Thank You For Change My Life

Cap 4|"Ella es gorda y fea", gritaron. "No, ella es perfecta" susurró|

{Final del capítulo anterior}:
Creo que la idea de ponerme una campera y una remera de mangas cortas fue mala idea, el hecho de que la tela de la campera me roce las muñecas me ardía. Al llegar a mi casa me deshice de mi campera y la tiré sobre mi casa, Ugh, tendría que bañarme. 
Tomé alguna ropa del closet y corrí al baño. Me deshice de mi ropa restante y la puse en el canasto de la ropa sucia, abrí la ducha y me metí en ella, después de asearme me vestí y bajé a mirar tele, parezco un pato caminando, bien ___. 
Si pudiera entraría a facebook pero me lo hackearon. Imbéciles. 
Prendí la tele y solo daban estupideces, nunca dan nada. Me levanté bufando y tomé las llaves de la puerta y salí de la casa.
Llegué a una de las plazas más bonitas de mi ciudad, no sé por qué lo era, supongo porque era colorida, eso decía la gente. Muy cerca de mi casa no estaba, me senté en una banca, color, mmh ¿blanca o gris? Da lo mismo, tomé mi celular y comencé a jugar con él, distrayéndome, volando en el mundo de mi celular, ni siquiera me di cuenta de que alguien se me acercaba. 
-Hola. –dijeron-
Levanté la vista para encontrarme con… ¿RND? ¿Qué? No es posible, claro que no. Fruncí el seño y bajé la mirada para encontrarme otra vez con mi celular, suspiré.
-Hola. –susurré-
-¿Cómo estás? –Bien dicho RND-
-¿Tú? –Frunció el seño y me miro extrañado- 
-Bien. 
Asentí con la cabeza y levanté la mirada, ¿Qué le puedo decir? ¿Qué tengo que cuidar a mis hermanos? No claro que no, no tengo hermanos. 
-Me tengo que ir. –me levanté los más rápido que pude y comencé a caminar, él me tomó del brazo y me cinchó, lo miré aterrada y me zafé bruscamente de su agarre, si él lo que quiere es hablar como a intentado toda la semana que me lo diga, pero que no me toque, no soporto que me toquen y menos chicos. 
-¿Te acompaño? –me miró-
-¿A dónde?
-A tu casa. –dijo obvio-
-Oh, no. Voy sola, gracias. –Susurré un poco más fuerte sin mirarlo-
-¿Segura?
-Sí.
-¿Vives cerca?
-Sí. –repetí-
-Mentira.
-¿Qué?
-Mentira, no vives muy cerca que digamos.
-No te importa donde vivo.
-No, pero sé dónde vives. –sonrió-
-¿Y? ¿Me puedo ir?
-No, te llevaré a tu casa.
-No. –Susurré más fuerte-
-Es peligroso por acá.
-Se cuidarme.
-Claro que no, enserio es peligroso.
-¿Cómo lo sabes?
-Solo lo sé.
-No te conozco, no iré contigo.
-Conoces a mi hermana.
-No.
-Payton.
-¿Quién es?
RND soltó una carcajada y se rascó la nuca.
-¿Enserio no sabes?
-He dicho que no. –Dije un poco más fuerte y enojada-
-No te enojes, solo te pregunté. Si dices eso está bien, pero sé que la conoces.
Bufé enojada y puse mis brazos cruzados sobre mi panza, necesito irme de aquí.
-Ahora sí, te puedes ir, si quieres.
Asentí y comencé a caminar, volteé y RND se estaba subiendo a un auto blanco, wow, bastante lindo. Seguí caminando y me topé con Christian. ¿Qué? ¿Todos los del colegio se les ocurrió venir aquí? Lo miré aterrada, él solo sonrió y se me acercó más. ¡Mierda! ¡Corre ___, corre! Decía mi mente. Volteé y empecé a correr, sin pensarlo dos veces abrí bruscamente la puerta del copiloto del auto de RND y me metí en él, la cerré y le puse tranca, me había olvidado de que RND estaba ahí. Mala idea ____, traté de abrir la puerta sacándole la tranca, no pude, seguramente le puso la tranca esa, para niños.
-Cálmate. –Me miró- ¿Qué paso? –rió-
-Nada, tenías razón es peligroso, como vos y tus amigos.
-¿Qué? No entiendo.
-Tu amigo, Christian.
-Sí, ¿qué pasa con él?
-Me corrió hasta aquí, ¿que no vez? Déjame salir de aquí.
-Tú te metiste aquí.
-Pensé que no estabas.
-No te haré daño.
-¿Cómo se yo eso?
-No sé, averígualo, ¿te llevo a tu casa?
-No, he dicho que no, no confío en ti.
-No te haré nada, te dije.
-Solo te creeré por hoy. –Dije abrochándome el cinturón de seguridad-
-¿Eso es un sí? ¿Te llevo?
-Sí, solo porque ahí afuera está Christian. 
-¿Le temes?
-No es eso, solo que… nada, déjalo.
-Ajam.
Encendió el motor y puso en marcha el vehículo, aún no puedo creer que accedí a que el amigo del que me insulta y pega diariamente me lleve a mi casa, esto está muy mal, aunque RND no me quiera hacer daño, que lo dudo, está mal, no me puedo acercar a él. 
-¿Quién es tu hermana? –escupí-
-Payton. –Dijo mirando el camino-
-¿Qué Payton?
-Mi hermana. 
-¡Hey! –Reí pero rápidamente tapé mi boca con mis manos-
RND me miró y soltó una carcajada, volvió su vista al camino.
-Ya, enserio. No puede ser que no la conozcas, si me habló de ti.
-Puede que todos te hablen de mi, o mejor dicho de “la rara” –dije haciendo comillas en el aire-
-¿Rara? 
-Déjalo, ¿sí? Y, ni idea quien es “Payton” –volví a hacer comillas pero está vez puse mis manos en su cara-
-Te juro, no puedo creer, capaz que me estoy confundiendo… -lo interrumpí-
-¿De hermana? Seguramente. –tapé mi boca para reír-
-No. –Rió- De chica.
-Sí, eso también.
Paró en seco, frente a mi casa y me miró.
-Siento haberte molestado, insistiéndote a traerte. –Puso sus labios en una línea recta y levanto sus hombros-
-Yo tendría que disculparme, no debí molestarte.
-No me molestaste, para nada.
-Igual.
-Como digas.
-Gracias. –susurré-
-No te escuché. –rió-
-Gracias –volví a susurrar-
-No te escucho. –Dijo acercando su oído.-
Levante la barbilla y sonreí a medias. –Sé que me escuchaste. 
-Okey, tu ganas entonces. De nada. –rió-
-Adiós-
-Adiós ____.
Bajé rápido del auto y lo rodeé para entrar a mi casa, ¿Cómo sabe mi nombre? Me está dando más miedo. Tomé mi llave y la metí en la cerradura de la puerta, giré la llave y la puerta se abrió. El lugar estaba oscuro, y sin nadie, prendí la luz y le hice una seña a RND de que todo estaba bien, supongo que por eso se había quedado estacionado, él asintió y puso en marcha el auto. 
Caminé a la cocina y tomé una taza y en ella puse un sobrecito de té, calenté agua y la puse en ella, no tenía hambre, bueno si, pero no comería, necesito adelgazar. Me senté en la mesa y con ambas manos en la taza y los ojos en un punto de la pared que estaba al frente mío comencé a tomarlo.