La muerte del heredero

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Ya habían pasado 4 años desde que La Paz entre vikingos y dragones había terminado nuestro jinete y dragón favoritos se encontraban en la orilla del dragón cada uno por su parte...

Hipo estaba en su cabaña y el dragón estaba en los establos hablando y jugando con sus compañeros dragones como siempre hace cuando tiene día libre.

Pero ahora nos sentaremos en hipo haddock... hoy no fue su día pues hubieron muchas quejas de parte de sus "amigos" y su padre, pues fueron las quejas de siempre.

Patan se quejaba de que no era un gran líder y que jamás sería un buen jefe.

Los gemelos se quejaban de que querían un día libre o algo parecido para poder divertirse un día completo.

Patapez se quejaba de que quería seguir descubriendo más sobre el ojo del dragón y sobre los dragones e islas al rededor del archipiélago.

Astrid se quejaba de que hipo nunca tenía tiempo para ella y que debería dejar su obsesión por atrapar a sus enemigos atrás.

Su padre se quejaba de que estaba muy lejos de Berk y que tenía que prepararse para ser el futuro jefe de Berk.

La única persona que no se quejaba con el era su hermana de corazón heather que le demostraba todo su apoyo y trataba de hablar con su equipo para que dejaran de quejarse con hipo.

Claro la peli-negra no lograba nada y el castaño ya estaba arto.

A media noche mientras todos dormían agarro varias hojas y empezó a escribir cartas para todos aquellos que llegó a apreciar en toda su vida. Luego de escribirlas se torturo a sí mismo hasta más no poder se corto los brazos, las piernas y el abdomen.

El quería hacerse sufrir así como había sufrido cuando era un niño.
Se golpeó a si mismo todo lo que pudo, y luego que abajo de él había un gran charco de sangre en los establos frente a todos los dragones que le gritaban que no lo hicieran ya que todos estaban encerrados al igual que su mejor amigo, se colgó y se ahorcó.

En ese momento el mundo de Chimuelo se derrumbó y sintió como si le hubieran tirado un gran balde de agua fría todos los dragones estaban destrozados miraron a su salvador morir ante sus ojos.

Al día siguiente.

Los gemelos se acercaban a los establos pues hoy les tocaba patrullar aunque no les gustara su líder los obligaba un poco pero al abrir un poco las puertas un camino de sangre empezó a salir pensaron que era de un dragón y abrieron las puertas rápido pero al hacerlo ambos hermanos soltaron un fuerte grito que llamó a todos sus amigos.

Ambos chicos se acercaban al cuerpo de su líder que se encontraba colgado del techo ambos en shock cuando los demás llegaron igual gritaron y soltaron al chico miraron como los dragones estaban destrozados y los sacaron de las jaulas.

Heather se acerco y abrazo a su hermano como si su vida dependiera de ello, lo había perdido.

Entre todos llevaron a hipo a su cabaña y lo acomodaron en su cama y le mandaron un correo del terror a su jefe estoico el cual llegó a los pocos minutos junto a bocón los cuales abrazaron y le lloraron a hipo.

Todos estaban muy mal pues habían perdido a alguien especial en la vida de todos.

-Cartas de un difunto marginado-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora