¿Accidente o Destino?

Capítulo 22

El plan de Wang YiBo entró en acción, fue a visitar a sus padres por la tarde sabiendo previamente que Lay estaría ahí.

–Hijo ¿cómo sigues? ¿te ha dado otro ataque de asma?

–Sólo un par de veces, nada que no pueda manejar.

"El par de noches que llevo llorando por Zhan Ge fueron las causantes de esos ataques".

–Hermanito es una lástima que te haya regresado el asma. –dijo sarcásticamente Lay

–No es el único problema con el que nací hermano. Papá voy a hablar con un socio en seguida vuelvo.

YiBo se dirigió a la sala para hablar con su socio, hablaron de cifras, quedaron de firmar el contrato y hacer la transacción al día siguiente. Al momento de estar hablando se aseguró de que Lay lo estuviera escuchando, terminó la llamada y dejó la tarjeta de su socio en la mesita a un lado del teléfono de la casa.

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–Recuerda que no eres el único culpable, trata de descansar un poco antes de verlo.

–Gracias por todo Ian.

Xiao Zhan había regresado a su hogar, sólo su madre sabía que él estaba de regreso y le pidió guardar el secreto hasta que tuviera la oportunidad de hablar con YiBo.

–¿Hasta cuándo piensas seguir ocultándote hijo? –dijo la preocupada madre pues su hijo había bajado de peso, su rostro reflejaba una gran tristeza... no había rastro de aquella sonrisa...

–No lo sé, aún no lo sé –Zhan se regresó a su habitación.

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En medio del drama de los amantes la manzana de la discordia continuaba con su jugada...

–Ya están separados ¿contenta?

–Sí mucho, te transferiré tu dinero mañana a primera hora.

–Hubo sexo así que recuerda que espero el bono.

–Tranquilo, lo tendrás.

Después de reclamar su dinero Lay sacó la tarjeta del socio de YiBo y comenzó a marcar: –Buenas tardes señor Li sé que acordamos hacer la transacción mañana pero olvidé que tengo otros negocios ¿cree que sea posible verlo hoy para firmar el contrato y hacer el pago?

–Claro, me parece bien. ¿Le parece el café Luna a las 8:00 pm?

–Perfecto hasta entonces señor Li.

Al momento de colgar la llamada el ansioso Li marcó rápidamente a YiBo: –¡El león ya puede atacar!

–¿De qué hablas Li?

–La presa mordió el anzuelo.

–Perfecto ya sabes que hacer.

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Xiao Zhan sabía que debía de poner orden en su vida pero su conflicto interno era muy grande, se culpaba a sí mismo por no creer en su amado. Si alguien había defraudado, si alguien había traicionado...había sido él. Reunió todo el valor que pudo y decidió ponerle fin a su tormento de una vez por todas.