mi sitio ya había sido ocupado por una chica que no paraba de tontear con mi ligue de la noche. Pero en cuanto me acerque volví a sentir unas cuantas miradas sobre mi, incluida la de el y la de ella, quien me miraba de arriba abajo con una ligera cara de asco. Me acerque a ella y la mire fijamente.

-Perdona cariño, creo que ahí estaba sentada yo. -Sonreí.

Lo siento bonita pero tu sitio ya esta ocupado. -Respondió condescendiente.

En ese momento Wes me agarró de la mano y me sentó sobre el, haciendo que la otra se pusiese roja.

-No te preocupes guapa, ya no hace falta que te levantes -Volví a sonreír.

Se levanto y salió del salón, dejándome con lo que quería y con Kara muerta de risa en el otro sofá.

Me giré un poco a la izquierda para sentarme mejor y para poder ver a Wes, quien no paraba de reírse.

-Gracias a que has venido, no me dejaba en paz, eres mi salvadora.

-Yo solo he aparecido en el momento correcto en busca de lo que ya era mío, el resto ha sido cosa tuya. - Puse mi mano izquierda detrás de su cabeza y empecé a acariciarle el pelo.

-Pues eso, que has venido a por mi. - Agarro mi pierna con una mano y rodeo mi cintura con la otra.

-Mas bien hablaba de mi sitio, yo nunca he dicho eso. - Puse mi boca a un par de centímetros de la suya.

Sentía su respiración entremezclarse con la mía mientras nos mirábamos fijamente a los ojos. El los cerró, yo los cerré y acabo con el espacio que quedaba entre sus labios y los míos con un beso. Bajó su mano de mi cintura a mi culo y lo agarró con fuerza. Nuestras lenguas se juntaban en un baile coordinado y nuestros cuerpos se pegaron mas. Separo nuestras bocas un par de centímetros y empezó a desplazarse con pequeños besos hasta mi lóbulo para acabar en mi cuello y volver a subir hasta mi boca.

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Vale gente, no se si alguien llegará a leer esto que he escrito pero espero que os guste y comentéis y votéis si os apetece. La verdad es que con que lo lea alguien me es suficiente.

Os dejo por aquí las personas que he elegido para los personajes y sus instagrams.


Prota:

Elle (@sophfloyd)

Amigas:

Kara (@billiedawningle)

Sandra (@jannaaaeeee)

Camarero:

Jan - Wes (@wesleytucker)

El amor es cosa de dosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora