[Sinopsis]
Peter Pan y Tinker Bell , han muerto en manos de humanos, con el único motivo de sobrevivir, los Mistiks, hadas de alas hermosas con belleza cautivadora, cierran las barreras de Bibulum, su hogar, a cualquier otra especie.
Sería imposible...
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Las Hadas son seres mágicos e indefensos, son seres especiales, ya sean por su magia o por el simple hecho de tener unas preciosas alas detrás suyas. Por años estas eran consideradas Sagradas y todas las demás criaturas las respetaban y cuidaban. Ellas eran tan solidarias con todos en el bosque que el día que se mantuvieron en cautiverio en su aldea toda alegria o emoción que tenían los demás al verlas se esfumó.
Las hadas, hay muchas, las que predominaron mas y por mucho tiempo son los Mistiks. Sus hermosas alas de colores, sus ojos hermosamente pintados y su extravagante ropa sin importar el tamaño era una preciosura. Los Mistiks eran diferentes a las hadas comunes ya que ellos podían cambiar su tamaño, lo cual lo usaban claramente a la hora de relacionarse con otras especies.
Todos querían a los Mistiks y ellos querían a todos... bueno, eso cambió el día que anunciaron la muerte de Tinker Bell y Peter Pan ante las manos de los humanos.
Ellos no querían eso, tenían miedo de que siguiera pasando y no tuvieron mejor idea que encerrarse en ellos mismo.
Bibulum, la aldea o Reino de los Mistiks. Nadie lograba llegar ahí a menos que seas llevado por uno, las barreras simplemente hacen imposibles encontrar la aldea por cuenta propia.
Luego de años nadie volvió a Mistiks, muchos decían que habían sido extintos, otros que se creían mejor que los demás seres, por eso no salían de las profundidades de bosque. Lo que no sabían era el horrible miedo que las primeras generaciones tenían de salir, y pasando los años ya casi se había perdido el miedo, pero aun no salian por la regla del Rey Hada.
Todo hasta que el príncipe se aburrió de la soledad del castillo y voló hasta la frontera de Bibulum con el bosque donde se ese encontró con algo inusual.
— Hola me llamo Jimin y soy un Mistik ¿y tu? —exclamó bajito al ver, un ser extraño que estaba sentado en el rio.
Cuando este se volteó el corazon del Jimin empezo a latir con rapidez. No supo porque no estaba huyendo como le habían dicho y enseñado, por su parte, solo se sentó al lado del humano.
— Y-yo soy Yoongi y soy aprendiz de Mago. —exclamó mirando los hermosos ojos turquesas del hada.
— Un gusto Yoongi
— El gusto es mio al ver algo tan bonito como tú.
Un amor a primera vista que perduró años.
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