Érase una vez

"Una última historia"

El gran salón estaba iluminado tenuemente, a la espera de que la pareja haga su aparición, había un murmullo entre los invitados, todos conmovidos por la ceremonia y un poco preocupados por el estado de quien había interrumpido la boda, había sido algo bastante tragicómico en realidad, algo con lo que molestar al adulto en los meses e incluso años que seguían.

Un sollozo cerca de la entrada advirtió a todos que los protagonistas de la noche habían llegado. Varios de los invitados no pudieron resistir rodar los ojos ante lo dramático que estaba siendo el padre de la novia, casi había arruinado la boda de su hija.

La iluminación del salón comenzó a aumentar mientras los novios se acercaban al centro de la pista bajo la atenta mirada de varios familiares y amigos. Una canción suave comenzó a sonar cuando llegaron al centro e inmediatamente comenzaron un vals.

-Deberías tratar de calmarte-  dijo la mujer al lado de su esposo- Nuestra hija ya esta enojada por lo que hiciste en la iglesia- su voz sonaba molesta, pero por dentro estaba a punto de explotar en carcajadas, en especial por lo divertido que se veía su esposo llorando y refunfuñando

-Pero Mari!!- dijo con un puchero- ella es mi niña- unas lágrimas salieron de sus ojos- es muy joven para casarse

El rostro de Marinette cambio a una sonrisa comprensiva, abrazando a su esposo y dirigiéndose al centro de la pista al igual que el resto de los invitados- Nosotros nos casamos a los 20, eramos mas jóvenes que Emma

-No es lo mismo- dijo Adrien volteando el rostro buscando a su hija-  yo quería que esperara hasta los 30 para tener citas- abrazo a Marinette por la cintura acercándola mas a él

-Tiene 29 Adrien ¿que es un año?- sus brazos rodearon su cuello y se puso de puntillas para que sus ojos quedaran frente a los de su esposo- debes estar feliz por ella, en especial porque no dieron tantas vueltas para estar juntos- le dio un pequeño beso en los labios para luego esconder su rostro en su pecho- ellos lo supieron al instante, que eran el uno para el otro 

-Yo también lo hice- Adrien la abrazo más fuerte, sintiendo que su molestia disminuía, Marinette tenía razón, su hija era feliz y eso lo hacía feliz

-¿En serio Agreste? ¿al instante?- Marinette se separó de él mirándolo de manera sarcástica

-Si M´lady- su sonrisa pareció brillar- lo mismo contigo ¿no?- había una pequeña burla en su voz- solo que…- se acerco mas, susurrando para que nadie mas escuchara- las máscaras lo complicaron todo... pero lo supe al momento en que te vi- se alejó para darle una vuelta, a lo que Marinette grito por lo repentino del movimiento, escuchando las risas de los demás invitados

-Hey!- uno de los invitados grito- no opaquen a los novios- ante eso se dieron cuenta que Emma y su esposo los miraban divertidos junto a todos los invitados

-Nos dejamos llevar- se disculpó Adrien abrazando a Marinette y acercándose a Emma y su pareja- ¿me permite bailar esta pieza con usted Little princess?

-Claro- respondió Emma tomando la mano de su padre, mientras que veía a su esposo invitando a su madre a bailar- No me robarás ¿verdad?

-No me des ideas- balbuceo, llegando al centro y comenzando a bailar- disculpa por lo que pasó en la ceremonia

-En realidad, mi instinto me decía que algo asi podría pasar- respondió Emma mirando el rostro de su padre, el paso de los años se notaban en las arrugas que ambos, tanto su madre como su padre, poseían- le advertí para que no se asustara

-Eso explica por qué no salió corriendo- reflexionó Adrien, sabía que su yerno tenía respeto por él, por no decir miedo, y que el haber hecho lo que hizo pudo haberlo asustado.

-¿Porque lo hiciste? se que no querías pero aun así…

- En ese momento te vi, Emma

-Bueno, si...era yo- dijo de manera divertida ante lo dicho por su padre

-No me refiero a eso...- Adrien miro hacia abajo por u momento, suspirando- te vi, vi a una pequeña niña en el altar, vi a mi bebe, a mi little princess...aceptando pasar el resto de su vida con…

-Papa…- la voz de Emma tembló, aquello le conmovió 

-Se que ya eres una mujer, tan decidida como tu madre, pero en ese momento...quería protegerte, en ese momento, cuando decías acepto solo pensé en mi pequeña berrinchuda que me pedía historias, recordé las veces que me pediste ayuda, que necesitabas consuelo, las veces que te seguía a las fiestas para que no...

-¿Que tu que?-

-Olvida lo último…-nego con la cabeza y  trató de concentrarse, no debía  revelar las veces que la siguió o que le pidió a Hugo o Luis que lo hicieran- eres mi pequeña, y quiero que lo recuerdes...siempre estaré alli para ti

-Lo sé- respondió para luego abrazar fuertemente a su padre mientras terminaba la canción- ¿te gustaría bailar una vez más?- pregunto sabiendo que su padre no la rechazaría, después de todo, sabía que terminar cerca de la puerta significaba que aun quería sacarla de allí, rodó los ojos ante el pensamiento

-Claro princesa

-Y...¿podrías contarme una última historia?

El rostro de Adrien se iluminó, antes de comenzar a relatar, como una historia de fantasía, lo que en realidad era su vida.

Fin

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Honestamente sentía que el capítulo anterior no era un buen final para esta historia así que escribí esto...

Sin nada más que decir/escribir me despido

¡¡¡Gracias por leer!!!